fbpx

Qué ver en Villafranca Montes de Oca

Panorámica de Villafranca Montes de Oca con iglesia

Fue obispado de los visigodos y acoge “el milagro de la luz”

Llamada Auca en tiempos romanos, Villafranca Montes de Oca alberga una historia ligada al Camino de Santiago. Fue en sus alrededores donde se produjo el milagro de la resurrección de un joven. Otro milagro tiene lugar dos veces al año en un pueblo cercano. Se trata del Milagro de la Luz, en el Monasterio de San Juan de Ortega. Descubre lo que hay que ver en Villafranca Montes de Oca.

Planifica tu escapada a Villafranca Montes de Oca

El recorrido por todo lo que describimos en el apartado “Qué ver en Villafranca Montes de Oca” de esta página puede llevarnos un día completo. La escapada puede continuar por esa misma carretera en el yacimiento prehistórico de Atapuerca para rematarse en el Museo de la Evolución y otros atractivos de  la ciudad de Burgos. Hacia el norte se puede hacer una excursión de un par de horas a Briviesca, que es una localidad con tradición gastronómica.

Existen numerosos actividades de turismo activo en la provincia de Burgos entre las que elegir. En nuestra página Dormir y Comer en Villafranca Montes de Oca explicamos los platos locales y donde reservar para dormir bien.

¿Quieres conocer este sitio?

Antes de conocer lo que hay que ver en Villafranca Montes de Oca, conviene repasar su historia. La población romana de Auca, edificada sobre un poblado previo autrigon, se encontraba un poco más al sur del emplazamiento actual. Tuvo numerosas edificaciones, de las que quedan varios yacimientos. Muestra de su importancia es el hecho de que Auca Patricia fuera sede episcopal durante la época visigoda. Más tarde fue destruida parcialmente por la ocupación musulmana.

Hacia mediados del siglo IX el conde de Castilla Diego Porcelos restauró el obispado de Auca. También promovió la población entre los años 873 y 880. Desde esta base atacó más adelante la zona de la actual ciudad de Burgos, que fundó hacia el 884. Al año siguiente murió y fue enterrado en la Ermita de San Felices.

Durante casi dos siglos la sede episcopal se mantuvo en Auca. Esto fue hasta que la capitalidad del condado de Castilla aconsejó su traslado en 1075. La pérdida de la residencia del prelado y sus acompañantes, unida a las campañas del aragonés Alfonso I el Batallador contra su esposa la reina leonesa doña Urraca, determinaron la decadencia de este lugar.

Al convertirse el Camino de Santiago en una importante vía de comunicación, los pobladores de Auca se fueron trasladando un poco más al norte del emplazamiento original. A la vera del Camino compostelano fundaron entonces un nuevo asentamiento que fue llamado Villafranca. La primera guía de viajes del mundo, el Codex Calixtinus, cita un milagro ocurrido allí en el año 1108. Cuenta la resurrección de un joven, quien acompañaba a su familia en la peregrinación cuando fue atacado por salteadores y fieras. Los hechos ocurrieron en un paraje temido, llamado Nemus Oque. El peregrino volvió a la vida por intercesión del Apóstol. Ello atrajo a nuevos peregrinos al lugar.

En 1383 la reina Juana Manuel, esposa de Enrique de Trastámara, estableció un hospital de peregrinos que aún existe. A él alude el refrán “Villafranca Montes de Oca, alta de camas y pobre de ropa”.

Fotografía antigua del Monasterio de San Felices de Oca, lugar que ver en Villafranca Montes de Oca
Restos del Monasterio de San Felices de Oca

Entre 1785 y 1833 fue cabecera de la Hermandad de Villafranca de Montes de Oca en el partido de Juarros, uno de los catorce de la Intendencia de Burgos. Tenía jurisdicción entonces sobre doce lugares y un alcalde ordinario. En noviembre de 1833, en sus inmediaciones, tuvo lugar una batalla entre los primeros sublevados carlistas y las tropas liberales. Estas los dispersaron con facilidad. Con el nuevo régimen devino Ayuntamiento constitucional del partido de Belorado en la región de Castilla La Vieja.

