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Qué ver en Barrio de Gràcia (Barcelona)

Dónde dormir en Gracia

Tradicional y moderno

El barrio de Gracia, al norte de la ciudad, une el encanto de la tradición con la modernidad más fresca. Sus callejuelas, llenas de bares, restaurantes y comercios, están llenas de una animada vida. Es uno de los mejores puntos de partida para el turismo de compras y quienes viajen a visitar las excelentes clínicas de Barcelona. ¿Te animas a descubrir que ver en Gracia?

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El viajero que desee conocer el estilo de vida burgués barcelonés y disponer de un ambiente agradable para unos cuantos días a unos costes más razonables, debe de considerar quedarse en algún hotel del Barrio de Gracia. Además, cuenta con el atractivo de estar cerca del importante Parque Güell, una de las principales obras de Antoni Gaudí.

Es también buena base para quienes acudan a la ciudad para ir de compras y los que viajen a causa de consultas médicas. En sus inmediaciones están las principales clínicas y hospitales privados de la ciudad. Para elegir donde parar, ofrecemos nuestra página especializada: Dormir y Comer en el Barrio de Gracia.

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¿Quieres conocer este sitio?

La historia de Gracia es rica en acontecimientos. Si te animas a conocerla te será más interesante todo lo que hay que ver en Gracia. Hasta comienzos del siglo XIX, las murallas medievales de Barcelona eran suficientemente grandes para acoger una ciudad que iba creciendo. Pero con el inicio de la industrialización, las nuevas fábricas y el crecimiento consecuente de la población se fueron quedando pequeñas, como en el caso del Raval.

Estas nuevas factorías y los barrios de trabajadores comenzaron entonces a construirse en los pueblos que rodeaban la ciudad. Entre ellos se encontraban Gràcia, Sants, Sant Martí y Sant Andreu, que se convirtieron rápidamente en villas industriales.

Gràcia fue una industriosa villa independiente de Barcelona entre 1856 y 1897, aunque se trate de un núcleo agrícola que surge en el siglo XVII en torno al convento de los Josepets. En 1850 tenía más de 13.000 habitantes y solo 27 años más tarde la industria provocó que llegara a los 33.000.

A raíz de este rápido crecimiento poblacional la conveniencia de la integración con Barcelona se empezó a plantear cada vez con más fuerza. En paralelo estaba el progresivo desarrollo de la trama del Plan Cerdà que urbanizó el barrio del Eixample y que se encontraba entonces en plena expansión. Así, a partir de 1880 nacieron proyectos de interés común como el del paseo de Gràcia. Unía la villa con la gran ciudad siguiendo el antiguo camino.

Que ver en Gracia
Fiestas Mayores de Gracia

Cuando finalmente se unió de nuevo a Barcelona, en 1897, fue necesaria la construcción de equipamientos y servicios, entre los que destacan el Mercado de la Libertad. A menudo la urbanización corría a cargo de los propios propietarios de los terrenos. Por lo tanto, son frecuentes los cambios de nombre y la discontinuidad física de algunas calles, así como las numerosas plazas, normalmente una en cada propiedad.

Durante mucho tiempo fue un barrio con una importante presencia gitana. De esta comunidad  surgieron diversos artistas, como “El Pescaílla”, fundador de la rumba catalana. Ahora está poblado de artistas y bohemios de todas las razas y colores que conviven con personas de edad avanzada. Una convivencia que contribuye a dar al barrio su aspecto más paradigmático.

Ahora corresponde leer el apartado Qué ver en Gracia.

El mayor atractivo cultural y turístico que ver en Gracia es el Parque Güell, que por su interés ha merecido página independiente junto a la Sagrada Familia. Tras visitarlo, podemos acercarnos a la plaça Lesseps, donde se alza la modernista Casa Ramos. Se compone de tres edificios proyectados por Jaume Torres en 1906 y se unen por una sola fachada de intenso color amarillento. Este inmueble, elegido por Pedro Almodóvar para rodar Todo sobre mi madre, conserva en el centro del patio un pequeño templete modernista.

Desde aquí podemos descender hacia el barrio de Gràcia por el carrer de Gran Gracia, prolongación del paseo de Gracia y auténtico escaparate del arte modernista. En el número 24 de la calle Carolines se encuentra la modernista Casa Vicens (1888). De gusto oriental y mudéjar, fue el primer encargo importante que recibió Gaudí, con 32 años.

Su colorida fachada, totalmente recubierta de cerámica y azulejos, adquiere un gran protagonismo en su combinación con el ladrillo rojo de la construcción. La reja de hierro colado representa motivos vegetales. Gaudí diseñó estas baldosas estampadas tomando como modelo las damasquinas que crecían en la misma finca. Introdujo así la costumbre de utilizar a la naturaleza como elemento de inspiración y modelo.

En la cercana Rambla del Prat, sobre la antigua finca de la Fontana, se instaló el Teatro Bosc. Hoy se ha reconvertido en salas de cine, cuya fachada cuenta con varias máscaras, esculpidas por Pablo Gargallo. Las máscaras representan a grandes genios de la cultura catalana. Por ejemplo, los pintores Pablo Picasso e Isidre Nonell, el doctor Jacinto Reventós y el propio escultor.

