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Las mejores escapadas cerca de Teruel

Las mejores escapadas cerca de Teruel

La ciudad de Teruel se encuentra en el centro de un área llena de atractivos de todo tipo, desde paisajes singulares hasta restos históricos de gran interés. Te traemos algunas de las mejores escapadas cerca de Teruel sin alejarte demasiado de la ciudad, ya sea en busca de naturaleza o persiguiendo el esplendor cultural de la historia de esta tierra.

Planes en los alrededores de Teruel para todos los gustos

La Laguna de Gallocanta, un humedal de agua salada

Laguna de Gallocanta
Laguna de Gallocanta. | Shutterstock

Compartido a medias entre las provincias de Teruel y Zaragoza, este humedal es uno de los más importantes de Europa, y tiene poco que envidiarles a otros más ilustres como Doñana. La Laguna de Gallocanta, de agua salada, es el hogar de aves tan vistosas como las grullas, que llegan en otoño a la que es su segunda residencia. Desde Teruel hay apenas 100 kilómetros, que se pueden hacer en poco más de una hora para recorrer este entorno privilegiado a pie o en bicicleta, aprovechando alguno de sus muchos itinerarios. Si quieres disfrutar de la compañía de las más de 60 000 aves que la visitan, no olvides acercarte durante el otoño o el invierno.

El Castillo de Peracense, una fortaleza roja

Castillo de Peracense
Castillo de Peracense. | Shutterstock

Los amantes de la parte más épica de la historia tienen suerte, dada la variedad e importancia de los castillos de Teruel. Uno de los más sugerentes lo encontramos en un pequeño pueblo de 89 habitantes a 45 minutos de la capital: Peracense. Situado a 1400 metros de altitud, la fortaleza destaca por los tonos rojizos de sus muros, que le confieren un aspecto singular. La razón del color se debe al material utilizado, el rodeno de la zona, que hace que se integre de maravilla en el entorno. El Castillo de Peracense es, sin duda, un testigo único de la historia, ya que sus orígenes se remontan al siglo XII, cuando se transformó una antigua fortaleza musulmana en este conjunto inexpugnable del que destaca la Torre del Homenaje.

El Parque Cultural del Maestrazgo, patrimonio natural e histórico

Cantavieja
Cantavieja. | Shutterstock

El Maestrazgo es una famosa comarca histórica, que recibe el nombre de los grandes maestres de órdenes militares como la del Temple, Montesa o San Juan, que tenían la jurisdicción sobre estas tierras. La comarca se divide entre las provincias de Teruel y Castellón, y en el lado aragonés, en pleno Sistema Ibérico, alberga una maravillosa mezcla de paisaje y patrimonio que forma el Parque Cultural del Maestrazgo. Aquí deben acudir sin duda los apasionados de la naturaleza y encontrarse con los Órganos de Montoro (cerca de Villarluengo), las grutas de Cristal de Molinos o el nacimiento del Río Pitarque. La zona también alberga algunos de los pueblos más bonitos de Teruel, como Cantavieja, Mirambel, Fortanete y muchos otros. El centro de visitantes se encuentra en Molinos, a 105 kilómetros de la capital provincial.

La Sima de San Pedro, un abismo con un lago en su interior

Oliete
Oliete. | Shutterstock

Quien quiera ver un accidente geográfico realmente espectacular debe acercarse a la localidad de Oliete, en la sierra turolense de Arcos. Desde Teruel son 112 kilómetros, que permiten ver un agujero único en Europa, un boquete en la tierra que parece la mismísima puerta del inframundo. La Sima de San Pedro, de origen kárstico, tiene 86 metros de profundidad y un lago en su interior, pero además permite combinar la visita con otros puntos cercanos de interés como el poblado ibérico de Cabezo de San Pedro o incluso el embalse de Cueva Foradada.

Admirar la arquitectura de Albarracín

Albarracín
Albarracín. | Shutterstock

Uno de los lugares que hay que ver en Teruel sí o sí es Albarracín, la que fuera capital de un reino islámico, uno de los pueblos más fotogénicos de todo Aragón. Este pueblo (con título histórico de ciudad) destaca por su arquitectura popular única, que ofrece ejemplos tan sorprendentes como la casa de la Julianeta o las del Rincón del Abanico. El pasado ilustre de la villa se deja notar en su catedral o el palacio episcopal, pero los más aventureros pueden acercarse a las murallas, cuyo alcázar tiene orígenes árabes. La opción más tranquila es seguramente disfrutar del paseo fluvial, un delicioso recorrido junto al Río Guadalaviar, que circunda a este pueblo encantador. Desde la capital es poco más de media hora en coche, por lo que es una de las mejores escapadas cerca de Teruel y uno de los pueblos más bonitos de España.

La Semana Santa de Calanda

Túnicas moradas y tambores en Calanda
Túnicas moradas y tambores en Calanda. | Shutterstock

Si hablamos de la Semana Santa, una de las tradiciones más conocidas y espectaculares es la que tiene lugar en Calanda, la conocida como «Rompida de la Hora». El mediodía de Viernes Santo, una multitud de tambores y bombos prorrumpen en uno de los mayores espectáculos de los que tienen lugar por estas fechas. Las túnicas moradas de los cofrades llenan esta localidad del Bajo Aragón, a hora y media de Teruel, y el sonido de su percusión conmemorando la muerte de Cristo sobrecoge incluso a los visitantes habituales. La fuerza de esta tradición hace de Calanda uno de los destinos que no pueden faltar en la provincia, ideal para una escapada de Semana Santa.

Visitar Mora de Rubielos, un pueblo de aroma medieval

Mora de Rubielos
Mora de Rubielos. | Shutterstock

El conjunto histórico de Mora de Rubielos goza de un estado de conservación envidiable, lo que convierte a la capital de Gúdar Javalambre en uno de los pueblos más bellos de todo Aragón. Una visita a esta villa tiene que pasar por la mole del castillo, uno de los más imponentes de la provincia, y por la excolegiata de Santa María, del siglo XV. De todos modos, cualquier paseo por sus calles gustará a quienes valoran los pueblos con sabor histórico, y es que todo el casco urbano es notable por su sabor medieval. Mora de Rubielos se encuentra a solo 45 kilómetros de Teruel, por lo que es un destino idóneo para una visita cultural. Conviene no confundirlo, en todo caso, con un pueblo de nombre muy parecido que está a escasa distancia, Rubielos de Mora.