A pesar de la pérdida de población desde mediados del siglo XIX, sigue siendo una pequeña cabeza comarcal de servicios. Recomendamos leer el apartado que se encuentra a continuación para conocer lo que hay que ver en Villafranca Montes de Oca.

Existen numerosos lugares que ver en Villafranca Montes de Oca, con un alargado trazado urbano que se atribuye al Camino de Santiago. Destaca en su perfil de caserío la Iglesia de Santiago. El antiguo templo románico, junto al castillo, desapareció a fines del siglo XVIII. Se construyó entonces la actual, donde se reutilizaron algunos sillares. Destaca sobre todo en su interior el retablo romanista de la Ascensión. A modo de pila de agua bendita se halla una enorme venera, una concha de peregrino compostelano.

Cercana a ella se encuentra el Hospital de San Antonio Abad. Su fundación se atribuye a la reina Juana Manuel, reina de Castilla, en 1380. Es por ello que también se conoce como “Hospital de la Reina”. Su portada data de los siglos XV-XVI y el patio del siglo XV. Sustituye a una fundación monástica anterior del siglo XII. Actualmente es albergue de peregrinos y hotel. Al sur de la población se encuentra la Ermita de Nuestra Señora de Oca, de primitiva fundación prerrománica con reformas posteriores.

La población inicial fue el Monasterio de San Felices de Ocas, otro de los templos que hay que ver en la visita a Villafranca Montes de Oca. Su origen se remonta al año 863. Un año después el conde Diego Rodríguez Porcelos, fundador de Burgos, donó a los monjes varias iglesias y heredades. Años más tarde añadió otros privilegios. Fue enterrado en dicho templo. En 1049 el rey navarro García de Nájera lo entregó a los monjes de San Millán de la Cogolla.

La cabecera del edificio es hispanomusulmana, cuadrada. Cuenta con grandes sillares de areniscas en los que se integraron lápidas funerarias romanas. Su acceso es un arco triunfal de herradura. Se vincula con otros edificios coetáneos como San Vicente del Valle, San Pedro el Viejo de Arlanza o Quintanilla de las Viñas.

La villa cuenta además con el Museo Arqueológico y Etnográfico Aucense. Da cuenta de los hallazgos de los 17 enclaves arqueológicos de la zona: dos en Ocón y quince en Villafranca. Además de las excavaciones unidas a edificios que han permitido conocer mejor sus etapas constructivas, se realizaron trabajos como los del yacimiento “Vega Bajera”. En él fueron hallados un fragmento de mosaico romano y un amplio espectro de restos cerámicos. Han permitido darle una adscripción “Altoimperial-Tardorromano posible”.

Por la carretera que asciende a la Pedraja, al comienzo del enclave natural privilegiado del desfiladero de Oca se localiza una fuente. Brotó en el lugar donde se cree fue martirizado San Indalecio, un discípulo de Santiago. También cercana está La Caldera o Cueva del Moro, donde se escondían los bandoleros dedicados a asaltar peregrinos.

Con ello concluyen los lugares que ver en Villafranca Montes de Oca. No obstane, desde la localidad se inicia la travesía por los legendarios montes homónimos. Un pequeño desvío lleva hasta Valdefuentes, lugar en donde se encuentran los restos de los que fuera un importante priorato y hospital cisterciense fundado en el siglo XII.

Por un bosque de roble y pino de repoblación se llega al Monasterio de San Juan de Ortega. Se configura con la Iglesia monacal, la Capilla de San Nicolás de Bari o Capilla del Santo con su rejería renacentista, el claustro de los Jerónimos y la hospedería de Peregrinos con un pequeño claustro de piedra rojiza del siglo XVI. El Monasterio había sido una fundación de Juan de Velázquez, el religioso luego canonizado como San Juan de Ortega. A su muerte la obra continuó hasta consolidar el complejo monacal.

