El Parc Natural Serra de Montsant fue declarado como tal en 2002 protegiendo así un total de 9.247 hectáreas de terreno que conforman uno de los espacios naturales de mayor simbolismo para la provincia de Tarragona.
A grandes rasgos, la serra de Montsant es un gran bloque de conglomerados calcáreos de aspecto abrupto y rocoso que, sin embargo, da forma a un paisaje de una gran riqueza y diversidad natural y biológica. Su terreno está horadado por infinidad de barrancos, riscos y desfiladeros resultantes de la acción erosiva que durante siglos ha sufrido la sierra. Contiene dos cuencas hídricas principales, las de los ríos Siurana y Montsant, que dan forma a sendos valles en torno a los cuales se alzan las elevaciones y los escarpes rocosos que marcan su característico perfil. El Parc Natural Serra de Montsant tiene su punto más elevado en la Roca Corbatera, que se eleva un total de 1.163 metros sobre el nivel del mar. El parc Serra de Montsant – tal y como se conoce hoy en día – es el resultado de una estrecha relación entre el hombre y la naturaleza.
Históricamente, Montsant ha sido un importante centro de espiritualidad tarraconense y sus huellas son todavía visibles en la cartuja de Santa María d’Escaladei o varias en ermitas como la de Sant Bartomeu.
Vegetación y fauna
La vegetación de la serra de Montsant está compuesta principalmente por bosques de encina y pino acompañados de otras especies como avellanos, tejos o acebo. En las riberas aparecen extensiones de sauces y álamos. Estos bosques de la serra de Montsant están habitados por mamíferos como jabalíes, ginetas o gatos monteses. En los roquedos anidan comunidades de aves rapaces con ejemplares de águila perdicera, halcón peregrino o búho real.