fbpx

Qué ver en Blanes

Dónde dormir en Blanes

El jardín de la Costa Brava

Blanes está considerada como el comienzo de la Costa Brava (contemplada desde el sur). De esta manera, está enclavada en la comarca de la Selva, entre el mar y el monte Sant Joan, junto a la desembocadura del río Tordera. Es conocida por sus jardines botánicos y por su acogedor ambiente. Un tradicional lugar de veraneo y escapada. ¿Te apuntas a descubrir que ver en Blanes?

Planifica tu escapada a Blanes

En esta localidad repleta de jardines y playas el viajero no dejará de entretenerse al menos durante una jornada completa. Pues son variados sus reclamos, que explicamos en la sección “Que Ver en Blanes”.

Además, se encuentra situada entre otras dos de las principales localidades costeras: Sant Feliu de Guíxols o Arenys de Mar. También se encuentra emplazada cerca del Parque Natural del Montseny, por donde se pueden organizar excelentes excursiones.

En nuestra página Dormir y Comer en Blanes ofrecemos la información necesaria para disfrutar de lo mejor de la gastronomía local y encontrar el mejor alojamiento.

¿Quieres conocer este sitio?

Legiones, prisioneros y vizcondes forman parte de la interesante historia de Blanes. Al conocerla, enriquecemos todo lo que ver en Blanes. Comenzamos por el solar en que se asienta Blanes. Ya estaba habitado al menos en tiempos de los íberos. Por lo tanto, probablemente fundaron poblados en Sant Joan y Mont Barbat.

Hacia el año 195 a.C, las legiones comandadas por el consul Marcus Porcius Cato ocupan la zona. Las primeras noticias son del año 44, cuando era considerada una pequeña población llamada Blanda. Se conservan sus vestigios en la peña dels Padrets.

Hacia el año 715 está bajo el control de los musulmanes, los cuales serán expulsados de la zona hacia el año 785. Las tropas del condado de Barcelona la defenderán de las incursiones moras.

En el año 974 el templo local aparece vinculado al monasterio de Sant Pere de Rodes, en el condado de Empuries. Más tarde dependerá del obispado de Girona. En el año 1002 el castillo de Sant Joan de Blanes es propiedad del vizconde Sunifredo de Girona. Después de eso, en el año 1050 pasa a ser propiedad de los vizcondes de Cabrera.

En el año 1114 pertenecía a la familia Blanes, y el caballero Grau de Cabrera compra el castillo en el año 1381. Desde esta fortaleza ejercieron su señorío los vizcondes de Cabrera, representantes allí del conde de Barcelona, iniciándose una época de gran actividad constructiva. Los Cabrera, señores del lugar, le ceden la administración a su vasallo y alcaide, el caballero Guillem de Blanes. Éste concede diversos privilegios para favorecer el poblamiento de la localidad, potenciándose especialmente su puerto.

Durante el siglo XVI se intensifican los ataques de los piratas berberiscos contra la costa, por lo que se edifica una torre de vigilancia en lo alto de la colina.

El castillo medieval se venderá a Francesc Montcada, conde de Aitana que lo adapta como palacio. En 1623, a causa de las deudas, los Cabrera venden el castillo–palacio al comerciante Esteve Alemán. Éste será empleado como cuartel militar en las distintas contiendas civiles.

Hasta 1652, en el contexto de la Guerra dels Segadors, Blanes estuvo en manos de los rebeldes, siendo tomado por las tropas del rey. A trescientos de los prisioneros se les perdonó la vida. Sin embargo, se les condenó a cumplir penas sirviendo como remeros en galeras. La localidad será devastada en 1694 durante la invasión del ejército francés del duque de Noailles.

Tras esta dramática situación y una vez superado el conflictivo período de la Guerra de Sucesión, la villa se desarrolló definitivamente por su empuje pesquero, comercial e industrial en el siglo XVIII.

que ver en Blanes
Parroquia de Santa María

Durante la Guerra de Independencia fue la base de operaciones del ejército napoleónico para tomar la fortaleza de Hostalric.

En el siglo XIX se impulsan sus astilleros e incluso se forman pilotos de barco en Blanes. Al mismo tiempo, cientos de sus vecinos se van a América en busca de oportunidades. Llegaron también en esos años mejoras asociadas al ferrocarril o al alumbrado urbano.

A principios de 1900 se continúa el desarrollo industrial de la villa y se sigue apostando por la actividad portuaria.

Durante la Guerra Civil Española Blanes fue una de las poblaciones costeras bombardeada, en 1937 por el crucero Canarias y en 1938 por la aviación italiana. Sufrió graves daños.

Ahora corresponde leer el apartado Que ver en Blanes.

