Del mismo modo que existe un espacio identificado como el lugar más frío de España, conocido popularmente como el triángulo de hielo, hay ciertas zonas en la geografía española que adquieren el aspecto de una sartén en los meses más cálidos. Las temperaturas máximas varían cada verano, también año a año se van sumando localidades cuyos termómetros nunca habían subido tanto, pero hay ciertos rincones que siempre están presentes. Esos son los que se repasan aquí.
El valle del Guadalquivir, la sartén de España
Sin olvidar que hay excepciones y momentos puntuales en que esto varía, porque cada verano es diferente, puede decirse que el valle del Guadalquivir es la sartén de España. Durante los meses de junio, julio y agosto, en este rincón andaluz los 40ºC son algo habitual y no tanto un estado de alerta. No por la costumbre hay que dejar de cuidarse, en cualquier caso.
Por su localización, este valle se ve afectado con facilidad por las corrientes de aire cálido procedentes del continente africano. Siendo como es, además, una zona encerrada entre laderas, ese aire caliente se concentra, provocando unas temperaturas constantemente elevadas. Este bochorno puede llegar a sentirse incluso en mayo, antes de la llegada del verano.
Dentro de este valle destaca, incluso aunque no quiera hacerlo, Écija. En ocasiones rozando los 50ºC, esta localidad situada a orillas del río Genil podría llegar a considerarse el punto más ardiente de la sartén de España. Otros núcleos de población pueden sumarse a este calor sofocante. En los últimos años, Sanlúcar la Mayor, Osuna o la propia Sevilla capital engloban la lista de esta sartén.
Tampoco hay que olvidar Córdoba que, como provincia en su conjunto, podría llegar a ser la más cálida de todas. Localidades como Montoro también se han acercado peligrosamente a los 50ºC algunos veranos. Lo mismo sucede en lugares como Higuera de Arjona, ya en Jaén. Lo que parece evidente, con todo esto, es que la sartén de España, en verano, se encuentra en el centro de Andalucía.
Más espacios de calor
También comunidades como Extremadura, Murcia o Castilla-La Mancha llegan a vivir momentos complicados en estos meses de verano. Las provincias de Badajoz o Toledo soportan altas temperaturas en época estival, por lo que en ciertos días se convierten también en una pequeña sartén ardiendo en los mapas meteorológicos.
El valle del Ebro, ya hacia el norte de la península, también puede llegar a presentar temperaturas elevadas, sobre todo cuando se dan esas corrientes de aire cálido que se quedan atrapadas. Se han alcanzado temperaturas por encima de los 40 ºC con más frecuencia de lo que uno puede imaginar, pero siempre se termina por volver a sentir la presencia cercana del mar, que suele templar el ambiente.
La conclusión está clara: la sartén de España se encuentra en el centro de Andalucía. Pero no hay que confiarse, pues las comunidades cercanas también tienen algo que decir al respecto. Si uno quiere temperaturas frescas, mejor que marche al norte.
