Os proponemos una ruta en coche por los puertos de Bizkaia, una fantástica forma de recorrer la costa de la provincia en poco tiempo y de forma económica, sobre todo si el
coche va lleno. Así que busca cuatro amigos y disfrutad de las playas, de la gastronomía y de las carreteras a pie de mar.
Comenzamos la ruta en Portugalete y finalizamos en Ondarroa que limita con la vecina Gipuzkoa. Sin paradas el recorrido estimado es de 3 horas y media, pero la clave de esta ruta en coche por los puertos de Bizkaia es ir descubriendo lo que cada uno ofrece. Nosotros pasamos la primera noche en Portugalete, a tan solo 20 minutos de Bilbao por la A-8. Suele ser una opción más económica para pernoctar que la ciudad del Guggenheim y su cercanía nos permitió pasar un día completo en ella antes de partir hacia el próximo destino. Pero si os enamoráis de Bilbao aquí os dejamos unas recomendaciones para pasar la noche. Lo importante es que os organicéis como mejor os convenga y dejaros llevar, no hay prisa por terminar la ruta. ¡Arrancamos!
1ª parada: Portugalete
Elegir Portugalete como primera parada en la ruta en coche por los puertos de Bizkaia nos permitió recorrer el Abra y visitar el propio Bilbao. Portugalete es una villa medieval situada en la desembocadura del Nervión. Su máximo esplendor lo alcanzó en la edad contemporánea, cuando las familias de la nobleza vasca se instalaron allí. Aún pueden verse las lujosas casas del siglo XIX. Portugalete es famosa por su Puente Colgante, un puente transbordador que fue el primero de su estilo construido en todo el mundo. La visita puede ocupar medio día lo cual es perfecto para dejar el coche, pasear, cenar, dormir y al día siguiente partir a Bilbao.
2ª parada: Bilbao
20 minutos en coche por la autopista A-8 y esteréis en Bilbao. Esta cosmopolita villa es conocida también entre sus habitantes como el botxo (el agujero) por estar situada en el valle que forman los ríos Nervión e Ibaizábal y rodeada de montañas. ¿Por dónde empezar? Bilbao se puede dividir entre la margen izquierda del río Nervión, la zona más vanguardista, y la margen derecha donde se encuentra el casco viejo. Si conseguís salir de sus bares donde se come de miedo, en un día os dará tiempo a recorrer lo principal de la ciudad. Y si no, siempre os podéis quedar un día más. ¿Dónde? Aquí.
3ª parada: Getxo-Guecho
A solo 15,5 km de Bilbao por la BI-637 se encuentra Getxo. Se localiza en la margen derecha de la ría del Nervión que fue residencia de gran parte de la burguesía industrial bilbaina desde principios del siglo XX. Es —desde hace un siglo— uno de los lugares con mayor calidad de vida de España y un extraordinario lugar de veraneo. Aquí nuestras recomendaciones: dónde comer y dónde dormir.
4ª parada: Plentzia – Plencia
Después de recorrer Guetxo, nos acercamos a Plencia a 18 minutos por la BI-2122 (13 km). El pequeño puerto de Plentzia se distinguió ya en la Edad Media por ser uno de los principales de Bizkaia. Con el tiempo, la mar cegó con arena su ría imposibilitando su desarrollo, pero le legó una maravillosa playa que la transformó en un acogedor centro de veraneo. En sus alrededores hay una amplísima oferta de actividades de turismo activo. Para pasar la noche hay un camping en la playa muy recomendable, pero aquí os damos más opciones.
5ª parada: Bermeo
Para llegar a Bermeo desde Plencia hay que tomar la carretera BI-631. Es el recorrido más largo de los propuestos anteriormente, 29 km, pero en poco menos de 40 minutos estaréis. Bermeo es una histórica villa pesquera, su puerto todavía se encuentra entre los principales del Cantábrico. De camino a Bermeo y si se tiene tiempo, recomendamos visitar San Juan de Gaztelugatxe, ya famoso por ser Rocadragón en Juego de Tronos.
6ª parada: Mundaka – Mundaca
La siguiente parada en la ruta en coche por los puertos de Bizkaia es Mundaka. Se encuentra muy próxima a Bermeo, a tan solo 8 minutos. Mundaka también es una villa pesquera que se halla en la Reserva Natural de Urdaibai, por lo que sus alrededores son espectaculares. Además, desde finales del siglo XX se ha convertido en todo un referente en el mundo del surf.
7ª parada: Elantxobe – Elanchove
Llegamos tras media hora de trayecto y 24 km en las ruedas a Elantxobe, el pueblo que cuelga del acantilado. Es un municipio singular construido al abrigo del cabo Ogoño y de los dos acantilados que lo custodian. Las calles del pueblo se distribuyen como un anfiteatro por la ladera hasta llegar al pequeño puerto pesquero que descansa a sus pies. Se trata de una rareza urbanística y un lugar inolvidable en cuyas cuestas ejercitar las piernas. Si tenéis la oportunidad antes de llegar a Elantxobe la carretera BI-2238 conduce al Bosque de Oma, un lugar muy especial donde los árboles han sido pintados de colores. La naturaleza convertida en lienzo.
8ª parada: Ea
Tomamos la BI-3238 durante 7 km hacia Ea, uno de los pueblos más originales y especiales del Cantábrico. La visita a Ea consiste en un paseo desde el aparcamiento de la carretera por cualquiera de las dos calles que flanquean en paralelo el río que da nombre al pueblo, hasta llegar al minúsculo puerto y su playita —solo visible en marea baja—; la vuelta debería de ser por la otra calle (y así se ha visto prácticamente todo el pueblo).
9ª parada: Lekeitio- Lequeitio
La siguiente parada en la ruta en coche por los puertos de Bizkaia es Lekeitio, a 10 km. Las dos bellas playas, la isla de San Nicolás (solo accesible a pie en la marea baja) y el puerto de Lekeitio, así como su casco histórico, pueden recorrerse en una jornada. Todavía conserva viva su tradición marinera y unas populares y polémicas fiestas patronales.
10ª parada: Ondarroa
¡Última parada! Recorremos los últimos kilómetros, 22 para ser exactos, por una tortuosa carretera (BI-2405) que nos lleva 40 minutos. A Ondarroa hemos venido a pasear y a degustar el pescado fresco del Cantábrico ya que se trata de uno de los principales puertos de descarga del País Vasco. Además, tiene un bello y típico casco antiguo. Hay que ver su puerto, el cauce del río Artibai, los puentes que lo cruzan y los edificios históricos. Si el día en Ondarroa se os hace corto, a corta distancia está la excelente playa de Saturrarán.
¡Nos vemos en la carretera!
Texto: Paloma Díaz Espiñeira
