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Qué ver en Ochagavía-Otsagabia

Panorámica que ver en Ochagavía

Puerta a la Selva de Irati

El pueblo se encuentra en medio del valle de Salazar, rodeado de un privilegiado entorno pirenaico en el que destaca la Selva de Irati. No te pierdas la historia y lo mejor que ver en Ochagavía.

Planifica tu escapada a Ochagavía

Lo más notable que primero que ver en Ochagavía es su Centro de Interpretación de la Naturaleza. En poco tiempo permite obtener una excelente perspectiva de las opciones que ofrece el valle de Salazar y el cercano hayedo de La Selva de Irati.

Para seguir la escapada hay muchas y buenas opciones. Por ejemplo, la salida más habitual del Camino de Santiago, Roncesvalles. Otra alternativa queda al este, en Isaba y el Valle del Roncal. Por otro lado, Pamplona siempre resulta de interés. Para conocer la cocina del valle de Salazar y sus hoteles tienes las páginas sobre dormir y comer en Ochagavía.

Las primeras referencias escritas a la localidad datan del siglo XI, cuando es nombrada como Osxagauia y Oxssagauia. Con todo, no será hasta 1284 cuando aparecerá el nombre de Oxagavía.

En el siglo XIV, el valle de Salazar se dividió en tres quiñones. Ochagavía fue la capital de uno de ellos. Su pujanza se tradujo en una mayor representación en las Juntas Generales del valle. En 1699, las tres demarcaciones obtuvieron autonomía jurisdiccional.

Vista antigua de Ochagavía
Vista antigua de Ochagavía.

En 1794, las tropas francesas de La Convención atravesaron el río Bidaosa. Se internaron en el País Vasco y el oeste de Navarra. Debido a ello el pueblo fue arrasado por los galos, que derribaron un total de 182 casas y 52 bordas. Cual broma de mal gusto, hay quienes luego asociaron el origen del nombre del lugar a este suceso. La palabra Ochagavía derivaría así deocho había”, que sería el número de casas que quedaron en pie tras el paso de los franceses. Sin embargo, es una tesis desestimada por la historiografía.

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A mediados del siglo XIX el pueblo ya se encontraba completamente reconstruido. En esta ocasión se sustituyeron las tradicionales techumbres de madera por otras que incluían barro. Hoy Ochagavía es uno de los principales enclaves del Pirineo navarro.

A continuación, lo mejor que ver en Ochagavía.

Este conjunto navarro resulta muy pintoresco. En su casco urbano confluyen los ríos Salazar y Anduña, mientras que sus calles poseen notables casas y palacios de gran belleza. Los edificios se adaptan a la arquitectura propia de la zona. Se trata de grandes edificios enlucidos con piedras de sillería en partes de sus fachadas. Los tejados son muy inclinados, generalmente en dos o cuatro aguas, cubiertos por teja lisa rojiza.

Ejemplos de esta arquitectura civil son los palacios UrrutiaIriarte y Donamaria. Conservan en sus fachadas blasones de linajes familiares o escudos con la imagen del lobo. El animal representa al valle del Salazar al completo. Las edificaciones están separadas por un estrecho callejón llamado etxekarte. Este tiene la función de crear corrientes de aire, lo que combate la humedad.

La Iglesia de San Juan Evangelista comenzó a edificarse en el siglo XI. Más tarde fue reformada y ampliada en varias ocasiones. De ella destaca el Retablo Mayor del ábside, con una gran cantidad de tallas policromadas. También resulta interesante la sillería del coro, cuyos reposabrazos cuentan con pequeñas figuras desnudas. Por todo lo anterior es uno de los monumentos más importantes que ver en Ochagavía.

Vista de la iglesia entre las calles de Ochagavía
Vista de la iglesia entre las calles de Ochagavía.

El Santuario de Nuestra Señora de Muskilda es otro de los lugares que hay que ver en Ochagavía. Es una ermita románica del siglo XII, remodelada a mitades del siglo XVII. Llama su atención el tejado cónico de su torre.

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Según una leyenda, en el siglo XII un pastor encontró una imagen de la Virgen de Muskilda. Sin embargo, fue incapaz de trasladarla hasta el pueblo. Así, decidió construir una ermita para albergarla. El edificio, que sobrevivió a la devastación francesa de 1794, se complementa con la casa del ermitaño y la del capellán.

Uno de los grandes atractivos que ver en Ochagavía es la Selva de Irati. Se trata de uno de los bosques de haya y abeto más extensos y mejor conservados de Europa. Es un entorno fascinante en otoño, cuando las hojas dibujan un tapiz de colores ocre. Por entonces, los sonidos de la berrea de los ciervos se extienden por sus bosques. Puede recorrerse siguiendo una amplia red de caminos senderistas.

La gran calidad de la madera de la Selva de Irati hizo que fuese utilizada para la construcción de navíos para la Armada Real. Esto provocó su deforestación durante el siglo XVIII. Actualmente, los bosques posee protección frente a la explotación maderera. Por último, la riqueza de su entorno se explica en el Centro de Interpretación de la Naturaleza (CIN).

Una vez disfrutado lo que ver en Ochagavía, descubre otros estupendos planes por la Comunidad Foral de Navarra, así como su turismo activo.

Imprescindibles

Iglesia de San Juan Evangelista en Ochagavía
Iglesia de San Juan Evangelista en Ochagavía.
Selva de Irati, cerca de Ochagavía
Selva de Irati, cerca de Ochagavía.

Datos prácticos

Coordenadas

42° 54′ 24″ N, 1° 5′ 21″ W

Distancias

Pamplona 85 km, Huesca 150 km, Madrid 476 km.

Aparcamiento

Sin problemas en el pueblo.

Altitud

758 m.

Habitantes

604 (2013).

He aquí otras ocasiones notables que ver en Ochagavía: Procesión de la Virgen de la Muskilda (8 de septiembre), Orhipean (a finales de agosto, comienzos de septiembre).

Talla de madera de Jone Villanueva y Josu de Andres en Villanueva de Andrés.

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