Qué ver en Torre del Mar

En la provincia y costa de Málaga se encuentra la ciudad de Torre del Mar, que forma parte del término municipal de Vélez-Málaga. A su vez, limita con los núcleos de Caleta de Vélez, Almayate y Vélez-Málaga, así como por los diferentes cauces del río Seco y río Vélez. Además de los monumentos y patrimonio que ver en Torre del Mar, destaca como destino de sol y playa, con muchas opciones en las que comer y saborear la gastronomía malagueña. Aquí sobre todo podrás probar buen pescaíto y ricos espetos de sardinas.

Algunas localidades que visitar a menos de una hora en coche son: Torremolinos, Benalmádena, Mijas o Nerja, esta última a menos de 30 minutos.

Antiguo castillo de Torre del Mar

El antiguo castillo de Torre del Mar o Castillo del Marqués es una de las fortificaciones que ver en el lugar. Aunque en su origen se ubicaba en la costa, con los años el castillo se quedó cada vez más lejos del mar. Su función era la de vigilar y proteger a las embarcaciones que descansaban en su puerto natural. Así, velaba por la zona ante posibles ataques piratas. También servía de edificio militar y de almacén de productos agrícolas como vinos o pasas.

Más tarde, en 1730, se reformó la fortaleza y se le añadió un segundo frente y dos torreones en los extremos. El castillo de Torre del Mar es parte del origen histórico de la ciudad, y todo un emblema para sus habitantes. A día de hoy se conservan restos del torreón oriental, aunque no en muy buen estado, y del baluarte central. Algunos tramos se han mimetizado con viviendas de la población. Se sitúa en la Plaza de la Axarquía.

Torre de Manganeta

Junto al río Vélez se ubica la Torre de Manganeta, de ocho metros de altura. Su origen se remonta al siglo XVI, y fue una de las tantas torres de vigilancia que configuraban el sistema defensivo de la costa. Conserva restos de su cobertura en estuco mudéjar aunque se encuentra algo deteriorada. Se cree que en el momento en el que se llevó a cabo el mar alcanzaba sus cimientos.

Faro de Torre del Mar

Existen varios faros en Torre del Mar, aunque el más icónico es el que se encuentra en el paseo marítimo. Se trata del monumento más emblemático de esta población de Málaga, construido en 1861. Cuenta con una altura de 29 metros. Representa la cercana relación que la localidad de Torre del Mar sostiene con el mar Mediterráneo. 

Es posible verlo en el paseo marítimo denominado Paseo Larios. Con una extensión de cuatro kilómetros, es posible pasear por este recorrido con unas vistas espectaculares de la costa, también de noche. En el Paseo Larios se hallan, además del faro, altares en honor a la Virgen del Carmen, una escultura a Blas Infante o un templete de música.

Parroquia de San Andrés

Uno de los templos que ver en Torre del Mar es la parroquia de San Andrés. Como curiosidad, hay que destacar que está levantada sobre una antigua iglesia de estilo neomudéjar. Como se quedó pequeña para albergar a todos los feligreses, se terminó derribando y construyendo el templo nuevo. 

En la actualidad, la parroquia de San Andrés cuenta con un estilo modernista y posee una planta basilical. A simple vista se observa que tiene un trazado sencillo, incluso austero. En cuanto al interior, el protagonista indiscutible es el altar, pues en su construcción se evitaron elementos que dificulten su visión, como columnas y pilares. Dentro del templo llama la atención una magnífica talla de Cristo Crucificado realizada por el artista sevillano Francisco Buiza Fernández.

Playa de Torre del Mar

Una playa familiar de arena oscura y oleaje moderado, con una extensión de dos kilómetros. La playa de Torre del Mar cuenta con la Q de calidad, distintivo otorgado por el Instituto de Calidad Turística, así como posee Bandera Azul por sus excelentes condiciones. Ofrece además diversas actividades náuticas así como distintos chiringuitos y restaurantes en el paseo marítimo entre los que elegir. Una playa urbana bien cuidada ideal para disfrutar con buenas temperaturas.

Cortijada Casa de la Viña

A los pies del Monte de la Viña se alza el cortijo denominado Casa de la Viña. Con 100 años de vida a sus espaldas, se conserva como uno de los edificios con más historia del pueblo. Situado frente a la estación de autobuses, el edificio está acompañado por jardines con palmeras y eucaliptos. Clasificada como edificio de Interés Histórico-Artístico, se restauró en 2017 tras estar algunos años abandonada.

La Azucarera

La producción del azúcar en la localidad comenzó en 1796, aunque hasta 1846 no se construye la fábrica nueva siguiendo el modelo industrial de máquina de vapor. Años después pasó a manos de la popular familia Larios, llamándose Fábrica de Nuestra Señora del Carmen. Se mantendría en activo hasta 1991, cuando se desarrolla la última de las campañas azucareras. La factoría se estableció como el principal motor socioeconómico de Torre del Mar durante décadas. 

Por este motivo, el edificio central de la azucarera se rehabilita en 1993 para acoger al público que desee visitarla, contando con un uso cultural. En las inmediaciones se ubican dos chimeneas de la época. Por dentro del edificio se puede ver una tacha y una máquina de vapor replicada de las que se usaban en el proceso de adquisición del azúcar.

Casa Larios

Rodeada de jardines, la Casa Larios es quizá el edificio de arquitectura civil más bonito de Torre del Mar. Aunque en la actualidad alberga la tenencia de alcaldía y es un centro educativo y cultural, antiguamente era la casa particular de la familia Larios, propietarios de La Azucarera. Se construyó en 1888 y es el ejemplo actual de la importancia del ingenio azucarero en Torre del Mar. Tanto es así que en una de sus fachadas se encuentra una máquina de vapor de esta época. 

El edificio presenta un estilo regionalista con matices mudéjares, parecido al edificio de la fábrica. Característico es su pequeño porche mantenido por dos columnas. A su lado, un mosaico de azulejos sevillanos que datan del siglo XIX. Configuran la imagen de la Inmaculada Concepción como si de un pequeño altar se tratara.