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Bebidas fresquitas para combatir el calor

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Cuando comienza a apretar el calor todos deseamos tener a mano bebidas fresquitas. Algunas son muy nutritivas, como la horchata y el granizado de limón, y otras tan refrescantes como la sangría y el tinto de verano. Y es que nadie puede negarse a una de estas 4 bebidas fresquitas mientras descansa en una terraza. ¡Son una delicia! Además, varias como el tinto de verano o la horchata, forman parte de nuestra gastronomía más tradicional. Apunta estas 4 bebidas fresquitas para combatir el calor y superar los meses de verano.

Bebidas fresquitas: Granizado

Aunque el granizado de limón es el más conocido, existen otros igual de ricos: de naranja, de melón, de sandía…¡Una bebida sana y llena de propiedades! En esta ocasión, te vamos a enseñar a preparar el granizado de limón, todo un clásico. Aprovecha las vitaminas de esta fruta en una de las bebidas más fresquitas. ¡Perfecta también para los peques de la casa!

granizado limon
  • Limones ( 4 ), agua ( 1/2 litro ), cubitos de hielo ( 4 ), azúcar ( 300 gramos )

En una licuadora, echamos los limones previamente pelados. Vertemos también el agua, los hielos y el azúcar. Tritura hasta que adquiera un ligero espesor. Añade más agua o hielo según se necesite.

Bebidas fresquitas: Tinto de verano

El tinto de verano surge en España a mediados del siglo XX y se instala rápidamente como la bebida de las verbenas y terrazas. Servido en vaso de tubo o caña, es una bebida alcohólica. Su origen tiene lugar en Córdoba, en un local llamado la Venta de Vargas, donde se reunían cantantes y guitarristas. ¿Qué se servía? ¡Vino tinto con gaseosa!

tinto verano
Foto: Mattbites
  • Tinto joven, botella de gaseosa (1), cubitos de hielo, rodajas de limón y de naranja (decoración)

En una jarra echamos los hielos. Tras esto, vertemos un tercio del vino escogido y dos tercios de gaseosa. Decoramos cada vaso con una rodaja de naranja o de limón y servimos el tinto de verano. El siguiente paso es disfrutar de una de las bebidas fresquitas más deseadas.

Bebidas fresquitas: Horchata

La horchata de chufa es una de las bebidas fresquitas más consumidas en Valencia, de donde es típica. Aunque por su apariencia pueda pasar por leche de vaca, es una bebida que se extrae de la chufa y de sabor dulce. La chufa de Valencia es un tubérculo con D.O.P. e ingrediente principal de la horchata. Una bebida energética llena de propiedades digestivas. Es típico acompañarla de unos dulces muy golosos, los fartons. Por cierto, la mejor horchata y fartons de Madrid en la Horchateria Alboraya, C/Alcala 125.

horchata valenciana
  • Chufas ( 250 gramos ), agua ( 1 litro ), azúcar ( 125 gramos )

Antes de meternos de lleno en la elaboración de la horchata, deberás tener las chufas en remojo de 24 a 48 horas. También aconsejamos cambiar el agua en varias ocasiones. Cuando pase este tiempo, metemos las chufas en un recipiente con un poco de agua. Trituramos con la batidora para que salga la leche de la chufa. Tras esto pasamos por un colador para eliminar posibles grumos. Añadimos el agua restante y el azúcar mezclando bien. Para acabar, metemos la bebida en la nevera durante al menos dos horas. Consumir en el mismo día.

Bebidas fresquitas: Sangría

¿Otra de nuestras bebidas fresquitas? ¡La sangría! Esta bebida alcohólica es muy consumida durante los meses de verano. Además de sus ingredientes básicos, suele llevar algún tipo de licor. Sin embargo, en cada región la receta varía. En Asturias, por ejemplo, se prepara con sidra. Te aconsejamos preparar la receta con tiempo, de esta forma el vino adquiere todos los matices de la fruta y el sabor es aún mejor.

sangria
  • Vino tinto joven ( 1 litro ), zumo de 2 naranjas o limones, melocotones ( 4, en trozos )
  • Azúcar ( 3 cucharadas ), cubitos de hielo
  • Opcionales: licor, ron o gaseosa

Primero, ponemos los melocotones pelados y cortados en trozos en una jarra. Añade el vino, el zumo de limón o naranja y el azúcar. Mezclamos y dejamos en la nevera mínimo 2 horas. Si queremos rebajar el grado alcohol podemos echar gaseosa. Si por el contrario la queremos más fuerte, debemos echar el licor antes de meter en la nevera. Cuando vayamos a servir la sangría echamos antes el hielo, así se mantendrá fría.

Texto: María Jesús Colombo