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Qué ver en Salas de los Infantes

Panorámica de lo que hay que ver en Salas de los Infantes

Villa milenaria de infaustos infantes

La capital del antiguo Alfoz de Lara, a orillas del Arlanza, toma su nombre de los hijos decapitados de su fundador. Su origen se encuentra en la apasionante historia de los siete infantes de Lara. Salas de los Infantes reivindica en la actualidad su prehistoria y su influencia como capital comarcal de la Sierra de la Demanda.

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Lo más interesante que hay que ver en Salas de los Infantes es sobre todo su pequeño Museo de dinosaurios. Pese a los escasos y dispersos lugares que visitar dentro de la localidad, cuenta con unos atractivos alrededores. Destaca el senderismo por el cercano Parque Natural de las Lagunas Glaciares de Neila. Los que vayan de regreso hacia Zaragoza pueden visitar rápidamente el yacimiento de Numancia, al lado de la ciudad de Soria. Los que regresen a Madrid tienen dos excelentes opciones de parada de un par de horas en Covarrubias y también en Lerma.

Existen numerosas actividades de turismo activo en la provincia de Burgos. En nuestra página Dormir y Comer en Salas de los Infantes explicamos los platos locales y los posibles alojamientos para dormir bien.

¿Quieres conocer este sitio?

Antes de conocer los lugares que hay que ver en Salas de los Infantes, conviene repasar su historia. La comarca de Salas de los Infantes es rica en yacimientos prehistóricos y arqueológicos del Paleolítico, Edad de Bronce y Edad del Hierro, así como restos romanos. También posee yacimientos con restos de dinosaurios del período Cretácico. Precisamente es el Museo de Dinosaurios uno de los lugares que ver en Salas de los Infantes.

Los romanos sitúan en esa zona a la tribu celtíbera de los pelendones. Estos debieron de ser quienes habitaban el castro que hay en una colina cercana. Los romanos construyeron una calzada y establecieron un asentamiento a la orilla del río Arlanza.

Entre los años 866 y 910 la comarca fue conquistada por las tropas del rey Alfonso III de León. Se ha especulado que el encargado de defender la zona, el caballero Gustios González, mandó a uno de sus caballeros, llamado Vito, que edificara un castro o fortaleza en la colina para proteger la población. Esta se popularizó con el nombre de su primer ocupante “Castro – Vito”. Se transformaría después en Castrovido, una localidad cercana.

La villa de Salas fue fundada en el año 974 por el caballero Gustios González a instancias del conde García Fernández. Se le concedió entonces uno de los primeros fueros. Los hijos de Gustios fueron protagonistas de la famosa leyenda de Los Siete Infantes de Lara, considerada uno de los grandes relatos épicos de la Edad Media castellana. Contiene numerosas curiosidades sobre la mentalidad y prácticas de las familias nobles en aquel período. Fue recogido por el historiador don Ramón Menéndez Pidal. Por la fama que alcanzó ese relato se le añadió “de los infantes” al nombre de la localidad.

En el año 1002 el caudillo musulmán Almanzor atacó Salas. Luego trató de someter a los guerreros del Castillo de Castrovido. Almanzor sufrió allí una de sus primeras derrotas, pues no logró tomarlo y debió retirarse con el botín obtenido.

El caballero Pedro Fernández de Velasco consiguió en 1380 el privilegio del rey para constituir en el territorio dependiente del Castillo de Castrovido un mayorazgo en favor de su hijo y descendientes. Dicho mayorazgo volvería a registrarse en 1458 y aseguraría así la pertenencia de Salas de los Infantes a la Casa de Velasco. Esta ostentaría el título de condestable de Castilla hasta la desaparición de dicho cargo siglos más tarde, en el XIX.

Fotografía antigua de Salas de los Infantes
Plaza Mayor de Salas de los Infantes, a principios del siglo XX

Por Salas pasa la carretera que comunica la ciudad de Burgos con las de Soria y Zaragoza. Por esta razón ha sido un lugar en disputa durante las guerras que han tenido escenario en esa provincia. Destaca sobre todo cuando la ciudad de Burgos estuvo fuertemente guarnecida por los franceses entre 1808 y 1813. Por eso fue el lugar elegido en 1813 por el marqués de Barriolucio para establecer la denominada Junta Superior de la provincia de Burgos. Desde esta impulsó las actividades de la guerrilla. Después, en 1836, recibió la visita de la expedición itinerante del general carlista Gómez. Recomendamos la lectura del siguiente apartado para conocer lo que hay que ver en Salas de los Infantes.

No existen muchos lugares que ver en Salas de los Infantes. El más importante es el Museo de los Dinosaurios, que se encuentra en la Plaza Mayor, porticada. Antes llamado Museo Arqueológico y Paleontológico, tuvo su origen en la colección del CAS (Colectivo Arqueológico y Paleontológico de Salas). En él se exhiben hallazgos arqueológicos de Salas de los Infantes y alrededores.

