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Qué ver en el madrileño barrio de Sol: mucho más que su plaza

Qué ver en Sol

Madrid es una ciudad fascinante. Desde sus ajetreadas calles, sus mercados gastronómicos y sus elegantes teatros, galerías y palacios, hasta los extensos parques que respiran naturaleza y arte por los cuatro costados. Madrid es inconmensurable. Un amor para toda la vida que nunca deja de sorprender (al menos si no te agobian demasiado las aglomeraciones). Cada uno de sus barrios brilla con personalidad propia y es todo un placer pasear entre uno y otro mientras la arquitectura y el ritmo cambian vertiginosa y constantemente, al son de una metrópoli que no para, aún hoy, de crecer. Pero, sin duda, el barrio más emblemático es el de Sol, enclave que ocupa un lugar especial en el corazón de los madrileños. Hacemos un repaso por lo más importante que ver en Sol.

Qué ver en Sol: un recorrido por sus rincones más importantes

Sol, al contrario de los que muchos pueden pensar, no es solo una emblemática plaza. Es también un barrio, perteneciente al Distrito Centro de Madrid, que limita con los siguientes barrios. Al norte, con el de la Universidad; al nordeste, con el de Justicia; al este, con el de Cortes; al sur, con el de Embajadores; y al oeste, son el de Palacio. El barrio de Sol es uno de los más visitados de Madrid, tanto por turistas como autóctonos, que lo revisitan de vez en cuando. Sus amplias calles y la estética de sus edificios lo convierten en una visita indispensable para cualquier interesado en conocer el corazón de la capital.

Puerta del Sol, el kilómetro 0

Qué ver en Sol
Plaza de la Puerta del Sol. | Shutterstock

El primer sitio obligatorio que ver en Sol es su céntrica plaza. La primera vez que uno se sumerge en la inmensidad de la misma, necesita al menos de unos minutos para asimilar su gran riqueza arquitectónica. Uno de los primeros edificios que llaman la atención es la Casa de Correos, donde se asienta el gobierno de la Comunidad de Madrid y desde donde se celebran las emblemáticas campanadas de fin de año.

Justo en frente de la Casa de Correos, si uno dirige su mirada hacia el suelo, descubrirá la placa del Kilómetro Cero, una baldosa que marca el punto de inicio de las seis carreteras nacionales, desde la A-1 hasta la A-6. Por otra parte, en frente de la sede del gobierno madrileño, deslumbra el mítico cartel Tío Pepe, que conmemora los productos que la bodega González Byass comercializaba antiguamente en la ciudad.

Entre ambos hitos (la Casa de Correos y el cartel), se alza la estatua ecuestre de Carlos III, que domina el centro de la plza. La famosa estatua del Oso y el Madroño, símbolo por excelencia de la capital, se ubica, si miramos de cara a la Casa de Correos, justo en el lado izquierdo de la plaza.  En una de las esquinas se encuentra también la célebre confitería La Mallorquina, perfecta para saborear un dulce típico antes de continuar la marcha.

Plaza Mayor, el centro neurálgico

Plaza Mayor
Plaza Mayor. | Shutterstock

Otro de los puntos más importantes que ver en el barrio de Sol es, curiosamente, otra plaza: la Mayor. Corazón del Madrid de los Austrias, esta explanada lleva siendo desde sus inicios un punto neurálgico de la capital, que ha acogido la celebración de mercadillos, ferias, representaciones y, en general, casi cualquier tipo de evento. Algunos de los enclaves más importantes que ver en ella son la Casa de la Panadería, la estatua ecuestre de Felipe III o el Arco de Cuchilleros.

Monasterio de las Descalzas Reales, una joya artística escondida

Monasterio Descalzas
Monasterio de las Descalzas Reales. | Shutterstock

 Uno de los edificios más hermosos de Madrid, muy cerca de la plaza del Sol, es el Monasterio de las Descalzas Reales. Se trata de un inmueble situado en la plaza del mismo nombre que muchas veces pasa desapercibido incluso para los propios madrileños. Visitar el Monasterio de las Descalzas Reales es sinónimo de tranquilidad, belleza e historia. Construido en el siglo XVII, fue fundado por Juana de Austria, hija de Carlos I e Isabel de Portugal.

Su gran riqueza artística se halla, no obstante, en su interior, donde se conservan varios elementos del antiguo palacio donde fue edificado. Es un auténtico museo de arte, con obras de artistas como Tiziano, Sánchez Coello o Antonio Moro decorando sus estancias.

Callao, la inmensidad de la capital

Plaza de Callao
A la derecha, la plaza de Callao, y a la izquierda, la calle de Gran Vía. | Shutterstock

La plaza de Callao es uno de esos lugares icónicos que se quedan en las retinas de quienes los visitan. La gran pantalla de los cines deslumbra a los viandantes que caminan ajetreados hacia el metro o hacia cualquier otro sitio. ¿El plan perfecto? Saborear unas tapas en los bares de la zona o, para los más románticos, disfrutar de las hermosas vistas desde la azotea del edificio de El Corte Inglés. Porque Callao es también una zona de tiendas.

Gran Vía, la arteria central de la capital

Gran Vía
Gran Vía desde las alturas. | Shutterstock

Aunque si a tiendas se refiere, Gran Vía se lleva la palma, pues se trata de una de las calles comerciales más más importantes de la ciudad. Además, toda la vía está salpicada por edificios de espléndidas fachadas de estilo Art Nouveau y Art Déco. Algunos de los más importantes son el Carrión, con su publicidad de Schweppes protegida por ley desde 2016 presidiendo la estampa, el edificio Metrópolis o el de Telefónica. Además, a Gran Vía se la conoce también como el Broadway español, puesto que en la zona se ubican algunos de los musicales más importantes del país.

Palacio de Santa Cruz, la joya de Felipe IV

Palacio de Santa Cruz
Fachada del Palacio de Santa Cruz. | Shutterstock

Otro de los lugares que hay que ver en el barrio de Sol sí o sí es el Palacio de Santa Cruz. Ubicado en la plaza de la Provincia, se trata de un edificio de planta rectangular construido en el siglo XVII, si bien tuvo que remodelarse a finales del siglo XVIII tras un grave incendio. En un principio, se construyó como Cárcel de Corte y Sala de Alcaldes por orden de Felipe IV. Sin embargo, en la actualidad es la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación.

Calle Arenal: la casa del ratoncito Pérez

Calle Arenal
Calle Arenal. | Shutterstock

Una de las calles míticas de Madrid es la calle Arenal, que lleva al viandante hasta la plaza de Ópera. En ella hay también varios edificios de importancia. El Palacio Gaviria, el Teatro Eslava o la Iglesia San Ginés son algunos de ellos. Una curiosidad que mucha gente desconoce es que hay una leyenda que dice que aquí se encuentra la casa del Ratoncito Pérez, antes enclavada en una confitería y ahora en su casa-museo. La mítica chocolatería San Ginés también se ubica en esta vía.