Gràcia Barcelona se caracteriza también por las numerosas plazas (hasta quince) que se abren entre las callejuelas del barrio, espacios de color, sol y sombra que se configuran como puntos de encuentro e intercambio.

Cruzando por la calle Gran de Gracia y girando a la derecha en Menéndez Pelayo, llegaremos hasta la Plaza del Sol, centro lúdico que ver en Gracia. Se encuentra lleno de vida y de numerosos cafés y terrazas. Aquí podemos descansar tomando algo mientras observamos el característico ambiente del barrio. Ocurre sobre todo si nuestro viaje coincide con las célebres fiestas de Gràcia, a mediados del mes de agosto, cuando los vecinos engalanan sus calles.

El nombre de la plaza procede de una escultura: el Astrolabi, un reloj solar con los doce signos del zodiaco diseñado por Joaquim Camps. La plaza se abrió en 1840 y fue refugio antiaéreo durante la Guerra Civil. En las zigzagueantes calles de los alrededores podemos también descubrir un sinfín de comercios, desde boutiques alternativas hasta librerías que ver en Gracia.

Dónde dormir en Gracia
Casa Fuster

Atravesando después la travessera de Gràcia se llega a la Plaza de la Vila de Gràcia (antigua Riús i Taulent que ver en gracia). Aquí se encuentra el Mercado de la Abaceria Central (1892). Lo construyó el industrial Puigmartí, propietario de la fábrica Puigmartí o Vapor Nou. Su estructura, de hierro y obra vista, se organiza en tres naves, con la central más ancha y destacada por la cubierta en forma de tejado ovalado.

El Mercat de la Llibertat es un elegante edificio modernista que ver en Gracia. Ocupa desde 1888 el espacio de la plaza de la Libertad. Consiste en una gran estructura de hierro y obra vista, con un interior de espacios diáfanos, amplios y altos. Las paradas de comida se organizan una junto a la otra distribuidas en la nave central y dos cuerpos laterales.

En la plaza de la Vila de Gracia vale también la pena detenerse a admirar la Torre del Reloj. En 1864 se construyó como parte del antiguo ayuntamiento (hoy sede del distrito que ver en Gracia).

Descendiendo por Gran Gracia llegaremos hasta la Casa Fuster (1911, destacable que ver en Gracia). Es el último edificio modernista que diseñó Domènech i Montaner en Barcelona. Se trata de la representación del modernismo más rico de Barcelona. De esta manera, une un aire neogótico con un modernismo de expresividad contenida.

Este inmueble posee una gran sencillez decorativa. Sin embargo, se elaboró a base de materiales muy costosos (como el mármol, el vidrio o la pizarra). Fue el regalo que el rico mallorquín Mariano Fuster quiso hacerle a su mujer Consol Fabra. Domènech Montaner dejó su huella en las características columnas rosadas de la base, las ventanas trilobuladas y la clásica decoración floral.

Compuso el edificio con una fantástica combinación de curvas y rectas. Dos fachadas planas se encuentran en la esquina con una torre cilíndrica ocupada por tribunas de vidrio y decorada con esculturas que recuerdan nidos de golondrinas. El ático es de estilo afrancesado. Su elegante entrada, ocupada durante mucho tiempo por el Café Vienés, culmina la perfección de este edificio. Desde el año 2004 la Casa Fuster aloja un hotel de lujo.

El Parc de la Creueta del Coll, presidido por un gran monolito de hierro, cuenta con mesas de ping-pong, zonas de juego y de picnic. También con una gran piscina pública de poca profundidad. En este parque que ver en Gracia se encuentra también el Elogio del agua, una escultura de hormigón, obra de Eduardo Chillida.

Si hay entradas, puede ser recomendable asistir a una función del Teatre Lliure (libre, en castellano). Se considera uno de los teatros españoles más prestigiosos. En Gràcia Barcelona también se encuentra el Cine Verdi, donde se exhiben películas artísticas en su lengua original.

Esto es lo principal que ver en Gracia.

Imprescindibles

Dónde dormir en El Eixample
Casa Vicens
Dónde dormir en Gracia
Parc de la Creueta del Coll

Datos prácticos

Coordenadas

41° 22′ 57″ N, 2° 10′ 37″ E

Distancias

Girona 105 km, Lérida 162 km, Tarragona 98 km, Madrid 621 km

Aparcamiento

Parking de pago en Paseo de Gracia con Aragó.

Altitud

9 m

Habitantes

1 620 943 (2012)

Carnaval (variable). Semana Santa. Fiesta de Sant Jordi (23 de abril, patrón de Cataluña). Pascua Granada (20 de mayo). San Juan (24 de junio). También las Fiestas de la Asunción (15 de agosto). Fiesta Nacional de Cataluña (11 de septiembre). Fiestas de la Mercè (24 de septiembre). El Pilar (12 de octubre). Finalmente, celebrar Santa Lucía (diciembre).

Sónar. Festival Internacional de Música Avanzada y New Media Art de Barcelona (principios de junio). Festival de El Grec (finales de junio).

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