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Los pueblos más bonitos de León

Mollinaseca, León

España es un país con tantas identidades como paisajes y es normal que, a veces, sea difícil elegir un destino. Desde costas infinitas de agua cristalina en el sur a frondosos bosques verdes en el norte, el panorama nacional no deja a nadie indiferente. Y está también esa provincia en Castilla y León que es uno de los grandes líderes en cuanto a turismo rural: LeónLeón es uno de los lugares con los paisajes y los pueblos con más encanto de todo el país. Casitas de tejas enclavadas en el tiempo, lugares con historia y con leyendas y un entorno natural que deja sin palabras a todos sus visitantes. Un paseo por los pueblos más bonitos de León y los tesoros que los hacen únicos es de lo más estimulante.

León fascinante: sus pueblos más bonitos

Balboa

Balboa y sus pallozas
Balboa y sus pallozas. | Shutterstock

Situado en plena Sierra de los Ancares, Balboa es uno de los pueblos con la arquitectura más particular y curiosa de la provincia: las pallozas. Estas casas tradicionales están construidas con un estilo celta, el cual las dota de una planta circular, unas paredes bajas y un tejado en forma de cono de origen vegetal que parece sacado de un cuento de fantasía. Otro de los grandes atractivos turísticos de este encantador pueblo es su Iglesia de Santa María. Data de los siglos XIII y XVI y tiene un estilo renacentista que provoca un curioso choque cultural en comparación con las pallozas.

Astorga

El Palacio Episcopal de Astorga es una de las pocas obras en las que Gaudí trabajó fuera de Cataluña
El Palacio Episcopal de Astorga es una de las pocas obras en las que Gaudí trabajó fuera de Cataluña. | Shutterstock

Con una localización privilegiada y siendo lugar de paso obligado dentro de la peregrinación del Camino de Santiago, Astorga se ha convertido en un pueblo con un gran patrimonio histórico y uno de los lugares más visitados por todos los turistas rurales. Una de las joyas de este poderoso pueblo es su Catedral de Santa María, de estilo gótico, que se construyó entre los siglos XV y XVIII. Además, su Palacio Episcopal, diseñado por Antoni Gaudí, es una parada obligatoria dentro de la visita del pueblo.

Molinaseca

Molinaseca, León
Molinaseca. | Shutterstock

Molinaseca es un pueblo en el que perderse, por sus casitas de piedra y su ambiente medieval. Situado en la comarca del Bierzo, es otro de los lugares de paso para los peregrinos que se dirigen a Santiago. Uno de sus grandes atractivos es el puente romano que cruza el río Meruelo y que sirve como entrada del pueblo. Su interior ha sido declarado como Conjunto Histórico. Entre sus lugares más ilustres se encuentra la Iglesia de San Nicolás de Bari, de estilo neoclásico, situada en la parte más alta.

Peñalba de Santiago

Peñalba de Santiago
Peñalba de Santiago. | Shutterstock

Peñalba de Santiago no deja a nadie indiferente, ya que no solo es uno de los pueblos más bonitos de León, sino de toda España. Su localización, en pleno valle de Oza, tiene unas vistas inigualables. Su propia estructura y estética lo han convertido en un lugar declarado Conjunto Histórico-Artístico. Las casas de este encantador pueblo sorprenden a todos sus visitantes y los hacen trasladarse a otros escenarios. Casitas de piedra, terrazas de madera y tejados de tiza son el paisaje cotidiano de sus habitantes. Además, la Iglesia de Santiago construida allá en el siglo X deja a este lugar anclado en el tiempo y en la memoria de los turistas.

Castrillo de los Polvazares

Castrillo de los Polvazares, tremendamente visitado
Castrillo de los Polvazares. | Shutterstock

Originalmente, hace algunos siglos, Castrillo de Polvazares era un pueblo dedicado al trabajo de los transportistas de caballo. Este es precisamente uno de los atractivos que han quedado conservados en sus calles y en todos sus detalles. Este pueblo también ha sido catalogado como Conjunto Histórico-Artístico debido a su entramado de calles y casas de piedra que trasladan a otra época.

