El Parque Nacional de Monfragüe reune 18.118 hectáreas de terreno en el centro del triángulo formado por las ciudades de Cáceres, Trujillo y Plasencia. Su nombre viene de época romana, cuando la zona fue conocida como Mons Fragorum, Monte Denso.
Su gran valor ecológico reside en que se trata de una de las manchas de bosque mediterráneo más extensas de España. El río Tajo y el Tiétar lo recorren, serpenteando a través de las dehesas, montes, bosque y roquedos que conforman este ecosistema de gran diversidad biológica.
Vegetación y fauna
Entre su vegetación predomina aquella propia del bosque mediterráneo y en sus dehesas podemos encontrar encinas, alcornoques o quejigos. Multitud de especies animales buscan en el Parque Nacional de Monfragüe un lugar de cría, convirtiéndolo en uno de los mayores refugios en España para la fauna mediterránea. Destacan en el Parque Nacional de Monfragüe las grandes colonias de aves como el buitre negro y leonado, el águila imperial ibérica o la cigüeña negra.
Además, al igual que en otras zonas de dehesa y monte bajo de España, abundan en Monfragüe especies cinegéticas como el ciervo o el jabalí. Por la variedad de especies que cobija, el Parque Nacional de Monfragüe es uno de los principales centros de observación y turismo ornitológico en España. La importancia del río Tajo ha sido fundamental en la creación de este singular paisaje natural.