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Qué ver en Cañete

Qué ver en Cañete

Cuna de Don Álvaro de Luna

La turbulenta historia de la fortificada villa de Cañete está condicionada por su carácter montañoso y su condición de frontera natural con el reino de Valencia. A continuación te nombramos diversas opciones que ver en Cañete.

Planifica tu escapada a Cañete

La visita a todo lo que hay que ver en Cañete, Cuenca, nos puede ocupar media jornada. Dado que la figura de Don Álvaro de Luna es central en éste lugar recomendamos especialmente leer nuestro apartado de historia. Una excursión muy recomendable es dirigirse hacia el sudeste por la carretera CM-215 para visitar la fantasmagórica Moya.

Otra alternativa es dirigirse al Este para visitar el enclave valenciano de Ademuz y después hacer senderismo por el cercano Parque Natural de la Puebla de San Miguel. Quien regrese hacia el centro del país puede aprovechar para visitar la ciudad de Cuenca. Para ponerse al corriente sobre éstas y otras opciones que ofrece la gastronomía local, hemos seleccionado los mejores platos y establecimientos en nuestra página Dormir y Comer en Cañete.

¿Quieres conocer este sitio?

La historia de Cañete es más que interesante y merece la pena leerla para saber luego que ver en Cañete.

Su prehistoria es muy abundante. En Villar de Humo hay pinturas rupestres con seis milenios de antigüedad. También hay vestigios de la Edad del Bronce (siglos XVIII – XV a. de C.), como el yacimiento de Pajaroncillo. De la Edad del Hierro (siglos VI al I antes de Cristo), como algunas partes del Castillo del Saladar y el túmulo de Pajaroncillo.

Durante los primeros años de la dominación árabe –inicios del siglo VIII-, se mantuvo la antigua circunscripción territorial conocida como la Cora de Santaver (mantenida de los tiempos romanos y visigóticos). Llegaría a ser controlada por pastores bereberes de la poderosa familia de los Banu Zennun, asentada en las inmediaciones de Cañete.

Hacia el siglo X los califas de Córdoba aumentan su control sobre esta zona. Ampliaron la alcazaba y sus importantes murallas (que han quedado en su configuración original hasta nuestros días).

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Qué ver en Cañete
Puerta de la Virgen

Entre 1187 y 1190 Cañete cayó en poder del feroz Señor de Albarracín -Pedro Ruiz de Azagra- que entregó la fortaleza al rey Alfonso VIII de Castilla y fundó una iglesia que hizo depender del obispado de Cuenca. La Orden de Calatrava y el Señor de Molina de Aragón fundaron otras dos iglesias. Huidos muchos musulmanes y siendo lugar fronterizo en continuo peligro, en 1218 recibió el Fuero de Moya para incentivar su repoblación.

Su situación de plaza fronteriza debió de llamar la atención del rey Alfonso X el Sabio, que mencionó a Cañete en dos de sus bellas cantigas. En 1285 Sancho IV le concede el acta de villa, pero no un término municipal suficiente. Este hecho consolida el problema de campos de cultivo, pastos y leña. Estos debían de proceder de tierras comunales de la villa de Moya o de poblaciones del reino de Valencia. Los pobladores de Cañete mantuvieron continuos enfrentamientos con los de aquellos lugares.

Ya en la segunda mitad del siglo XIV, Enrique II, también conocido como “el de las Mercedes”, entrega la ciudad a Don Álvaro Martínez de Luna, noble aragonés y Copero Mayor del rey. En 1390 nace en Cañete Don Álvaro de Luna, hijo bastardo del señor homónimo de la villa. Luego acumularía los honores de Condestable de Castilla, Gran Maestre de la Orden de Santiago y valido del rey castellano Juan II.

A finales del siglo XIV Cañete pasa ser controlada por la familia Hurtado de Mendoza, de cuyo linaje nacerá el marquesado de Cañete en 1490. Se trató de la época de mayor esplendor de la villa, construyéndose los monumentos más importantes que atesora.

En el siglo XVI dos marqueses de Cañete –Don Andrés y Don García Hurtado de Mendoza– fueron virreyes del Perú, fundando con el nombre de Cañete poblaciones en las actuales repúblicas de Perú y Chile.

Cañete fue una población que simpatizó con el pretendiente carlista, siendo ocupada por el general Cabrera entre 1834 y 1837. Se fortificó y defendió reiteradamente frente a los liberales. La villa de Cañete no sufrió destrucciones considerables durante la guerra de 1936. No obstante, en sus alrededores se conservan numerosas trincheras y otras fortificaciones del período.

