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Qué ver en Las Médulas

Panorámica que ver en Las Médulas

De gigantesca mina a parque histórico-natural

Las Médulas son una espectacular mezcla de monumento natural y zona arqueológica. Constituyen en la práctica un parque temático sobre la capacidad de la minería romana. Un entramado industrial cuyas cuevas y orografía testimonian la explotación aurífera a la que fue sometida. Descubre la historia y todo lo que ver en Las Médulas.

Planifica tu escapada a Las Médulas

Tanto el extraordinario patrimonio natural como el legado de la minería romana son elementos que ver en Las Médulas. Por tal razón lo ideal es gastar todo un día, como mínimo, en la visita. La continuación natural de esta escapada es la población templaria de Ponferrada.  Otra alternativa cercana es Villafranca del Bierzo. Ambas sirven como base externa para asaltar este bello enclave. Fuera de El Bierzo se despliega la monumental León. Si se quiere seguir en plena naturaleza, el Parque de los Ancares leoneses es un lugar ideal.

Estos son algunos lugares donde dormir y comer en el entorno de Las Médulas. Asimismo, esta zona guarda muchos de los planes de turismo activo en la provincia de León.

¿Quieres conocer este sitio?

La importancia de la historia local hace necesario conocerla antes de saber lo que ver en Las Médulas. Por ejemplo, el origen del nombre tiene una doble atribución. Por un lado, está la asociada al Mons Medulio y por otro la que lo liga a diversos términos del habla del Bierzo como meda, medar y medeiro. A su vez, estos comparten familia con la palabra castellana “médano”, montón de arena, derivada del latín meta.

Entre el año 23 y 19 a. de C., el emperador Augusto estableció una nueva política monetaria basada en áureus, la moneda de oro. Esta valía 25 denarios o 200 sestercios. La decisión supuso el inicio del patrón-oro. La necesidad de este metal precioso les llevó a una búsqueda por los territorios imperiales. Así, lo hallaron en Dacia, entorno a Rumanía; en Aquitania, sudoeste francés y, sobre todo, en el noroeste de Hispania. Se trataba de la tierra que los astures ocupaban en las actuales provincias de Zamora, León y Asturias.

Los romanos habían llegado a la zona mucho antes, en el siglo III a. de C. Tras un largo y difícil proceso de conquista, se hicieron con el control de la zona noroeste de la Península Ibérica. De esta forma lograron controlar las poblaciones locales e iniciar la explotación de los yacimientos auríferos.

La labor de minería romana se inició hace unos dos mil años. Tras ello, los trabajos estuvieron en activo durante unos dos siglos. Se estima que en ese periodo removieron más de 94 millones de metros cúbicos de tierra, obteniendo unas cinco toneladas de oro, logro impresionante para la época. Gracias a ello se ejecutaron tesoros como el de Arrabalde, al norte de Zamora.

La explotación de las Médulas requirió la ejecución de una enorme obra de ingeniería. Destaca la construcción de canales para la aportación de agua, que con la presión suficiente horadaba la montaña. Tales conductos llegaron a alcanzar los 100 kilómetros de longitud. El mantenimiento de estos sistemas de canalización requirió la creación de nuevos asentamientos. Además se debió de afrontar el primer gran trasvase de agua entre cuencas hidrográficas, desde el río Duero hasta el Sil.

La vida en la minería romana era de gran dureza. Junto a la mina o en su interior se albergaba la mano de obra no cualificada. Esta fuerza de trabajo se empleaba también en los establecimientos metalúrgicos y en las fundiciones donde se elaboraban las herramientas. En cambio, en la zona de Las Pedreiras, junto al Lago de Carucedo, se estableció una población que se considera como altamente romanizada. Se cree que era la mano de obra cualificada que daba soporte a las tareas mineras.

Vista desde el interior de una antigua mina de Las Médulas
Vista desde el interior de una antigua mina de Las Médulas

En las proximidades está el Castro de Borrenes, con su sólida muralla. Tal edificio ilustra la existencia de un contacto entre las comunidades indígenas y los nuevos ocupantes. Con todo, a principios del siglo III la moneda perdió su valor fiduciario. Dicho hecho supuso que las minas dejaron de interesar al Imperio Romano.