En Blanes es recomendable subir en primer lugar al mirador natural que ofrece el paraje donde se enclava la Torre de Sant Joan. En siglo XVI se erigió sobre la antigua torre del homenaje del castillo del mismo nombre, con la finalidad de vigilar la presencia de navíos piratas. Las ruinas del castillo que ver en Blanes se han reconstruído. Especialmente, la gran torre redonda de quince metros de altura. Desde allí es posible disfrutar de excelentes vistas que ver en Blanes de la costa.

Bajamos a la localidad al casco urbano de Blanes para continuar la visita. Allí se pueden contemplar los restos del Castillo-Palacio de los Vizcondes de Cabrera que tras pertenecer a los Blanes, fue comprado por los Cabrera en el siglo XIV. Más tarde, el conjunto fue adquirido por Esteve Alemán. Progresivamente se fue acelerando el deterioro del palacio hasta quedar arruinado.

La iglesia que lindaba con la residencia nobiliaria era además el panteón de los Cabrera y se convertiría en la imponente Parroquia de Santa María hacia mediados del siglo XV. Ha sido parcialmente reconstruida tras ser incendiada el 22 de julio de 1936. En otras palabras, se perdieron casi todos sus bienes artísticos, incluido el extraordinario altar mayor. Por tanto, de la construcción antigua quedan la fachada principal, con su puerta de arcos apuntados en degradación, con un rosetón y sus características almenas. También su monumental campanario y la sacristía.

Blanes
Vista de Blanes. | Wikimedia

De gran arraigo en la población es la imagen custodiada en la sencilla Capilla de Nuestra Señora de la Esperanza. Su existencia se remonta al menos al siglo XVII. Otra de las más ermitas conocidas que ver en Blanes es la de l’Antiga.

Y entre los monumentos que ver en Blanes ocupa un privilegiado lugar la hermosa Fuente gótica del siglo XV. Se levantó por mandato del conde de Prades. Esta pequeña construcción tiene forma de octógono. El mayor interés está en su parte superior donde llama la atención la filigrana que recorre todo su perímetro.

En  la Plaza de la Virgen María se puede ver en Blanes una de las antiguas puertas de entrada a la ciudad amurallada. Y en la cercana calle Ample  destaca un conjunto de casas de notable antigüedad.

También se aconseja recorrer el Puerto desde la plaza de Catalunya y contemplar algunas llamativas viviendas de la primera mitad del siglo pasado. Por ejemplo, la Casa del Pueblo y la Casa de la familia Saladrigas. A esto hay que sumar la vista de las lonjas (Antigua y Moderna) donde todavía se subasta el pescado. Un plan imprescindible que hacer en Blanes.

Pero la principal notoriedad que ver en Blanes proviene sus dos jardines botánicos. El Tropical de Pinya Rosa alberga más de 7.000 especies diferentes y sobresale por su amplio y cualificado fondo de cactus. Además, el alemán Marimurtra promovió en el siglo pasado la creación de otro vergel de naturaleza subtropical sin olvidarse de la vegetación propia del Mediterráneo. El centro posee un elevado interés y ocupa 14 hectáreas en que se presentan más de 3.000 variedades botánicas.

Aparte de la Playa urbana de Blanes, destacan las de Santa Anna y la de S’Abanell, que es la más larga. Entre las calas que caracterizan este tramo costero catalán resulta de gran belleza la Playa de Sant Francesc. Está coronada por una ermita del siglo XVII.

Por último, como viene siendo característico en otros puntos de la Costa Dorada, Blanes está lleno de viviendas construidas con dinero indiano. Entre éstas sobresale la espectacular Can Gallet (s. XIX), levantada por un emigrado cubano justo el mismo año en que se pierde la colonia.

En conclusión, esto sería todo lo que ver en Blanes. ¡Ahora solo queda visitarla!

Imprescindibles

Dónde dormir en Blanes
Parroquia de Santa María
Dónde dormir en Blanes
Torre de Sant Joan

Datos prácticos

Coordenadas

41º 40’ 37” N, 2º 47’ 30” E

Distancias

Girona 43 km, Barcelona 73 km, Madrid 685 km.

Aparcamiento

Es recomendable dejar el vehículo en las inmediaciones de la las vías de acceso al casco urbano.

Altitud

3 m

Habitantes

39 785 (2012)

Carnaval. Semana Santa. Fiestas Mayores de Sant Joaquim y Santa Anna (mediados de julio). Fiestas Menores de Sant Bonòs y Maximià (mediados de agosto).

Mercado del barco usado (abril / mayo). Concurso Internacional de Fuegos Artificiales (finales de julio). Caminada Popular (mediados de agosto).

Otros destinos próximos

[image-carousel category=”blanes lugares”]