La historia de Vinuesa es más que interesante y merece la pena leerla para saber luego que ver en Vinuesa.
Se conservan algunos restos de cabañas neolíticas pero el primer asentamiento lo realizó la tribu celtibérica de los pelendones hacia el siglo V a. de C.. Se cree que estos provenían de la zona de la actual Besançon en Francia. Le dio el nombre de Visontium del que deriva el gentilicio de sus habitantes. Los romanos construyeron la calzada que les unía con Numantia y Uxama, así como el puente sobre el Duero.
Tras la caída de Roma permaneció casi despoblada parte de la historia de Vinuesa, hasta la reconquista, no se han encontrado restos visigodos. Aunque se ha especulado sobre la posibilidad de que fuera el enclave de Medina Bara. Hacia el 1016 era frontera de los reinos musulmanes con el reino de Navarra.
Con la Reconquista cristiana pasó a depender de la ciudad de Soria. Alfonso X la incluye en su censo de 1272. Al año siguiente, al instaurar el rey Sabio la Mesta, favoreció extraordinariamente la crianza de ganado ovino y el comercio de la lana. Tales unos animales que acudían a pastar en verano en esta sierra, trasladándose a vivir allí a propietarios de rebaños.
En la primera mitad del siglo XV, los reyes Juan I y II de Castilla pasan temporadas cazando en la villa. Así, se llega a denominar “La Corte de los Pinares”. Durante una cacería del rey Juan I, unos pastores de Vinuesa intervinieron para salvar al príncipe de Asturias, el futuro Juan II, del ataque de un lobo. En agradecimiento el rey le concedió a la localidad un escudo con un pino, un lobo y unos montes. Además, en 1416 el rey regaló el monte de Valliluenga al pueblo de Vinuesa.
En 1491 los Reyes Católicos instituyen la Real Cabaña de Carreteros, Trajineros y Cabañiles. Muchas familias nobles traen sus ganados para aprovechar los pastos de montaña. Así, se asientan en la villa en palacios, como los de D. Pedro de Neyla o el palacio de los Viñuela, y casonas en piedra como la Casa de los Ramos. Algunas de estas familias fueron los Barnuevo, los Neyla, los Montenegro, los Carrillo.
En 1504 se redactan las ordenanzas del municipio. Más tarde, en 1597 el Concejo de Vinuesa se independizaba de la ciudad de Soria. La industria de la carretería, el ganado trashumante y la riqueza maderera le hicieron vivir una cierta bonanza entre los siglos XVI y XVIII. El rey Carlos III les concedió, en 1776, el título de villa y el rollo de justicia que lo simbolizaba. El saqueo incendiario de las tropas napoleónicas en 1809 inició una época de penurias crecientes. Se acentuaron los saqueos perpetrados pos las partidas carlistas.
En el siglo XIX los indianos, o emigrados enriquecidos en América (especialmente a Méjico), crearon en Vinuesa sociedades filantrópicas como “La Visontina”. Sufragó el empedrado, aceras, juego de pelota, algún puente y el lavadero grande del pueblo. El embalse de la Cuerda del Pozo se inauguró en 1941. Hacia los años setenta se va dinamizando el turismo de orientación ecológica, con destino en la Laguna Negra. También se organizan campamentos de verano para niños.
Esto es lo principal que ver en Vinuesa.