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¿Por qué Zaragoza se hermanó con Transilvania?

Zaragoza y Transilvania, la historia de su hermanamiento

España está repleta de curiosos casos de ciudades hermanadas que unen lugares de nuestra geografía con otros que no se pueden siquiera imaginar. Gusta hacer un repaso por este listado por las sorpresas que uno puede llevarse. Pero también para comprender la amistad que surge entre dos lugares separados por kilómetros de distancia pero unidos por una historia, una sensibilidad similar o personajes que afectaron uno y otro rincón. El caso que va a repasarse a continuación tiene como principal razón de unión un fenómeno meteorológico y como protagonistas a dos lugares aparentemente distantes entre sí: Zaragoza y Transilvania.

El lugar idóneo para el Conde Drácula

Famosa fortaleza de Rupia
Famosa fortaleza de Rupia. | Shutterstock

Transilvania es sobradamente conocida por ser el lugar de origen del Conde Drácula. En realidad, se trata de una región de Rumanía que no tuvo que lidiar con un vampiro, pero sí con el temido conde Vlad Tepes, príncipe de Valaquia entre 1456 y 1462. Era conocido como El Empalador. Este, en cualquier caso, no es el asunto que aquí importa. Lo que verdaderamente importa es el clima en que se creó, de la mano de Bram Stoker, esta leyenda vampírica. Esta es también la razón por la que Zaragoza y Transilvania terminaron unidas.

En enero de 2020 se decidió este hermanamiento, que asentó sus bases en el clima tan similar que comparten ambos lugares. Se habló de niebla y de frío, dos fenómenos que uno puede experimentar si se acerca en los meses invernales a conocer uno y otro sitio. También, explicaron, hay un deseo común de preservar las numerosas construcciones históricas que pueblan la tierra. Y sirvió para tender la mano a la población rumana que habita en la provincia aragonesa.

De esta manera también puede surgir un hermanamiento. En el caso de Sevilla y Kansas City, anteriormente explorado, había una historia que se desarrollaba en el tiempo y explicaba su amistad. Zaragoza y Transilvania no comparten anécdotas, pero sí características y también una mirada común, hacia el pasado y hacia el futuro.