El abandono de la explotación de la mina y una falta de memoria histórica provocaron el surgimiento de toda una serie leyendas explicativas del lugar. Buen ejemplo es el relato de Roldán y Fierabrás o La Ondina Caricea, normalmente asociadas a un lago. En la actualidad, el escritor berciano Enrique Gil y Carrasco ha desarrollado parte de la trama de su novela El Señor de Bembibre en el lago próximo de Carucedo.

Las gentes del noroeste zona siguieron buscando oro en los ríos hasta el siglo XX. Sin embargo, la proliferación de embalses en las cuencas fluviales acabó dañando la búsqueda precipitando las pepitas al fondo de los pantanos.

A continuación, lo mejor que ver en Las Médulas.

El repaso por lo más destacado que ver en Las Médulas comienza por el Lago Carucedo. A pocos kilómetros al sudoeste de Ponferrada, es un lago artificial. Se formó como resultado de la acumulación de materiales y agua de las explotaciones auríferas romanas llevadas a cabo unos kilómetros más al sur. Por medio de galerías excavadas en las montañas los romanos conducían violentamente el agua por el interior para provocar derrumbamientos. Luego, con un sistema de lavado de arcillas se separaba el polvo del oro.

El sistema provocó lo que se llama ruina montium. Tan impresionante paisaje se compone de relieves rojizos punteados de vegetación. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997. En torno a la mina se ha organizado un parque arqueológico con una superficie de 12.000 hectáreas. Esta comprende los yacimientos de minería romana y los distintos asentamientos a su alrededor.

Para visitar este paisaje conviene acceder primero a Orellán y su mirador. A este lugar que ver en Las Médulas se llega desde el aparcamiento, tras 700 metros de caminata. Arriba puede visitarse una de las galerías excavadas en la roca y observar restos de los canales empleados para desplazar el agua desde los Montes Aquilianos y La Cabrera, a espaldas del mirador.

En el turístico pueblo de Las Médulas, pedanía del municipo leonés de Carucedo, se puede visitar el Aula Arqueológica. El espacio contiene paneles y audiovisuales que detallan los pormenores de la explotación.

Vista de las Médulas desde el Lago Carucedo
Vista de las Médulas desde el Lago Carucedo

El Centro de Visitantes es el punto de partida de varias visitas guiadas al corazón de las cuevas. Estos sistemas son lo principal que ver en Las Médulas. El itinerario más corto conduce a La Cuevona y La Encantada. Sus sendero permite maravillarse ante la silueta rojiza de la montaña emergiendo del bosque. El Centro de Interpretación de los Canales de la Mina, en el cercano pueblo de Puente de Domingo Flores, es un buen colofón a la visita.

Como complemento a las rutas que ofrece el parque, existe la posibilidad de acceder a la zona de El Bierzo por la ruta de Los Ancares o el nacimiento del río Boeza. Cercano a Las Médulas está el Castillo de Cornatel. De estilo románico, actualmente se encuentra en ruinas y fue templario. Desde esta fortaleza se pueden divisar trazas medievales en el pueblo Villavieja. También, a pocos kilómetros, es posible visitar el Monasterio de Carracedo. No hay que olvidar pasar por Castro Ventosa, un importante castro berciano o el Museo de la Pizarra de San Pedro de Trones.

Con esto se acaba el recorrido por lo mejor que ver en Las Médulas.

Imprescindibles

La Cuevona en Las Médulas
La Cuevona en Las Médulas
Pozo de las Médulas
Uno de los pozos de las Médulas

Datos prácticos

Coordenadas

42º 16’ 51’’N, 6º 27’ 41’’W

Distancias

Madrid 417 km.

Aparcamiento

Sin dificultad.

Altitud

986 m (parque) y 720 m (parte baja).

Habitantes

101 (2012).

La gran fiesta que ver en Las Médulas es El Carril Santiago (25 de julio, Carucedo).