En los equinoccios, si las nubes no impiden el paso del sol, se produce el llamado “Milagro de la Luz”. A las cinco de la tarde un rayo ilumina el arco de triunfo del ábside septentrional. Esto permite ver con todo su detalle cuatro obras: la Anunciación de Gabriel a María, la Visitación de Maria a Isabel, el Nacimiento de Jesús y la Epifanía de los pastores. El arquitecto del templo colocó el ventanal de la fachada oriental de tal modo que la luz llegara allí durante los dos equinoccios. Aunque fuera de la localidad, este monasterio es uno de los espacios que ver al visitar Villafranca Montes de Oca.

En la comarca hay otros templos tan importantes que merecen una cuidadosa visita. La Iglesia Parroquial de San Martín de Valmala es uno de ellos. Este santuario reutilizó el ábside del primitivo templo románico como brazo de crucero. En ese ábside se aprecia la sillería de color cárdena propia de ese macizo montañoso del sistema ibérico. Su planta es semicircular y el muro se anima por columnas delgadas. De los canecillos conservados destaca el que parece representar a un mandril aullando.

Próxima a Valmala está la aldea de Alarcia, perteneciente al municipio de Rábanos. La Iglesia de la Asunción de Alarcia se levanta junto a la carretera y ha sido restaurada recientemente. Es un templo del siglo XV construido sobre otro románico anterior del que resta la portada del muro sur y una colección de canecillos que se han reaprovechado.

Otra parada obligada del Camino Francés es la Iglesia Parroquial de la Virgen de la Calle de Redecilla del Camino. A los pies del templo alberga una de las mejores pilas bautismales de todo el románico español, de más de un metro de alto. El pie lo conforma un pilar circular al que se adosan ocho columnas embebidas con sus basas románicas. Los fustes soportan la copa de la pila con silueta circular lobulada. En su cara externa se tallaron arquitecturas, grandes torreones de planta curva y otras torres menores amatacanadas con remates triangulares. Los muros están estructurados en pisos separados por cenefas geométricas. El autor de esta pila representó el paraíso de los bautizados en forma de la Jerusalén Celestial del Apocalipsis de San Juan.

iglesia santiago montes oca
Iglesia de Santiago

A unos quince kilómetros al sur de Belorado se puede visitar la Iglesia de la Asunción de Santa María de San Vicente del Valle. Su origen se sitúa en el siglo VI, aunque sin certeza sobre si se trataba de un edificio civil o religioso. Tiene una sola nave sobre enormes pilares, algunos reaprovechados de construcciones romanas. Los ventanales de medio punto originales se conservan en el muro sur. En tiempos visigodos se recreció su altura y se abrieron ventanales ajimezados en la parte superior. En el siglo X se añadió la cabecera de mampostería siguiendo una tipología común en la Sierra de la Demanda de Burgos. A comienzos del siglo XIII se añadió el arco triunfal y la portada sur donde se encuentra la inscripción del año 1224.

Imprescindibles

ermita nuestra senora oca
Ermita Nuestra Señora de la Oca
monasterio montes oca
Monasterio

Datos prácticos

Coordenadas

42º 23´11’’N, 3º 18’ 33’’W

Distancias

Burgos 36 km, Madrid 223 km.

Aparcamiento

Sin dificultad.

Altitud

948 m.

Habitantes

130 (2013).

Entre las fiestas que ver en Villafranca Montes de Oca destacan sobre todo las siguientes. San Antón (17 de enero, bendición de panes para animales enfermos y comida grupal tras la matanza). San Isidro Labrador (15 de mayo), San Bernabé (10 de junio ), Santiago Apóstol (25 de julio), Fiestas patronales de Nuestra Señora de Oca (agosto), Acción de Gracias (tercera semana de septiembre).

La Semana Cultural, en agosto, es uno de los momentos que ver en Villafranca Montes de Oca.