El plan urbanístico de 1840 acabó con las murallas, la fortaleza y la estructura de la población medieval. Después de eso, se dio paso a una cómoda y agradable población mediterránea donde se disfruta de una gastronomía excelente. La cocina se basa en sus célebres alcachofas, el pescado de su puerto, sus buenas playas y sus conocidas fiestas.
La visita a lo que ver en Benicarló la comenzamos frente al principal edificio de la localidad, la importante Iglesia Parroquial de San Bartolomé (1724-1743). Cuenta con una bella torre campanario de forma octogonal y una elegante fachada, de piedra labrada y estilo barroco. Llama la atención el cuerpo superior de la fachada, con la hornacina en la que está la escultura de San Bartolomé, flanqueada por columnas salomónicas.
Su interior está organizado en una única nave, con capillas entre los contrafuertes exteriores; sobre el crucero del final hay una gran cúpula. Lo más interesante es el retablo de la Virgen del Remedio, posiblemente procedente del templo anterior. Entre la obras de arte conservadas más importantes destacamos el Nazareno y las piezas de orfebrería morellana, una custodia de plata dorada de 1,40 metros de altura, una cruz procesional gótica de plata dorada (siglo XV).
Conviene dar la vuelta por fuera del edificio para contemplar las otras dos puertas barrocas, de gran belleza y excelente factura. No suelen ser accesibles desde el interior por permanecer cerradas. Hablamos de la llamada “Puerta lateral” y la Puerta de la Capilla de la Comunión.
Continuamos con todo lo que ver en Benicarló. La Capilla del Cristo del Mar es un edificio que ver en Benicarló. Es de apariencia neoclásica con un frente colorista que contrasta con el resto del edificio. Guarda una célebre imagen que fue traída en un falucho por un personaje llamado César Cataldó en 1650. Las curaciones atribuidas a la imagen la dotaron de una gran veneración que aún se mantiene. Tiene un himno compuesto en su honor.
El Convento de San Francisco, declarado Bien de Interés Cultural, fue erigido entre los siglos XVI y XVIII, en estilo barroco. La iglesia tiene una gran fachada barroca de bellas proporciones. Cuenta con una bella puerta con dintel y rematado el conjunto con una espadaña.
Este templo que ver en Benicarló cuenta con una única nave cubierta por una bóveda de crucería. A los lados hay capillas comunicadas entre sí y cubiertas por bóveda de cañón. El convento tiene un pequeño claustro cubierto rodeado de las dependencias.
A poco más de dos km se encuentra la Ermita de San Gregorio. Se trata de una antigua edificación que guarda una expresiva imagen de Cristo (del siglo XVI). Recibe una popular romería cada 9 de mayo.
Junto al Barranco de Aguaoliva se encuentra el Yacimiento de Puig de la Nao, un poblado ibérico que ver en Benicarló. Está organizado en la laderas del monte que también incluye una Necrópolis próxima.
Al oeste del término municipal, en la cima de la montaña de Tossa, se halla el Poblado Ibérico de Tossa, de los siglos VI al II a. de C. En sus proximidades se encuentra la Necrópolis del Bovalar.
Son varias populares las fiestas que ver en Benicarló y a las que acudir. Cada 17 de enero se celebra San Antonio Abad, que incluye populares “torradas” (hogueras en los que se asan alimentos). A esto le sigue la quema de un demonio en la plaza de la iglesia. También el desfile de carros acompañado por cánticos satíricos llamados “lloes”.
Otras importantes son las Fiestas Patronales de San Bartolomé, el 24 de agosto. Se celebran desde la concesión del rey en 1523. Más recientemente se ha popularizado la Fiesta de la Alcachofa. Se trata del producto local más célebre. La fiesta se celebra en la segunda quincena de enero, pero tiene su continuidad en fechas posteriores.
Finalmente, esto es todo lo que ver en Benicarló.
Comments