Destaca el descubrimiento de una huella fosilizada de terópodos en 2003 en el paraje de Costalomo. Está considerada como una de las más grandes en la actualidad. Ocho años más tarde se confirmó que el esqueleto de dinosaurio hallado era una nueva especie bautizada Demandasaurus Darwin. Entre otras curiosidades se puede observar un nido de dinosaurios en tamaño real, con bebés incluidos.

Siguiendo la visita al casco antiguo, en torno a la Iglesia de Santa María, abundan las casas serranas de chimeneas cónicas alrededor de pequeñas plazuelas empedradas. La Iglesia de Santa María está precedida de una escalinata rústica. Frente a ella se han instalado unos sepulcros antropomorfos. Se trata de un edifico gótico con una poderosa torre prismática y muy reformado con posterioridad, caso de la portada renacentista. Unas curiosas sentencias aparecen grabadas en la fachada. Una de ellas afirma que “en la casa del que jura no faltará desventura”. Según la otra, “la maldición de la madre abrasa y destruye de raíz hijos y casa”.

El templo es de planta de cruz latina, de tres naves y bóveda de crucería. El retablo mayor es también renacentista de la segunda mitad del siglo XVI, con influencia de Berruguete. Consta el retablo de un banco y tres cuerpos con tres calles y cuatro entrecalles, rematadas en un ático con el Calvario. Sobre cuatro paneles de escenas de la Pasión de Cristo se disponen dos relieves. La Presentación de la Virgen en el Templo y La Adoración de los Magos ocupan ambos lados de la calle central. Dentro de una hornacina, con la charnela hacia fuera,  se sitúa la bella imagen de la Virgen con el niño. En un arcón o urna en el lateral del retablo se conservan los restos capitales de los desafortunados infantes que dan nombre a la villa.

A la entrada del pueblo, cerca del puente, se encuentra la Ermita de Santa Cecilia. Luce en su atrio la portada románica de la Iglesia de Mazariegos con un bello crucero. Es de estilo gótico con reminiscencias románicas. Fue reconstruida en el siglo XIV sobre un edificio del siglo XII. La pila bautismal es románica, mientras que los retablos son barrocos de los siglos XVII y XVIII. Preside el altar la imagen de Santa Cecilia. Esta se atribuye al escultor Francisco Martínez, que hacia 1640 trabajaba en la comarca.

Interior del Museo de Dinosaurios, uno de los lugares que ver en Salas de los Infantes
Ejemplar de dinosaurio en el Museo

El resto de lugares que ver en la visita a Salas de los Infantes se encuentra en los alrededores de la localidad. A pocos kilómetros en dirección norte, hacia la sierra, está el Castillo de Castrovido. Todavía está en reconstrucción, pendiente de ser habilitado para las visitas. A 4 km hacia el sur por la N 234 se halla Hacinas, pueblo de casas de piedra caliza. Posee varios troncos de árbol fosilizados de 120 millones de años de antigüedad. Desde la plaza con rollo de piedra asciende una cuesta empedrada. Esta lleva a la iglesia gótica con una torre campanario.

A unos 23 kilómetros al noroeste se encuentra la Ermita visigótica de Santa María de Lara, del siglo VII. Está cercana al pueblo de Quintanilla de las Viñas y merece una visita detenida. Hacia el este se extiende una zona de serranía poblada de pinos cuyo núcleo es Quintanar de la Sierra. En sus proximidades se encuentran la Necrópolis de Revenga y de Cuyacabras, de las de mayor importancia de la Alta Edad Media.

Hacia el norte, siguiendo la BU822 y el Puerto del Collado se llega al Parque Natural de las Lagunas Glaciares de Neila. Se trata de un espacio protegido con variada vegetación de hayedos, acebedas y especies alpinas. En la Iglesia de San Miguel de Neila se ha instalado la Casa del Parque. Si se toma desde Salas de los Infantes la BU 825 hacia el noroeste se puede visitar Barbadillo de los Herreros. Esta localidad reivindica la memoria del oficio que le da nombre a través del Museo de las Ferrerías. Con ello concluye lo que hay que ver en Salas de los Infantes y alrededores.

Imprescindibles

Exterior del Museo de Dinosaurios que hay que ver en Salas de los Infantes
Museo de los Dinosaurios
Iglesia de Santa Cecilia que hay que ver en Salas de los Infantes
Iglesia de Santa Cecilia

Datos prácticos

Coordenadas

42º 01’ 23’’N, 03º 16’ 53’’W

Distancias

Burgos 56 km, Madrid 227 km.

Aparcamiento

Sin dificultad.

Altitud

964 m.

Habitantes

2130 (2013).

Como fiestas que ver en Salas de los Infantes destacan las siguientes. Fiesta de la Matanza (último domingo d e enero), San Isidro (15 de mayo, con la subasta de productos de la tierra), Fiestas patronales de San Roque y la Asunción (mediados de agosto), Fiesta de Santa Cecilia (22 noviembre) Barrio de Costana.

Mercado Medieval (junio), Jornadas micológicas (noviembre).

Quesos Sierra de Lara.