Santa Colomba de Somoza

Iglesia de Santa Colomba de Somoza
Iglesia de Santa Colomba de Somoza. | Shutterstock

Los pequeños pueblos de León tienen un factor en común entre ellos: su irregularidad en la arquitectura. Es precisamente este encantador desorden el que da ese aspecto pintoresco y de encanto a sus calles y sus casas. Un perfecto ejemplo de todo esto está en Santa Colomba de Somoza, situado en la comarca de la Maragatería, cuyas edificaciones, como la Iglesia Parroquial de la Asunción, y su tradición arriera, lo convierten en uno de los pueblos más bonitos de la región.

Sahagún

Iglesia de San Tirso, en Sahagún
Iglesia de San Tirso, en Sahagún. | Shutterstock

Sahagún es uno de los pueblos con más historia de León. Sus calles fueron testigos, a lo largo de los siglos, de todo tipo de culturas y de tradiciones. A día de hoy, es uno de los lugares de paso del Camino de Santiago que mejor recoge la mezcla de estilos de toda la provincia. Perderse en sus calles es como pasear por la época medieval y es una de las paradas obligatorias para los amantes de la historia. Entre sus edificios claves destaca la Iglesia de San Tiros, del siglo XII y estilo románico mudéjar, así como la Iglesia Parroquial de San Lorenzo, el Monasterio Real de San Benito y el Santuario de la Peregrina.

Villafranca del Bierzo

Villafranca del Bierzo, de gran importancia Camino de Santiago en su vertiente francesa
Villafranca del Bierzo. | Shutterstock

Este pueblo se encuentra en la comarca del Bierzo, en plena Sierra de Ancares, y se le conoce por ser “la pequeña Compostela” por la semejanza que tiene con algunos de los edificios más emblemáticos del lugar. Entre sus imprescindibles destaca la Colegiata de Santa María de Cluniaco, cuya perfecta mezcla de los estilos gótico, barroco y renacentista lo han convertido en una imponente edificación.

Lombillo de los Barrios

Iglesia de San Martín, Lombillo y Salas de los Barrios
Iglesia de San Martín, Lombillo y Salas de los Barrios. | Joanvato, Wikimedia

Lombillo de los Barrios está en la comarca del Bierzo y, a pesar de ser un pueblo que se puede ver con tan solo un paseo, debido a su pequeño tamaño, merece la pena pararse a conocerlo. En su interior hay verdaderas joyas arquitectónicas que lo declararon Conjunto Histótico-Artístico en 2014. Entre sus principales atractivos está la Iglesia de San Martín, la Ermita de Nuestra Señora de la Encarnación y el Mirador del Bierzo.

Balouta

Vista aérea de Balouta
Vista aérea de Balouta. | Shutterstock

Este pueblo ancestral está en pleno Valle de Ancares y, como se podía ver en Balboa, posee una de las estructuras más curiosas y características de la zona: las pallozas. Se trata de uno de los pueblos más rurales y tradicionales de la provincia, con un paraje envidiable y un ambiente ligado a lo natural. A día de hoy, sigue siendo un pueblo de ganaderos y agricultores con una gran tradición a sus espaldas.

Arbas del Puerto

Iglesia de Santa María, Arbas del Puerto
Iglesia de Santa María, Arbas del Puerto. | Shutterstock

Este pueblo es uno de los mayores idilios de León y es que, situado en una localización digna de una postal, en plena subida del Puerto de Pajares, Arbas del Puerto solo tiene 5 habitantes a día de hoy. Conserva la Colegiata de Santa María de Arbas, un imponente edificio en comparación con el tamaño del pueblo que, en otra época, sirvió de antiguo hospital, iglesia y convento.