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9 tesoros del románico en Navarra

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Al igual que ocurrió en buena parte de la Europa medieval, el arte románico se extendió por tierras españolas entre el siglo XI y los primeros años del siglo XIII. Considerado como la primera gran corriente artística europea, este tipo de arte reflejaba a la perfección las características principales de una nueva sociedad feudal profundamente religiosa. Su rápida extensión e implantación en los principales reinos se debió principalmente a la expansión de diferentes órdenes religiosas y a la importancia de determinadas peregrinaciones como el Camino de Santiago.

Este sería un factor fundamental para entender la fuerte implantación del arte románico en diferentes regiones del norte de España. Siendo uno de los más importantes puntos de paso de la vía jacobea, Navarra pronto se consolidó como un gran centro para el desarrollo de este tipo de arte en la Península Ibérica. Desde el Pirineo hasta las tierras bajas de la ribera del Ebro, son más de 50 los bienes protegidos que en la actualidad conforman el catálogo de arte románico en Navarra. De entre todos ellos, seleccionamos estos nueve.

Santa María de Eunate

Románico en Navarra
Santa María de Eunate

Esta ermita se encuentra ubicada en campo abierto, a tan solo dos kilómetros de la localidad de Muruzábal y junto al lugar donde el Camino de Santiago aragonés se une al francés. Se trata de un edificio de gran belleza y singularidad que destaca tanto por su planta centralizada y octogonal, de proporciones irregulares, como por su claustro exterior, que rodea los muros de la ermita con 33 arcos de capiteles tallados. La construcción y primera historia de Santa María de Eunate está fuertemente vinculada a la Orden del Temple. Sin duda, uno de los tesoros del románico en Navarra que merece la pena visitar.

Puente románico de Puente la Reina

Románico en Navarra
Puente románico de Puente la Reina

La construcción de este famoso elemento de arquitectura civil románica tuvo lugar por instancia de una reina navarra que, en pleno siglo XI. Quiso facilitar el camino de los peregrinos sobre las aguas del río Arga a su paso por Puente la Reina, localidad que acabó recibiendo el nombre de dicho paso. Se trata de un puente sobrio y elegante sustentado por siete arcos de medio punto de diferentes tamaños que, en su día, tuvo hasta tres capillas alojadas en su recorrido. Una de estas capillas fue durante años testigo de la leyenda del txori, una de las historias populares más famosas de la localidad.

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Monasterio de Leyre

Románico en Navarra
Monasterio de Leyre

Los primeros datos documentales de este monasterio, datados a mediados del siglo IX, ya reflejan la importancia que el lugar tuvo durante la breve existencia del reino de PamplonaNájera. Posteriormente pasaría a ser un lugar de igual relevancia bajo la batuta del reino de Navarra. No en vano, aquí descansan los restos de los primeros monarcas del Reyno. Su ubicación en lo alto de una escarpada ladera junto a Yesa y la frontera con Aragón ya merece una visita.

Pero es la riqueza de su arquitectura y su amplio papel histórico lo que hace que cada año miles de visitantes lleguen hasta sus puertas. Aunque su figura actual sea fruto de sucesivas remodelaciones a lo largo de los siglos, sus piezas originales destacan por un envidiable estado de conservación para el románico en Navarra. En la actualidad, el monasterio contiene una hospedería y aloja a una pequeña comunidad de monjes benedictinos.

Santa María la Real (Sangüesa)

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Santa María la Real

Esta iglesia, declarada como Monumento Nacional en 1889, está considerada como una de las obras cumbres del románico español gracias, en gran medida, a la belleza de su portada principal. Constituye un grandioso conjunto escultórico de piedra dividido en dos cuerpos diferenciados donde se representan escenas pertenecientes al Juicio Final.

Con un claro estilo de transición entre el románico y el gótico, Santa María la Real es una iglesia ordenada en tres naves en cuyo interior podemos admirar varios atractivos. Destaca una bella cabecera románica de tres ábsides y su retablo mayor, de estilo plateresco. Sin duda uno de los mayores atractivos patrimoniales del románico en Navarra, así como de la localidad de Sangüesa.

