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Quizás no resulte fácil convencer a alguien de Gijón para que abandone su ciudad, aunque sea por un día o dos. No es de extrañar, teniendo en cuenta que la capital de la Costa Verde cuenta con algunas de las mejores playas de Asturias, así como una sobresaliente oferta de actividades que van de la gastronomía a la cultura. A pesar de eso, hay propuestas a escasa distancia que merecen una visita, tal y como demuestran estas escapadas desde Gijón para todos los gustos.
6 planes para escapadas a poca distancia de Gijón
El emplazamiento de la ciudad dentro del Principado de Asturias hace que no sea necesario recorrer muchos kilómetros para disfrutar de lugares estupendos. A una hora como máximo de trayecto hay todo un abanico que va de la naturaleza más inmaculada a la cultura más vanguardista. Sin olvidar, por supuesto, la esencia asturiana más tradicional y afamada.
Ruta por el concejo de Villaviciosa
Siendo Gijón una ciudad eminentemente industrial, nada mejor que acercarse a respirar naturaleza pura. A escasa media hora de la ciudad, existen rutas tan magníficas como la que nos acerca a La Mexona, una deliciosa cascada en la orilla del mar. Esta parte marítima del concejo de Villaviciosa es una mina en cuanto a rutas senderistas: hay puntos inolvidables como el mirador de Bustiello o playas salvajes como la de Merón, donde lo mismo se puede practicar surf que conocer el monumento natural de las icnitas asturianas.
Además, también existe la posibilidad de recorrer la zona a caballo, en un tranquilo paseo rodeado de verdor. Para culminar la escapada, pocas opciones hay mejores que comer en Villaviciosa, una de las capitales culinarias de la comunidad.
Lastres, una pequeña joya
El pueblo de Lastres, en el concejo de Colunga, no es muy grande. Sin embargo, tiene una cantidad de atractivos que lo convierten en una escapada perfecta a poco más de media hora de Gijón.
Una serie de televisión dio a conocer esta villa marinera tan fotogénica, que conserva un sabor bien auténtico y el pintoresquismo que proporciona su peculiar orografía. Esta última característica ha dado lugar a curiosas escalinatas y calles empinadas, donde lucen casas nobles y notables edificios religiosos.
Entre estos últimos, hay que mencionar la Capilla de San Roque, situada en un espléndido mirador, o la bella Iglesia de Santa María de Sábada. Los planes en Lastres son muy variados, y a poca distancia del pueblo hay multitud de playas, miradores y hasta un Museo del Jurásico o un elegante faro.
La experiencia del descenso del Sella
Recorrer el río Sella en una piragua es uno de los planes más conocidos de toda Asturias, gracias al gran evento que supone el Descenso Internacional del Sella, uno de los clásicos de cada agosto. Sin embargo, es una actividad que puede realizarse en cualquier otro momento, sin necesidad de mucha pericia, y que asegura una jornada de diversión en familia o con amigos.
La experiencia tiene como punto de partida casi obligatorio la villa de Arriondas, a menos de una hora de Gijón. Allí son muchas las empresas que ofrecen todo lo necesario para disfrutar de esta pequeña aventura. En esta población, el río es el gran protagonista y aporta a las calles mucho ambiente durante la temporada de verano, pero hay otros puntos de interés, como la Capilla de San Martín, en la parte alta y datada en el siglo XIV, o las lujosas casas de indianos de la calle Argüelles.
Aire puro en Redes
Situado a una hora de coche de Gijón, el Parque Natural de Redes es uno de los más cercanos a la ciudad. Y, aun así, el cambio en el paisaje es evidente. Del ajetreo urbano se pasa a un oasis de naturaleza que es reserva de la biosfera.
Redes forma parte del sur montañoso de Asturias, y el relieve indomable de la zona lo ha convertido en un vergel donde la naturaleza impone su ritmo. Hay montañas notables, como el pico Torres, pero también curiosas formaciones kársticas y varios espacios declarados Monumento Natural.
Un ejemplo es la cueva Deboyu, que parece tragarse el río. El agua es, sin duda, la estrella de este parque, gracias al Nalón, pero también a los muchos arroyos que manan de las montañas, y que acompañan a los visitantes con su rumor delicioso.
De paseo por Avilés
Los espíritus más urbanos tienen en Avilés una interesante visita que hacer, a apenas 30 kilómetros. La tercera ciudad del Principado en población tiene un atractivo casco urbano que mezcla tradición con modernidad, y a cuyo centro le ha valido la declaración de Conjunto Histórico-Artístico.
La parte más tradicional se observa en algunos hermosos edificios medievales, fundamentalmente religiosos, así como en los elementos populares de algunas calles, tales como los soportales o detalles pintorescos de algunos ventanales.
Sin embargo, Avilés tiene también un corazón moderno, y esta ambición de la ciudad se manifiesta espléndidamente en su joya arquitectónica más vanguardista, el emblemático Centro Niemeyer. La sorprendente obra del famoso arquitecto es un centro cultural que acoge artes escénicas, exposiciones y eventos de todo tipo, por lo que es una cita obligada para los enamorados de la cultura.
Hacia el impresionante Ojo de Buey
Uno de los accidentes del paisaje más espectaculares de Asturias se encuentra una hora de Gijón en coche. Acercarse a pie hasta este singular coloso es una experiencia emocionante, sobre todo cuando se ve emerger el enorme agujero en la roca y, a través de él, el cielo azul.
El Ojo de Buey es un curioso fenómeno kárstico, totalmente natural, y posee la gracia añadida de hallarse en un entorno agreste y memorable. Muy cerca están la Peña Mea y las Peñas Negras, picos de más de 1500 metros, y también otros hitos del camino que convierten la zona en un paraíso del senderismo. Hablamos de la Collá de Pelluno o, algo más distante, la Ermita de la Visitación, lugar ideal para hacer un alto en el camino. Una despedida perfecta para esta lista de escapadas desde Gijón que descubren los mejores tesoros que albergan sus alrededores.
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