El anuncio de la reapertura del turismo al extranjero en julio anunciada por el Gobierno parece haber tenido un efecto inmediato. Pese a que todavía se están negociando corredores sanitarios, los ciudadanos extranjeros y nacionales se han lanzado a reservar en España. Según palabras del vicepresidente de Exceltur, José Luis Zoreda, entre el sábado y el lunes pasado algunos destinos registraban aumentos del 300 y 400 por cien. Una tendencia centrada en destinos turísticos tradicionales británicos y alemanes, como Mallorca, la Costa del Sol o Cataluña.
Tales aseveraciones fueron hechas durante un webinar a cargo del Club de Economía de Lloret de Mar. El relanzamiento vacacional ha avanzado a marchas forzadas, con gestos como retirar la cuarentena obligatoria de 14 días. Esto ha hecho variar la situación de forma absoluta de un mes a esta parte según Zoreda. “El nivel de reservas está creciendo a tasas vertiginosamente altas, multiplicándose por tres y por cuatro”, aseguró. En esta reacción el peso de los ciudadanos europeos sería muy alto.
Aviones podrán ir al máximo de su capacidad a partir de mediados de junio
Este repunte solo supone el inicio de una carrera de fondo según Zoreda. “En comunicación, de momento Turquía, Portugal, Grecia o Italia ganan por 10 a 1 a España”, sentencia. Estos países están planteando ya corredores sanitarios en firme, mientras que España se ha visto rezagada y a la espera de directrices desde Bruselas. Con todo, la reanudación de vuelos comerciales nacionales e internacionales por parte de compañías patrias o el aumento de las plazas en estos marcada por la UE vaticinan que la posibilidad de recuperar el terreno perdido. Faltan, eso sí, medidas concretas.
Algunas de las alternativas a las que se está apuntando es usar las Baleares y Canarias como cabezas de corredores aéreos. No conectarían con grandes ciudades muy azotadas por el COVID-19, como Londres. Alternativas con menor afectación, como Birmingham, serían la solución. Es una de las apuestas que lanzaron el propio Zoreda y otros agentes del sector privado. Sea como fuere, la maquinaria turística se reactiva. De playas a restaurantes, los negocios se preparan para reabrir. Las vacaciones de verano han pasado de ser una quimera a una realidad.
