La conocida como “La Villa” es una animada localidad del Oriente asturiano. El concejo incluye cuarenta y una parroquias, muchas de ellas con notables edificios prerrománicos y románicos. En conjunto son algo imprescindible que ver en Villaviciosa. Respecto a las del primer estilo, sobresalen San Salvador de Priesca (del s. X) y San Salvador de Valdediós (s. IX). Por su parte, Santa María de Valdediós (s. XIII), San Juan de Amandi (s. XIII) y Santa María de Lugás (s. XII) son románicas. Todas son Bien de Interés Cultural. El Centro de Información y Recepción de Visitantes del Románico de Villaviciosa ayuda a preparar su visita.
Ya dentro del núcleo urbano principal, conviene visitar El Ancho. Este tramo de la calle del Sol alberga la mayor parte de las casas antiguas y blasonadas. También el Teatro Riera, núcleo cultural de la villa. Frente a él se levanta el Monumento a Obdulio Fernández Pando (1932), más conocido como “La Manzanera”. Se trata de una obra de Mariano Benlliure, homenaje al indiano fundador de la sidra El Gaitero. Se representa a su sobrina, vestida de aldeana y con un cesto de manzanas.
No lejos se alza el Monumento a Carlos I (1970), del salmantino Francisco González Macías. Siguiendo el recorrido por lo que ver en Villaviciosa, se alcanza la Iglesia de Santa María de la Anunciación o Iglesia de la Oliva. Este templo data del siglo XIII, siendo una obra de transición entre el románico y el gótico. Tiene planta rectangular y una sola nave, cubierta con una estructura de madera vista. Son particularmente interesantes las representaciones antropomorfas y zoomorfas de los capiteles de las portadas sur y oeste.
Además, enfrente de la Iglesia de la Oliva se encuentra la sede de la Fundación José Cardín Fernández, miembro de la saga de propietarios de la Sidra El Gaitero. Esta empresa organiza visitas guiadas a la fabrica sidrera. A través de una exposición permanente se muestra tanto el trabajo de la cadena de producción como la historia de la compañía.
En el entorno del ayuntamiento y la plaza El Güevu (El Huevo) se sitúan la mayor parte de los establecimientos de restauración. El triángulo formado por el edificio del consistorio maliayo, la calle Balbín Busto y la calle Cervantes es la principal zona de ocio que ver en Villaviciosa.
Todo el recorrido de la Ría de Villaviciosa está declarado Reserva Natural Parcial. Los lugares que suelen atraer mayor atención son la Playa de Rodiles, por ser de una excelente calidad y por permanecer no urbanizada, así como Tazones. A pesar de la extensión de las plantaciones de eucalipto, el entorno natural se halla bien conservado en algunas zonas.
Respecto a lo anterior, resulta interesante el Centro de Interpretación de la Ría de Villaviciosa. Se encuentra instalado en una antigua Casa de Camineros de la carretera Villaviciosa-El Puntal. Enseña, a través de un recorrido didáctico, los diferentes aspectos de la ría y su fauna.
Pasando a los alrededores de la cabeza del concejo, en la cercana parroquia de Puelles se encuentra el Monasterio Cisterciense de Santa María de Valdediós (siglo XIII). Allí se conservan los tres únicos altares románicos de Asturias. Muy cerca se halla el Conventín, destacada obra prerrománica de tiempos de Alfonso III de Asturias.
En la comarca destaca la extracción del azabache. La rasa costera entre Tazones y Venta las Ranas (La Mariña) es la zona más importante para esta actividad. La artesanía de este material está datada desde época medieval hasta la Inglaterra del siglo XIX.
Por último, terminando con lo que ver en Villaviciosa hay que prestar atención a su gastronomía. La villa encabeza la Comarca de la Sidra. Cuenta también con una gran oferta de fabes y quesos que se producen en el concejo y que pueden encontrarse en mercados, como por ejemplo el Tradicional de Oles.
Finalmente, una vez disfrutado lo mejor que ver en Villaviciosa, anímate a conocer el resto de la provincia de Asturias y su turismo activo.