[vc_row][vc_column][vc_column_text]La gastronomía española se considera una de las más ricas, llena de recetas sabrosas. Los platos más tradicionales son fruto de años de perfeccionamiento y de ingredientes de calidad. ¿Te gustaría descubrir qué plato eres según tu personalidad? Cada persona es un mundo, pero existen algunas características de nuestra forma de ser que nos empujan a decantarnos por unos u otros. Si sabes cuál es el rasgo de tu personalidad que mejor te define, sabrás qué receta serías en el universo de los platos tradicionales.[/vc_column_text][vc_column_text]
Extrovertido
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230614″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]Las personas extrovertidas no tienen miedo a mostrar sus sentimientos y se abren a los demás con facilidad. Pueden reír a carcajadas y minutos después llorar a lágrima viva. Son esas personas que no tienen miedo a destacar ni a socializar. Para ellas, un clásico: las patatas bravas. Un plato en apariencia simple, pero ojo: crear la salsa brava perfecta es fácil. Se trata de una receta tan explosiva como su carácter.[/vc_column_text][vc_column_text]
Amable
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230618″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]Si estás siempre dispuesto a ayudar a los demás y a mostrarles una bonita sonrisa o un gesto de comprensión, no podrás ocultar que eres una persona amable. De entre todos los platos tradicionales de la gastronomía española, la amabilidad podría compararse con un plato de lentejas con chorizo. Un sabor castizo en una receta que sólo es posible preparar de manera perfecta cuando se hace con cariño y con amor.[/vc_column_text][vc_column_text]
Responsable
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230622″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]No dejarás para mañana lo que puedas hacer hoy. Este es el lema de las personas responsables, grabado a fuego en su frente. La responsabilidad es algo que te acompaña en el día a día: en los estudios, en la oficina… La paella es la receta con la que se identifican este tipo de personas. Para hacer una buena paella valenciana hay que estar pendiente de muchos factores. No vale sólo que el arroz no se pase; pero luego el resultado es para chuparse los dedos.[/vc_column_text][vc_column_text]
Convencional
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230650″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]No eres una persona que se salga de lo tradicional. Te gusta moverte en ambientes que ya conoces y la rutina es una de tus mejores amigas. ¿Para qué probar algo nuevo si lo que ya conoces está buenísimo? Para ti tenemos una buena tortilla de patatas. Pero no nos equivoquemos: con este plato también se puede jugar. Puede estar jugosa, líquida, más compacta…[/vc_column_text][vc_column_text]
Leal
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230654″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]Los amigos y la familia lo son todo para ti. No hay nada más sagrado que seguir al lado de aquellos que han estado en los momentos más importantes de tu vida. Nunca perdonarías la deslealtad o la mentira. Si encajas en esta descripción, es posible que un plato tradicional como la fabada asturiana sea uno de tus favoritos. Eres tan leal que, si hace falta, la pedirías hasta en pleno agosto.[/vc_column_text][vc_column_text]
Cariñoso
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230658″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]Sabes que un abrazo puede reconfortar y aliviar, por lo que no temes mostrarte cercano y cariñoso con las personas que te importan. Y con las que no conoces tanto… también. Demuestras el aprecio con muestras de afecto, y la gente siempre recurre a ti en los momentos más bajos porque sabes cómo reaccionar. Los platos tradicionales que mejor concuerdan con tu personalidad son las recetas de repostería. En concreto, eres una suave crema catalana. Pero cuidado, que mucho empalaga.[/vc_column_text][vc_column_text]
Seguro
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230662″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]Tus ideas valen lo mismo que las de cualquiera, por eso no tienes miedo a mostrar tu opinión. Si eres una persona segura de ti misma podrías ser muchos platos tradicionales distintos. Sin embargo, existe uno que seguro que habrás comido tanto en casa o como en un restaurante de postín. Hablamos de las croquetas. Existen muchas recetas de croquetas y a ninguna se le hace ascos. Pueden ser de jamón o de cocido, e incluso más modernas, como las croquetas de morcilla de Burgos.[/vc_column_text][vc_column_text]
Despistado
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230666″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]Eres capaz de salir de casa sin las llaves y de quedar con un amigo y equivocarte de fecha. Los despistados son así y no pueden evitarlo, aunque existe en su personalidad algo entrañable que los caracteriza. Eso sí, jamás se olvidarían de pedir un gazpacho bien fresquito en su taberna favorita. Una receta sencilla de elaborar que hasta el más despistado podrá preparar (si no se olvida ningún ingrediente en el supermercado).[/vc_column_text][vc_column_text]
Calmado
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230671″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]Las personas tranquilas nunca pierden la calma ante los imprevistos. Una gran virtud, ya que de nada sirve volverse loco. La calma les acompaña cada día y sus platos tradicionales favoritos son los más simples, que a menudo suelen ser los mejores. En otra vida seguro que fueron un plato de pulpo a la gallega.[/vc_column_text][vc_column_text]
Valiente
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230677″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]Te gustan las emociones fuertes y los platos tradicionales con sabores picantes te llaman mucho la atención. No tienes miedo a probar cosas nuevas… y tampoco en el ámbito gastronómico. Además, los platos más contundentes se convierten en un reto para ti. Seguro que alguna vez has pensado: “Este plato me lo acabo como que me llamo…”. El cochinillo segoviano al horno jamás se te resiste.[/vc_column_text][vc_column_text]
Hablador
[/vc_column_text][vc_single_image image=”230681″ img_size=”full” add_caption=”yes” alignment=”center”][vc_column_text]Hablar por los codos puede ser una gran virtud o un gran defecto. El secreto es saber cuándo ser una persona habladora y cuándo convertirte en esa que sabe escuchar. Según su personalidad, los habladores son un plato de cocido madrileño, con una lista de ingredientes tan larga como su capacidad de conversación.[/vc_column_text][vc_column_text][/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]