fbpx

Las cascadas más espectaculares de España

Las cascadas más espectaculares de España

Los ríos suelen dejar grandes postales a lo largo de su curso, entre las que sobresalen los saltos de agua. La abundancia de ríos y la recortada orografía generan multitud de estos hitos a través de la geografía española. Hay desde complejos saltos divididos en varias fases hasta clásicas estampas de caídas con decenas de metros de altura. Un añadido perfecto a los bosques y valles que generan los entramados fluviales. No te pierdas a continuación las cascadas más espectaculares de España.

Cascadas fascinantes que surcan bellos paisajes

Salto del Nervión (Burgos/Álava)

Salto del Nervión, la más grande cascada de España
Salto del Nervión, la más grande cascada de España. | Shutterstock

Siempre es mejor arrancar fuerte, así que la primera de entre las cascadas más bonitas de España es el Salto del Nervión. Tiene el honor de ser la más alta del país, con más de 220 metros de altura. La abundancia del caudal del río que le da nombre hace que crezca o merme según la época del año, llegando a secarse en verano. Así, lo mejor es visitarla cuando su vía fluvial va cargada. Cabe resaltar que está asociada al Monte Santiago, un Monumento Natural que ofrece además inmensas panorámicas del valle de Orduña. Asimismo, el paraje está en plena frontera entre Burgos y Álava.

Cascada de los Colores (La Palma)

Cascada de Los Colores en la Caldera de Taburiente
Cascada de Los Colores. | Shutterstock

En la que se conoce como cascada de Los Colores, en La Palma, el colorido de la piedra es muy psicodélico, yendo de los tonos amarillos y rojos a los verdes. Los dos primeros los produce el hierro del agua, mientras que el tercero es fruto del musgo. El corte por el que se produce el salto fue realizado de manera artificial durante los años 60. El objetivo era facilitar la recogida del agua de la Caldera de Taburiente, parque natural al que pertenece este hito.

Salto de la Póveda (Guadalajara)

no general del Salto de Poveda en Guadalajara, timelapse de una de las cascadas más espectaculares de España
Salto de Poveda en Guadalajara, una de las cascadas más espectaculares de España. | Depositphotos

De nuevo toca ir a un complejo artificial, pero de gran belleza. El Salto de la Poveda es uno de los grandes elementos del Alto Tajo en Guadalajara. Está producido por una antigua presa rota, cuya misión era abastecer con el agua del Tajo el embalse de la chorrera, del que hoy queda la laguna de Taravilla. Un mirador y una ruta senderista permiten dedicar un día a recorrer este bonito entorno natural guadalajareño.

Cascada de Orbaneja del Castillo (Burgos)

Cascada de Orbaneja del Castillo fluyendo entre el pueblo
Cascada de Orbaneja del Castillo. | Shutterstock

Enclavada en la propia Orbaneja del Castillo, esta cascada divide al pueblo burgalés en dos mitades. Tiene en torno a 25 metros de recorrido y la produce el Ebro. Además de su ubicación, que ya es extraordinaria de por sí al estar en medio de una población, destaca porque el agua surge de un caño. Remontando el curso subterráneo se alcanza el otro tesoro del lugar, la Cueva del Agua. Lagos y pasadizos se entremezclan en este complejo horadado en las entrañas de la tierra. En dirección contraria, el curso más caudaloso de España crea el Parque Natural de las Hoces del Alto Ebro y Rudrón.

Cascadas del Monasterio de Piedra (Zaragoza)

Cascada en el Monasterio de Piedra, Zaragoza
Cascada en el Monasterio de Piedra, Zaragoza. | Shutterstock

La acción natural y humana han creado un entorno fantástico en el Monasterio de Piedra y sus jardines. Al histórico recinto se suma la domada abundancia generada por el río Piedra. En su descenso, genera una miríada de saltos de agua de muy distintas formas. Desde la vertical Cola del Caballo, que no debe confundirse con la de Ordesa, a la de la Trinidad, este enclave posee varias de las cascadas más espectaculares de España. Sin duda, uno de los lugares más bonitos de la provincia de Zaragoza.

Chorros del Río Mundo (Albacete)

Cascada en el nacimiento del Río Mundo
Cascada en el nacimiento del Río Mundo. | Shutterstock

Con un nombre así, era imposible que este curso fluvial no tuviera alguna de las cascadas más espectaculares de España. Situada en su increíble nacimiento, en el Parque Natural de los Calares del Mundo y de la Sima, es de las más grandes del país con más de 100 metros. A su alrededor crece una abundante y verde vegetación, que desafía la imagen clásica que se tiene de la provincia de Albacete. Para verlo, la mejor base es Riópar.

