Viajar en octubre por España permite desconectar y al mismo tiempo aprovechar las ventajas que ofrece el otoño, sobre todo en ese puente que se disfruta gracias al Día de la Hispanidad. El clima de esta estación se caracteriza por temperaturas suaves y agradables. En ausencia del sofocante verano y el inclemente invierno, puede uno disfrutar de una escapada inolvidable.
Dónde viajar por España en el puente de octubre
El encanto de la ría de Ribadeo
La desembocadura del río Eo permite descubrir lugares como isla Pancha, uno de los parajes más encantadores de Lugo. Un puente enlaza la pequeña isla con tierra firme, donde uno de los faros se ha reconvertido en un hotel. Desde la terraza de su restaurante puede disfrutarse de la inmensidad del Cantábrico mientras se degustan los platos típicos de la gastronomía gallega.
Esta zona ofrece edificios históricos, como el fuerte de San Damián, y espacios naturales de gran valor como la Playa de las Catedrales. Los paseos bajo los arcos excavados en los acantilados, con las agradables brisas de octubre, son idílicos.
Peñafiel, provincia del vino
Fiel vigía desde el siglo X, el castillo de Peñafiel se yergue sobre el pueblo con un aspecto imponente. Ubicado en tierra de vinos, los viñedos decoran los pies de la construcción mostrando la belleza y majestuosidad del paisaje vallisoletano. Como referente del enoturismo, el patio sur del castillo incluye el Museo Provincial del Vino.
Su excelente gastronomía viene unida a una cartelera rebosante de conciertos y eventos teatrales en octubre. El legado histórico de Peñafiel incluye interesantes parajes como el yacimiento de Pintia o el convento de San Pablo. Con la vendimia recién terminada, octubre es el mejor mes para sumergirse en el encanto de esta hermosa localidad.
Los colores otoñales del bosque del Betato
La explosión de colores que ofrece el bosque del Betato en octubre lo convierte en uno de los lugares más fascinantes de Huesca. Un rumor del río, la estampa de las montañas y la luz reflejada en las hojas crean un ambiente de ensueño dedicado a todos los amantes de la naturaleza. Entre sus actividades se encuentran las rutas a caballo, que aportan un toque diferente a la escapada rural.
Las leyendas locales relacionan este bosque de hayas con parajes mágicos propios de historias de brujas y criaturas de fantasía que harán volar la imaginación del viajero. Las rutas que transitan por este enclave permiten un recorrido sencillo apto para ir con niños. El pueblo de Piedrahita de Jaca se convierte en un encantador enclave de cuento con casas de piedra y pizarra donde se podrá degustar unas buenas migas a la pastora.
El bello pueblo medieval de Bocairent
Valencia es una tierra con un sinfín de actividades interesantes y puede presumir de tener uno de los pueblos más bonitos de la sierra de Mariola. Las maravillosas vistas desde Bocairent se convierten en una delicia para los visitantes y su ruta circular empedrada ofrece unas panorámicas espectaculares.
Sin embargo, el mayor atractivo de Bocairent radica en sus vistosas cuevas llamadas Covetes dels Moros. Estás cuevas excavadas en una pared de roca vertical crean un laberinto de túneles donde disfrutar de una excursión emocionante. Pensadas para los aventureros por los desniveles y los angostos pasillos, se trata de un recorrido solo recomendado para personas con espíritu guerrero.
El atractivo múltiple de Cuenca
Apostada en el interior de España, Cuenca resulta uno de esos lugares que goza de la combinación perfecta entre gastronomía, cultura y naturaleza. Un destino que en octubre ofrece todo su esplendor con la suavidad de las temperaturas del otoño. Las casas colgadas son un atractivo más que conocido, pero la calle de Alfonso VIII con sus casas de colores rivaliza en belleza con ellas.
La ciudad celebra su Festival Otoñal en octubre, ofreciendo espectáculos de teatro, música, danza y mucho más. El serpenteo del Júcar está colindado por sinuosos senderos de piedra donde deleitarse con el agua turquesa y la agradable brisa. Junto a estos atractivos, edificios históricos como la catedral de Cuenca se alzan sobre el trabajado diseño de la ciudad, ofreciendo a los turistas parajes naturales que completan la visita.
Las muchas joyas de Badajoz
Badajoz es uno de esos lugares que suelen pasar desapercibidos pero que poseen auténticas joyas. Así, esta ciudad puede presumir de tener la alcazaba más grande de Europa, una de las construcciones defensivas mejor conservadas de la arquitectura árabe. Con su recorrido de 6,5 kilómetros ofrece un paseo en el que disfrutar del paisaje pacense.
Rivalizando con el legado nazarí de sus vecinos andaluces, posee una de las plazas más hermosas y llamativas de este arte. Además, en octubre se celebra el Festival Internacional de Teatro de Badajoz, con extraordinarios espectáculos perfectos para quien busque el toque cultural.
El abismo de Málaga
Entre todos los encantos que puede ofrecer Málaga, el Caminito del Rey es uno de los parajes naturales más impresionantes. Siguiendo las paredes verticales del Desfiladero de los Gaitanes, los puentes describen una ruta de 3 km sobre un abismo de 700 metros de profundidad.
Además de la ruta, el viajero puede deleitarse con la belleza de las cuevas de Ardales y la iglesia rupestre de Bobastro. Durante el mes de octubre se celebran numerosas ferias y eventos que hacen de este destino una parada ideal para pasar el otoño entre historia y naturaleza.
Sol, gastronomía y cultura en Mallorca
La gran ventaja de viajar en octubre a Mallorca es que todo es mucho más asequible y permite disfrutar de todos los encantos de la isla por mucho menos. Ya se sabe que sus playas, con su atrayente tono turquesa y la arena blanca, nada tienen que envidiar a los destinos caribeños.
Hermosas construcciones de piedra como el castillo de Bellver o la catedral de Santa María amenizan los paseos por la ciudad. Reconocido como uno de los mejores lugares para vivir, por su clima, ocio y paisajes, no hay que marcharse sin probar las famosas ensaimadas.