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Ahora corresponde leer el apartado Qué ver en Cañete.

A continuación, encontrarás todo lo que hay que ver en Cañete.

Coronando la cima de encrespados peñascos que domina la población, se alza el Castillo de Don Álvaro de Luna, importante edificio para ver en Cañete. Levantado sobre una fortificación visigoda más modesta, fueron los musulmanes quienes lo ampliaron siguiendo la ceja rocosa donde se ubica. La fortaleza, ciudadela medieval de planta poligonal y forma de buque, se compone de tres recintos. Primero, el patio de armas; segundo, los restos de la torre del homenaje; tercero, un triángulo estrecho que se alarga en la montaña hasta alcanzar la torre.

Fue lugar de nacimiento de Don Álvaro de Luna. Perteneció a la familia Hurtado de Mendoza que amplió y reforzó sus muros, abriendo en ella troneras para artillería. En el siglo XVII comienza su largo proceso de abandono, sólo interrumpido por las guerras carlistas en que fue reforzado.

Desde este castillo que ver en Cañete descienden las murallas que defendían la villa, también de origen árabe. En ellas sobresalen la Puerta de las Eras, la Puerta del Portillo y la de San Bartolomé, ésta última de estilo bizantino-musulmán.

Otro edificio importante que ver en Cañete es la Iglesia de San Julián. Surgió como capilla del Colegio-Seminario de la misma advocación. El cuerpo principal del edificio es utilizado hoy como Ayuntamiento. Lo más interesante es la portada de la capilla que muestra influencias del último renacimiento italiano.

Ocupa una de las fachadas de la Plaza Mayor, construcción porticada de trazado medieval y centro neurálgico de la villa. En la plaza se alza el monumento a Don Álvaro de Luna.

puerta virgen canete
Puerta de la Virgen

Es interesante ver en Cañete también la Puerta de la Sinagoga, arco que se conserva en un estrecho callejón cercano a la Plaza Mayor. Según la tradición muy arraigada en la villa, esta puerta serviría de entrada a la sinagoga de la comunidad judía de Cañete que perduró hasta finales del siglo XV.

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Muy pintoresco es el conjunto de edificaciones del Cerro del Cristo. En su extremo se encuentra la Iglesia de Santiago. Se trata de un edificio de origen gótico adosado al palacio de los Hurtado de Mendoza. Hoy se encuentra completamente arruinado. En el lado opuesto se halla la Ermita de la Virgen de la Zarza, patrona de Cañete. El origen del culto hay que buscarlo en el siglo XIV, a raíz de la aparición sobre un zarzal, a orillas de río Tinto, de una imagen mariana.

Resulta de obligada visita que ver en Cañete el Museo de la Cultura Popular. Alberga una colección etnográfica sobre la localidad y sus alrededores y una recopilación de fotografías antiguas.

El mayor acontecimiento cultural del que goza Cañete es La Alvarada, con la que rememora al condestable Don Álvaro de Luna. A lo largo de varias jornadas, a caballo entre los meses de julio y agosto, la población organiza un vasto repertorio de actividades culturales y de recreación medieval. Su calidad ha motivado que en los últimos años haya superado los 20 000 visitantes.

En conclusión, esto es lo principal que ver en Cañete.

Imprescindibles

Dónde dormir en Cañete
Puerta de San Bartolomé
Dónde dormir en Cañete
Castillo de Don Álvaro de Luna

Datos prácticos

Coordenadas

40° 2′ 30.47″ N, 1° 38′ 56.5″ W

Distancias

Cuenca 71 km, Toledo 259 km, Madrid 242 km

Aparcamiento

Es fácil aparcar en cualquiera de las calles del pueblo. En el Huerto de Doña Julia (explanada dentro del recinto amurallado) hay capacidad para un gran número de vehículos.

Altitud

1105 m

Habitantes

831 (2013)

Además de todo lo que ver en Cañete, nada como acudir a sus fiestas. Primero, San Antón (17 de enero); San Julián (28 de enero); Los Mayos (madrugada del 1 de mayo). Segundo, El Señor (denominación que los cañeteros dan a la festividad del Corpus Christi). Tercero, Fiestas en honor a San Antonio de Padua, patrón de Cañete (13 de junio). Por último, Fiestas Patronales de la Virgen de la Zarza (del 7 al 12 de septiembre).

La Alvarada (durante la primera semana de agosto).

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