Cascada Cola de Caballo (Huesca)

Cascada de Cola de Caballo en Ordesa
Cascada de Cola de Caballo en Ordesa. | Shutterstock

Además de tener alguno de los mejores hayedos, valles y rutas que puedan verse en España, el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido hace gala de espectaculares cascadas. La de Cola de Caballo es una de ellas, protagonista además de un trayecto senderista muy famoso. Partiendo de Torla se puede alcanzar este gran salto del río Arazas. De camino se pasa por las también preciosas gradas de Soaso. Un plan perfecto para los amantes de la naturaleza en pleno Pirineo de Huesca.

Cascada del Ézaro (A Coruña)

Cascada del Ézaro
Cascada del Ézaro, en A Coruña. | Shutterstock

En Dumbría se unen cascadas y mar con la cascada del Ézaro o del Jallas. Las abundantes lluvias de A Coruña y la protección del río Jallas permite que esté activa todo el año, aunque es a finales de otoño y en invierno cuando descarga con más fuerza. Desciende por 40 metros, de forma más o menos tendida, hasta el puerto deportivo de Ézaro, casi en la desembocadura de la vía fluvial.

Cascada de la Tobalina (Burgos)

La cascada de la Tobalina fluye con fuerza
Cascada de la Tobalina, en Burgos. | Shutterstock

El factor horizontal es lo que marca la diferencia en la Tobalina. Esta cascada burgalesa tiene “solo” en torno a 20 metros de alto, pero unos 100 de longitud. Además, el Jerea, afluente del Ebro, forma una laguna en la que bañarse durante el verano. Sin embargo, es durante el entretiempo cuando este hito de Burgos situado entre La Orden y Pedrosa de Tobalina adquiere su cara más espectacular. Ya sea por el deshielo de la primavera o las precipitaciones del otoño, el salto se torna salvaje durante parte de dichas estaciones.

Pozo de los Humos (Salamanca)

Vista general del Pozo de los Humos y su entorno
Entorno del Pozo de los Humos en Salamanca. | Shutterstock

Miguel de Unamuno se quedó encandilado con el Pozo de los Humos, una cascada de unos 50 metros de altura. El responsable de su espectacularidad es el río Uces. Asimismo, forma parte del Parque Natural de los Arribes del Duero. Durante los meses de mayor afluencia, de finales de noviembre a mayo, la fuerza de la caída hace que se genere un efecto spray que justifica el nombre del lugar. Además, en las inmediaciones se haya el pozo de las vacas, otro salto de agua más pequeño producido por la bifurcación del Uces. Las poblaciones más cercanas para ver esta maravilla de Salamanca son Masueco y Pereña.

A Seimeira de Vilagocende (Lugo)

Cascada de Vilagocende
A Seimeira de Vilagocende. | Shutterstock

De vuelta en Galicia aguarda la enorme A Seimeira de Vilagocende. Se sitúa en el concejo lucense de A Fonsagrada, parte del Camino de Santiago Primitivo. Cuenta con 50 metros de caída inmersos en un bello entorno boscoso. Para llegar a ver este salto, el más grande de Galicia, lo mejor es ir andando por la ruta que protagoniza. Solo tarda en recorrerse una hora, pues solo tiene un kilómetro de ida y otro de vuelta. Entre abedules y carballos resuena la que es una de las cascadas más espectaculares de España.

Cascada de Aljibe (Guadalajara)

Vista general de la doble cascada del Aljibe en Guadalajara, España
Cascada del Aljibe, en los pueblos negros de Guadalajara. | Shutterstock

Para terminar hay que retornar a Guadalajara, en este caso a la Serranía. En plena sierra de Ayllón se sitúa la última de las cascadas más espectaculares de España seleccionadas. Se trata de la de Aljibe, cerca de Campillo de Ranas. Es, por tanto, un complemento ideal si se realiza la ruta de los pueblos negros. Su nombre viene de las dos fases en que se divide, que parecen formar cisternas o aljibes. Un sendero de 10 kilómetros, señalado, permite llegar a ella desde la pedanía de El Espinar.

Sigue nuestro canal de WhatsApp para descubrir lo más fascinante de España.