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Vías verdes de Navarra, bellos senderos renacidos del ferrocarril

túnel vía verde de navarra

A través de antiguos viaductos, estaciones de tren abandonadas, grandes túneles, caminos de tierra entre verdes bosques… A lo largo de viejas minas que quedaron desamparadas o trazados de ferrocarril de obras que nunca se finalizaron. Las vías verdes recorren todos estos lugares. Son el esqueleto de las vetustas vías de tren por las que ya no pasa ningún convoy. Caminos que se decidieron restaurar con la intención de reutilizarlos. Ahora, aquellas vías por las que pasaba el tren son las mismas que dan cobijo a ciclistas y senderistas. Senderos también accesibles para personas con movilidad reducida. En España se extienden a lo largo de hasta 3.100 kilómetros. De todos ellos, al menos 120 se corresponden con las vías verdes de Navarra, la comunidad en la que se centrará el presente artículo.

Allí hay en total cinco vías. Cinco largos senderos a través de los cuales conocer mejor esta bella comunidad foral salpicada de montañas y de impresionantes y coloridos bosques en su zona norte y extensas llanuras aluviales en su zona sur. Son la vía verde del Bidasoa, la de Tarazonica, la del Ferrocarril Vasco Navarro, la del Irati y la del Plazaola.

Vía verde del Bidasoa

Parque Natural del Señorío de Bertiz
Parque Natural del Señorío de Bertiz. | Shutterstock

La Vía Verde del Bidasoa comienza en la localidad de Oieregi y termina en Endarlatsa. Por el camino, el senderista podrá pasear por bellos entornos naturales como el embalse de Domiko y de Endara o la Reserva Natural de San Juan Xar, salpicados por grandes arboledas que en otoño despliegan toda su gama de colores. Pero no todo es naturaleza.

En dirección al pueblo de Bera, un búnker de la guerra civil sobrevive al paso del tiempo, mientras que el casco antiguo de dicha villa tampoco desmerece una visita. Sobre el tramo de Doneztebe/Santesteban, cabe destacar un dato. Se trata de la única parte de la vía que es utilizada por vehículos a motor, así como por ganado. Por lo que, en esta zona, mejor ir con precaución.

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Vía verde de Tarazonica

Tudela, Navarra
Tudela, Navarra. | Shutterstock

Era 1885 cuando quedó inaugurada la línea de ferrocarril que unía Tudela, en Navarra, con Tarazona, en Zaragoza. Sin embargo, con el paso del tiempo, aquella vía fue ganando fama por su ineficiencia. El estallido de la guerra civil no mejoró la situación. Así que, finalmente, RENFE hizo una remodelación y aquella línea se reinauguró en 1953. Aun así no prosperó y se terminó clausurando en 1972.

Por suerte, este camino ferroviario pudo reutilizarse como vía verde. Son 22 kilómetros que, en este caso, recorren la parte sur de Navarra. Si antes los paisajes eran bosques, ahora son las llanuras, los campos de cultivo y las riberas del río Queiles las que dominan el horizonte. En el camino aguardan, además, lugares como la ermita de la Virgen del Romero, el monasterio de Tulebras o la monumental ciudad de Tudela, lugar de origen de la ruta. Tampoco podemos olvidarnos de las vistas de la montaña de Moncayo en el tramo Tudela-Marchante.

Vía verde del Ferrocarril Vasco Navarro

Río Ega junto al municipio de Estella, Navarra
Río Ega junto al municipio de Estella, Navarra. | Shutterstock

La última noche del año 1967 fue también la última para el trenico, como se conocía a este ferrocarril que unía las estaciones de Estella-Lizarra y Mekolalde. Más tarde, pasó a convertirse en una vía verde más, la más larga de Navarra. Aunque, en realidad, de los 96 kilómetros que recorre este sendero, solo 27 discurren por Navarra. A pesar de que esta vía se complica en su parte alavesa, el lado que recae en Navarra es muy sencillo de hacer y hasta es posible ir con niños pequeños.

El camino empieza en la antigua estación del ferrocarril de Estella-Lizarra, hoy reconvertida en terminal de autobuses. Desde allí, sigue el viejo trazado del tren junto al río Ega. Estos primeros tres kilómetros son a través del bello casco urbano de la ciudad. Después, la ruta se interna en un camino natural que discurre entre pueblos, bosques y algún que otro campo de cultivo. Sin olvidar, por supuesto, las vistas de la sierra de Lokiz que se pueden disfrutar a través del sendero. En la localidad de Zúñiga se acaba el camino navarro y empieza la parte vasca, donde la dificultad asciende.

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Vía verde del Irati

Reserva Natural de la Foz de Lumbier
Reserva Natural de la Foz de Lumbier. | Shutterstock

Si en vez de pasar todo el día fuera lo que se quiere es solo pasar unas horas para luego tener el resto libre, la vía Verde del Irati es la mejor opción. Solo consta de seis kilómetros, pero, eso sí, incrustados en uno de los paisajes más bellos de Navarra: la Reserva Natural de la Foz de Lumbier. En este impresionante cañón excavado por el río Irati las aves rapaces campan a su antojo. De hecho, la importancia de esta colonia avícola es el motivo por el que Foz de Lumbier fue declarada como Reserva Natural.

No obstante, hasta 1955 este sendero, que ahora une los municipios de Lumbier y Liédena, era una vía de tren. De hecho, el ferrocarril del Irati se convirtió en el primer convoy eléctrico de pasajeros en España.

Vía verde del Plazaola

Túnel en una de las vías verdes de Navarra
Túnel en la vía verde de Plazaola. | Shutterstock

El ferrocarril de Plazaola era el que unía antiguamente las ciudades de Pamplona y San Sebastián. En principio, era un tren minero, pero con el tiempo también se dedicó al transporte de mercancías y viajeros. Las riadas del año 1953, que arrastraron algunos puentes y vías, fueron el final definitivo del ferrocarril de Plazaola, que ya arrastraba una deficiente situación económica.

De aquel sendero de 85 kilómetros se pueden recorrer ahora más de 66. Casi 42 discurren por Navarra, mientras que los restantes se complementan en Gipuzkoa. ¿Y qué se puede ver a lo largo de la vía verde del Plazaola? De nuevo, ríos, túneles, presas y, en general, paisajes que quitan el hipo. Destaca el túnel de Uitzi, de casi tres kilómetros de longitud, que durante mucho tiempo fue el más largo de Europa.

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Artículo realizado en colaboración con Turismo de Navarra.