fbpx

Componedores, arreglando huesos con sentidiño

Componedores de huesos

Comencemos esta historia con una onomatopeya que describe con acierto el objeto de nuestra narración, allá vamos: “¡ay!”. Eso era lo que se escuchaba hace tiempo, de forma repetida y constante, en ciertas casas de las diferentes comarcas gallegas. Un grito concentrado en un segundo, pues no duraba más el dolor ni la angustia. ¿Alguno de los aquí presentes ha escuchado hablar de los componedores de huesos? Ellos eran los responsables de este pequeño sobresalto que encogía el cuerpo un segundo y después, “¡ay!”, arreglado.

Estos componedores de huesos nunca tuvieron un título universitario, ni se anunciaban por otro medio que el boca a boca de sus vecinos, pero por sus casas han pasado cientos, ¡miles!, de personas a lo largo de los años. Este oficio nació con la curiosidad y la destreza de unos pocos y ha ido muriendo a medida que estos lo han hecho. Aquí empieza una nueva historia. Había una vez unas personas capaces de arreglar huesos con sus manos…

 

Hazte premium

y sigue leyendo

PLAN MENSUAL

1.99€/mes

PLAN TRIMESTRAL

4.99€/trimestre

PLAN ANUAL

17.99€/año

Disfruta de los mejores reportajes, series y entrevistas

¡SIN COMPROMISO!

También te puede interesar  El bosque único en Europa que crece en una isla encantada