Los mejores destinos para unas vacaciones baratas de última hora

No estamos hablando de escapadas de dos días, ni estamos hablando de coger el coche y lanzarse a la carretera con la expectativa de estar de vuelta en unas horas: estamos hablando de unas auténticas vacaciones. Además, en estas líneas queremos hablar de vacaciones o, al menos, lo más asequible posible. Quizá por haber logrado ofertas de última hora, por aprovechar la temporada baja para viajar al destino en cuestión o porque ese destino en cuestión tiene una oferta fantástica para el turista, estos destinos son ideales para todos aquellos que anden buscando algo así. Si no sabes adónde ir para encontrar destinos baratos, aquí dejamos unas cuantas propuestas.

7 propuestas para unas vacaciones baratas por España

Tenerife, la isla soñada

Playa de Benijo. | Shutterstock

Tenerife, por ejemplo, está a la cabeza a la hora de recomendar vacaciones baratas aprovechando los meses de invierno para ello. Dado que el buen tiempo nunca abandona la isla soñada, cualquier época del año es fantástica para visitarla. En todo momento, allí esperará el Parque Nacional del Teide para impresionar y conquistar a quien lo descubra. Este lugar es seguramente el imprescindible de la isla canaria, pero no es lo único que hay que ver.

La cueva del Viento, otra formación volcánica impresionante, o el Parque Rural de Anaga, Reserva de la Biosfera desde hace una década, son otros rincones que ejemplifican bien la naturaleza de Tenerife. Y uno no podrá ni querrá marcharse sin probar sus playas. Destaca, entre todas ellas, la de Benijo. Como destaca San Cristóbal de la Laguna, única ciudad Patrimonio de la Humanidad de las Islas Canarias, o Icod de los Vinos, cada vez más reconocido como uno de los pueblos más bonitos de España. Para conocer Tenerife es necesario alquilar un coche, pero este gasto se compensará con lo barato que encontrará el viajero el resto de los servicios.

Mallorca, joya del Mediterráneo

Valldemossa, pueblo de Mallorca. | Shutterstock

La isla más grande de España es también un destino ideal para disfrutar de unas vacaciones baratas en temporada baja. Como sucede con Tenerife, es necesario alquilar un coche para conocerla de verdad, así como destinar varios días a explorarla. Solo de esta manera uno podrá descubrir sus secretos y esos rincones que solo visitan los locales. Pero hay que empezar por el lugar al que todo el mundo acude: Palma, la capital.

El casco antiguo de la ciudad cuenta algo de la rica historia de la isla, que en otro tiempo fue habitada por romanos, bizantinos o musulmanes. El castillo de Bellver o la impresionante catedral son algunos de los enclaves obligatorios a conocer antes de abandonar la ciudad para tomar la carretera. Mallorca tiene para el viajero todo lo que el este puede desear: playas preciosas y cuidadas, pueblos imposiblemente bonitos como Fornalutx, o la sierra de Tramuntana, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Una semana en Mallorca se quedará corta porque lo que deseará el viajero será quedarse a vivir.

Ourense, el sagrado interior gallego

Panorámica de Ourense. | Shutterstock

Galicia está irremediablemente asociada a su costa y es perfectamente lógico que así sea, pues los más de 1.500 kilómetros que esta ocupa parecen haberlo condicionado todo, pero nunca, en ningún caso, hay que olvidarse de lo inmenso que es también su interior. Ourense es la única provincia gallega que no tiene acceso al mar, pero esto no significa que no tenga riqueza. Empezando por la ciudad: desde la catedral de San Martiño hasta la iglesia de Santa María Madre, pasando por sus preciosos puentes, sus termas o la vida que siempre tienen sus calles, Ourense es una ciudad ideal en la que relajarse durante unos días.

Y qué decir de los alrededores. Pueblos como Allariz son una delicia para los amantes del turismo rural, y entornos naturales como el del río Barbantiño o templos históricos como el monasterio de San Pedro de Rocas constituyen una excursión fantástica y asequible desde la capital de provincia. Claro que la joya de la corona es la Ribeira Sacra, un lugar cuyo significado completo no se puede comprender hasta que no se ha visitado. Un lugar, como se dice en Galicia, enxebre.