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San Miguel de Aralar

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San Miguel de Aralar

También conocido como San Miguel in Excelsis, este santuario se encuentra ubicado en plena naturaleza, ocupando un espacio natural privilegiado junto a la cima del monte Artxueta, en plena sierra de Aralar. Aunque la primera referencia de este edificio date de 1032, es posible que su construcción se asiente sobre un templo prerrománico anterior.

A grandes rasgos, se trata de un edificio que destaca por la sobriedad y austeridad de sus líneas, características que solo consiguen acentuar su belleza al integrarlo completamente en el paisaje que lo rodea. Desde los primeros años de su existencia, San Miguel de Aralar se distinguió como un importante centro espiritual navarro, así como un interesante lugar de leyendas e historias. De su interior destaca el llamado Retablo de Aralar, una de las obras cumbres del románico en Navarra.

Cerco de Artajona

Románico en Navarra
Cerco de Artajona.

La de Artajona es sin lugar a dudas una de las estructuras fortificadas medievales más importantes y conocidas de toda Navarra. Se trata de un enorme conjunto amurallado erigido en el siglo XI que adapta su recorrido a la orografía propia del terreno elevado sobre el que se asienta. En el momento de su construcción, el cerco de Artajona contaba con un total de 14 torreones almenados de los cuales quedan hoy en día, en pie, un total de nueve.

También se conservan en perfecto estado dos puertas de entrada: la de San Miguel y la de Remahua. Este importante conjunto defensivo fue restaurado entre los años 2003 y 2009, siendo uno de los tesoros del románico en Navarra mejor conservados.

Monasterio de Fitero

Románico en Navarra
Monasterio de Fitero

El monasterio de Santa María la Real de Fitero, también conocido como Santa María de Niencebas, tiene el honor de ser el primer centro monástico perteneciente a la orden del Císter en España. Fundado por San Raimundo de Fitero a mediados del siglo XII, este monumento se encuadra dentro del periodo de transición entre el románico y el gótico.

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Se puede observar en él rasgos de varias etapas constructivas posteriores. Su ubicación en el centro de la población se debe a que, dada la importancia que obtuvo durante sus primeros años de actividad, la localidad fue construyéndose progresivamente en torno a él, quedando así perfectamente integrado en la moderna trama urbana.

San Martín de Unx

Iglesia de San Martín de Tours en Unx
Iglesia de San Martín de Tours en Unx. | Wikimedia

Situado en la parte más elevada de la localidad de San Martín de Unx, esta importante iglesia del Románico en Navarra fue erigida durante el siglo XII, en pleno periodo de transición hacia el arte gótico. De su exterior destaca su alta cabecera, resultado de una solución constructiva destinada a salvar el desnivel del terreno sobreponiéndose a la cripta.

Pese a los añadidos posteriores, aquí es posible observar interesantes elementos románicos como su portada norte o el interior de su cripta. Del resto del edificio destacan algunas secciones entre las que hay que mencionar un moderno porche que ofrece interesantes vistas al conjunto de la localidad y su entorno.

San Pedro de la Rúa (Estella)

Románico en Navarra
San Pedro de la Rúa (Estella)

Dominando un pequeño alto junto a la localidad de Estella, la iglesia de San Pedro de la Rúa nace en pleno siglo XII al amparo del Camino de Santiago, ocupando el lugar de una primitiva fortaleza. De atractiva planta irregular, este edificio cuenta con un claustro considerado como uno de los principales tesoros del románico navarro.

Pese a que solamente se conserven en pie dos de sus cuatro galerías, la belleza de este claustro es especialmente notable en sus columnas y capiteles, decorados con motivos iconográficos relativos a la ruta jacobea. Como anécdota, cabe señalar que esta iglesia fue también utilizada como cementerio de peregrinos durante buena parte de la Edad Media.

Hasta aquí llega nuestra selección de los nueve tesoros del románico en Navarra. ¿Qué te ha parecido? ¿Echas en falta alguno?