El Parque Natural de las Lagunas de Neila lo declaró el Gobierno de España en 2008.
Abarca un total de 6.860 hectáreas de terreno montañoso de origen glaciar ubicado en el valle de Neila, en plena sierra de la Demanda burgalesa.
Se trata de un conjunto de circos y lagunas glaciares que se extienden sobre un ecosistema puramente montañoso de gran valor paisajístico y natural.
Las principales lagunas del conjunto son la Negra, Cascada, Tejera, Haedillo, Patos, Pardillas y Brava. Entre todas ellas destaca la Laguna Negra, que emplazada a 1.900 metros de altura supone el principal atractivo del parque.
Cerca de ésta se encuentra la Laguna Larga, desde la que se puede contemplar los 2.049 metros de la cima del pico La Campiña, el punto más elevado de las lagunas de Neila. Los desagües de las diferentes lagunas forman en su descenso fuertes corrientes de agua que suelen quedar heladas durante los meses de invierno.
Otro punto de interés en el conjunto del parque es el desfiladero de Las Calderas, fruto de la acción erosionante del agua y repleto de cascadas, pozas y otros atractivos naturales.
Vegetación y fauna
La vegetación predominante en las lagunas de Neila es el bosque de hayas y pinos, pero también abundan otras especies como el roble o el abeto.
Entre su población mamífera cuenta con ejemplares de venado, corzo, jabalí, ardilla o desmán de los Pirineos. Algunas de las aves más habituales en son el búho real, la lechuza, el mirlo o el martín pescador. Además, en los terrenos lacustres es habitual la presencia de truchas y numerosas especies anfibias.