Valencia, la ciudad de moda

Valencia. | Shutterstock

La ciudad de Valencia está de moda. En su apuesta por la sostenibilidad y los espacios verdes ha logrado convertirse en uno de esos lugares en los que, en España y en Europa, se está poniendo la mirada, con la intención no solo de pasar unos días sino, incluso, de quedarse vivir. Pero volviendo a lo primero, es un destino ideal para disfrutar de unas vacaciones baratas por varias razones: su buena comunicación con el resto de España, su gran oferta de alojamiento y sus precios asequibles en general.

¿Qué puede hacer el viajero en Valencia? Pasear por el Jardín del Turia, el parque urbano más grande de España, descubrir un pasado gótico que ha dejado edificios considerados Patrimonio de la Humanidad, maravillarse con la Ciudad de las Artes y las Ciencias o acercarse a la cercana Albufera, que parece otro mundo a tan solo media hora de la ciudad.

Zaragoza, cada vez más grande

Zaragoza. | Shutterstock

También Zaragoza va estando de moda y no es para menos. Le sucede parecido a lo que le sucede a Valencia: está apostando por la calidad de vida de sus habitantes y, al tiempo, la oferta para el turista es cada vez mejor. Zaragoza es una de esas ciudades que, una vez que la visitas, sabes que ha estado ahí esperándote toda la vida, porque el tiempo que pasas en ella es un tiempo de calidad. La oferta gastronómica es espectacular, el ambiente en su centro histórico envidiable y los lugares que descubrir numerosos.

Puede que uno haya escuchado hablar de la Basílica de Nuestra Señora del Pilar pero sucede lo que también sucedía con la Ribeira Sacra: hay que conocerla en persona para comprender su inmensidad y su belleza, así como su historia y su importancia en la ciudad. Una ciudad, por cierto, ideal para descubrir sin mapas. También para descubrir sus alrededores: la historia en Viejo Belchite, la leyenda en Trasmoz o la belleza en Tarazona. Zaragoza es cada vez más grande.

León, montaña y tapas

León. | Shutterstock

También son numerosas las razones por las que podemos recomendar León para disfrutar de unas vacaciones baratas en España. Aunque la principal se cuenta fácil: tapas. Las tapas que acompañan a cada bebida en León justifican una visita, porque esta es una de esas ciudades, como sucede en toda Castilla y León, en la que la bebida siempre va acompañada de la comida sin necesidad de pedir esta aparte.

En las calles de León puede descubrirse también un legado modernista que tiene su máxima expresión en la Casa Botines, obra del genio Antoni Gaudì, uno de los pocos edificios que dejó fuera de Catalunya. El convento de San Marcos o la colegiata de San Isidro también merecen una visita, aunque la que se lleva todas las miradas, y con razón, es la catedral de Santa María de Regla. Fuera de la ciudad, esperan entornos naturales como la cueva de Valporquero o el faedo de Ciñera, así como pueblos de belleza histórica como Babia o Riaño, que esperan a la sombra de la montaña al viajero que quiera disfrutar de sus numerosos encantos.

Cádiz, vida andaluza

Calles de Cádiz. | Shutterstock

Cádiz es una provincia sobradamente conocida por sus pueblos blancos y sus playas de ensueño, pero la ciudad tiene también encantos que ofrecer al viajero. Sin ir más lejos, el encanto de caminar sin necesidad de rumbo o mapas, absorbiendo todo lo que queda ante la mirada porque todo es bonito, especialmente si se pasean barrios como el del Pópulo o el de la Viña,. Monumentos como la catedral de la Santa Cruz o el Gran Teatro Falla irán apareciendo, y el turista pronto entenderá que es una de las provincias con mejor relación calidad-precio de España.

Dado que para estas vacaciones baratas queremos aprovechar varios días, entonces, ya sí, toca abandonar la ciudad. Estas escapadas a menos de dos horas de Cádiz pueden dar una pista de todo lo que se puede hacer en la provincia, pero podemos resumirlo así: playa, montaña, pueblos de carácter como Setenil de las Bodegas y otros de belleza espectacular como Zahara de la Sierra. La vida andaluza sabe muy bien en Cádiz. Y la vida en general sabe mejor en vacaciones.