El mejor momento para visitar Balmaseda es probablemente en Semana Santa, cuando se realiza la representación de la Pasión más extraordinaria del País Vasco. La fiesta, que involucra a toda la población, comienza el Jueves Santo a partir de las 9 de la noche y continúa a lo largo del Viernes. Integra los distintos momentos hasta la escenificación del Santo Entierro.
La villa está condicionada por el curso del río Cadagua, que separa la zona residencial de la industrial. Su casco histórico conserva aún el trazado medieval, con cuatro calles paralelas. En sus extremos se sitúan la plaza de San Severino (al norte) -que es el corazón de la ciudad- y la de los Fueros (al sur).
En la primera se encuentra la Iglesia parroquial de San Severino. Se trata de un templo gótico del siglo XV adherido a la muralla que ver en Balmaseda. Cuenta también con elementos barrocos, como la espadaña de la portada principal y la torre; fue reformado en el siglo XIX. En su interior destaca el retablo de la capilla del Santo Cristo de la Misericordia (1535).
En la plaza de San Severino se ubica el principal edificio que ver en Balmaseda: el Ayuntamiento. Se conoce popularmente como ‘la mezquita de Vizcaya’, por sus amplios y señoriales soportales. De estilo barroco, fue levantado en 1743 y reformado en el siglo XIX. Importante que ver en Balmaseda.
En la calle de Martín Mendía se encuentra la Iglesia gótico-renacentista de San Juan Bautista (siglo XV). Su torre del siglo XVIII tiene un reloj que toca el himno de la villa todos los días a las 12, las 18 y las 20 horas. Actualmente está cerrada al culto, pues en su interior se aloja el Museo de Historia de Balmaseda.
En la misma vía encontramos también el Palacio renacentista de los Marques de Buniel. Desde ella podemos ver la construcción que siempre se debe ver en Balmaseda: el Puente Viejo o Románico. Este comunica el casco histórico con el barrio de Cristo. Desde su construcción en el siglo XII, fue el único punto en los alrededores para cruzar el río Cadagua. Realizado con piedra de sillería, está compuesto de tres arcos y un torreón defensivo en su parte central. En él se estableció el lugar del pago del pontazgo y los derechos del ‘puerto seco’.
En la avenida de las Encartaciones se sitúa un edificio que hay que ver en Balmaseda y donde es recomendable dormir: el Monasterio de Santa Clara (s. XVII) rehabilitado en 1993 como hotel. En su iglesia se ha ubicado la sede el Centro de Interpretación de la Pasión Viviente de Balmaseda, que alberga una exposición permanente de vestimentas, pasos, objetos e imágenes relacionados con esta representación popular de la Semana Santa.
Como muestra de la arquitectura civil, hay que ver en Balmaseda los palacios de Horcasitas (antigua aduana de la ciudad) y de la Familia Urrutia, ambos del siglo XVII.
Los aficionados a la moda deberían visitar el Museo de Boinas de La Encartada. Se encuentra instalado en una antigua fábrica de boinas, en el barrio de Peñueco. El conjunto de la factoría, fundada en 1892 por Marcos Arena, es en la actualidad un área de patrimonio industrial protegida con la categoría de Conjunto Monumental Calificado.
En conclusión, hay bastantes asuntos interesantes que ver en Balmaseda, si propones algún otro no dejes de escribirnos.