A continuación, encontrarás todo lo que hay que ver en Arucas. Al entrar en el casco urbano de Arucas es inevitable, dada su monumentalidad, no dirigir la mirada a la imponente Iglesia de San Juan Bautista. Allí comenzamos nuestra visita a lo que ver en Arucas.
Es un costoso proyecto trazado por Manuel Vega y March que se inspira claramente en los templos del tardogótico europeo. Se consagró en 1917, si bien no acabó de rematarse definitivamente hasta 1977. Sus fachadas están talladas con piedra local. Destacan las pinturas de Cristóbal Hernández de Quintana y sus vidrieras contribuyen a mantener la estética de las viejas catedrales góticas. Es sobresaliente el Cristo (finales del S. XVII) instalado en la capilla mayor.
Pendiendo sobre la nave central llama la atención una lámpara de bronce de enormes dimensiones, adquirida en 1922. Son importantes los retablos de San Francisco de Asís y las imágenes barrocas de San Blas y la Virgen del Rosario, todas ellas del siglo XVIII.
También es digno de mención el San Juanito (s. XVIII) de reducidas proporciones que se sitúa sobre la pila de la capilla bautismal. Por último, sorprende por su calidad el Cristo de la Buena Muerte, que es obra del escultor local Manuel Ramos.
Junto a ésta, la Plaza de San Juan ofrece un buen conjunto de viviendas notables que ver en Arucas como la de Barbosa (s. XVIII) o la de Rafael Ponce de Armas (s. XIX), aparte de la Casa del Cura (s. XVII).
Las Casas Consistoriales que ver en Arucas se pusieron en funcionamiento a partir de 1875. El resultado es un magnífico inmueble que cuenta con un frente urbano dotado de arcos de medio punto y ornamentado con motivos vegetales. Lo más destacado sin duda es el patio central que distribuye el resto de las dependencias. En la calle León y Castillo está situada la Casa de la Cultura, en un viejo inmueble del siglo XVII en el que lo más singular es su patio.
El hermoso Mercado Municipal (1882) es uno de los más significativos que ver en Arucas y su estética responde a los habituales rasgos del eclecticismo decimonónico. También tiene interés el Teatro Nuevo, inaugurado en 1906.
El Museo Municipal tiene su sede en la Casa del Mayorazgo o de Gourié (s. XIX) y exhibe obras de artistas locales.
Ramón Madam y María del Rosario González, quienes ostentaran por primera vez el marquesado de Arucas, promovieron la construcción de la llamada Casa y Jardín de la Marquesa, imponente finca situada a un kilómetro del casco urbano. El conjunto conserva su aspecto romántico. El palacete fue levantado hacia 1880. Lo más singular es el jardín (inglés y francés) de más de 7.000 metros cuadrados, con un sinfín de variedades vegetales, predominando las palmeras.
Cerca, en la calle Gourié, se halla el inmueble que aloja la sede de la Heredad de Aguas de Arucas y Firgas, cuya existencia facilitó la prosperidad de la localidad. El edificio, de 1909, está dotado de una torre del reloj.
Otra de las visitas de interés que ver en Arucas nos lleva a las viejas instalaciones de la Fábrica del Ron Arehucas (1884). Aquí se explica el procesado del producto y la historia de la propia empresa, proveedora desde 1892 de la Casa Real. Han sido tantas las personalidades que visitaron la fábrica que incluso hay habilitada una “Bodega de Celebridades”.
Como en Arucas tiene gran protagonismo la piedra, se puede visitar una vieja cantera que recuerda que la tradición de estos trabajos desde al menos al siglo XVI y se asocia a su popular “piedra azul”. El testimonio más representativo de su importancia es la Iglesia parroquial, donde queda manifiesta la labor de los “labrantes”.
No se debe perder la oportunidad de ascender hasta el antiguo volcán de la Montaña de Arucas, con vistas panorámicas. Sin duda lo más destacable para ver en Arucas.
En el término municipal de Arucas existen varias playas de gran belleza, como las de San Andrés y Bañaderos.
Finalmente, esto es lo principal que ver en Arucas.