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Qué ver en Roquetas de Mar

Panorámica que ver en Roquetas de Mar

Animada capital del mar plástico

El segundo núcleo urbano de Almería es un enclave turístico de primer orden. Este caserío se encuentra rodeado por un mar de plástico conformado por miles de invernaderos. Gracias a ellos se generan ingentes cantidades de hortalizas de gran calidad. Bonita, animada y cálida, sus playas son muy frecuentadas durante todo el año. Aquí está la historia y lo mejor que ver en Roquetas de Mar.

Planifica tu escapada a Roquetas de Mar

La localidad es uno de los destinos playeros más populares de la costa almeriense. Además de hacer turismo de sol y playa, hay varios hitos que ver en Roquetas de Mar. Por ejemplo, el Castillo de Santa Ana, la Iglesia Parroquial o el Faro. Recorrer el municipio no lleva más de un día, aunque sus playas invitan a una estancia más amplia. Así, la escapada visitando las interesantes localidades de alrededor, como Almería. Al norte queda el desértico de Tabernas. Otra gran alternativa es acercarse a Níjar y su Parque Natural del Cabo de Gata.

Para no fallar con las reservas de alojamiento y restaurante, consulta las páginas sobre dormir y comer en Roquetas de Mar. Asimismo, la cercanía del mar hace que el lugar sea ideal para el turismo activo.

¿Quieres conocer este sitio?

Antes de abordar lo que ver en Roquetas de Mar lo mejor es repasar su historia un poco. Así, ya desde la Edad de Bronce hubo una población continua en la ribera del río que los romanos denominarían Turaniana. La gran mayoría de los vestigios antiguos son del fondeadero y la población romana. Más tarde acabaría siendo musulmana. Sin embargo, en el siglo XII se produjeron unas gravísimas inundaciones. Estas provocarían numerosos muertos y la destrucción de edificios, con lo que el lugar se abandonó.

Durante la era nazarí, la población se fortificó para defenderse de los cada vez más habituales ataques cristianos. Estos tomaron la alcazaba hacia el año 1488, reforzando el hoy conocido como Castillo de Santa Ana. Sin embargo, tres años después, la rendición de El Zagal privó de valor militar al edificio. A partir de entonces pobladores cristianos trabajaron sus salinas y se dedicaron a la pesca para subsistir. En el siglo XVI, el ayuntamiento de Almería solicitó que se edificara una torre para protegerles de las incursiones de los piratas berberiscos.

Durante la centuria siguiente, los ataques corsarios y los terremotos destrozaron el Castillo de Santa Ana. Llegado 1686, el Gobierno de Carlos II no disponía de recursos para restaurar la fortaleza. El capitán de milicias, Luis de Castro, tomó la iniciativa e invirtió mil ducados para restaurar las torres de Rambla Honda, Cerrillos, Entinas, Guardia Vieja y la Alhamilla. A cambio obtuvo el título de Alcaide perpetuo de la fortaleza.

Antigua Postal de Roquetas de Mar
Antigua Postal de Roquetas de Mar.

Asegurada la zona, en 1737 los moradores de la vecina población de Enixy Felix roturaron y cultivaron las salinas abandonadas. De esta forma, se asentaron en el antiguo núcleo de población musulmán. Veinte años después construyeron una iglesia parroquial.

Por desgracia, el 18 de agosto de 1783 cayó un rayo sobre el polvorín del Castillo de Santa Ana, produciéndose una gran explosión. Al año siguiente comienza a reedificarse, tomando la Alcaldía su control. A cambio, esta otorgó un título nobiliario a la familia Castro. Siguiendo con su mala suerte, la fortaleza sufrió graves destrozos durante el terremoto de 1804. Debido a ello se trasladaron las defensas a las cercanas baterías costeras.

Hacia 1950, el Instituto Nacional de Colonización reactivó la actividad económica local. Así, en 1963, Bernabé Aguilar montó el primer invernadero para mejorar la productividad. Esto supuso el inicio de un tipo de explotación que sirvió de referencia a muchas otras huertas españolas. Al final se llegaría a conocer como “el mar de plástico”. Por otro lado, en esta segunda mitad de siglo comenzó el boom turístico, otra gran fuente de riqueza municipal. El Estado cedió, en 1972, la propiedad del Castillo de Santa Ana al Ayuntamiento de Roquetas de Mar. Su reconstrucción se extendería hasta 2003.

A continuación, lo mejor que ver en Roquetas de Mar.

El lugar donde empieza el recorrido por lo que ver en Roquetas de Mar es el Castillo de Santa Ana. Su origen se asocia a los antiguos embarcaderos locales, de época árabe. De hecho, durante el dominio nazarí, Yusuf I erigió una torre en el lugar. Dos siglos después, Almería promovió una mayor fortificación para custodiar la producción y el embarque de la producción salinera.

Los terremotos, los navíos turcos y la escasa capacidad económica de la Corona hicieron que el Castillo de Santa Ana permaneciera ruinoso durante buena parte del siglo XVII. A partir de entonces se emprendieron diversas reformas. Por ejemplo, durante la Guerra de Sucesión se realizaron varias mejoras. Cumplió gracias a ello un papel estratégico defendiendo la línea costera de las flotas inglesa y holandesa.

Otro de los grandes monumentos que ver en Roquetas de Mar es el Faro de Roquetas. Desde hace años alberga una sala de exposiciones temporales. Inaugurado en 1863, dejó de funcionar en 1943 por la escasa altura que tenía. Al confundirse su luz con las del pueblo, se emplazó una nueva señal en una mejor ubicación. Lo atendían los responsables del faro de Sabinal, que debían recorrer en una bicicleta de propiedad oficial los 15 km que separaban ambos edificios.

Castillo de Santa Ana de Roquetas de Mar

La patrona de la localidad es la Virgen del Rosario. Esta tiene su sede en la Iglesia Parroquial, terminada en 1757. El templo está influido por el barroco castellano. En su interior guarda un espectacular artesonado mudéjar, uno de los elementos más vistosos que ver en Roquetas de Mar.

La ciudad está dotada desde 2002 de una Plaza de Toros, con un aforo de 7.800 espectadores. Allí se celebra cada año, a finales del mes de julio, una feria taurina. Además, como complemento a las instalaciones existe un Museo Taurino. Siguiendo con lo que ver en Roquetas de Mar se alcanza la nueva Capilla de la Virgen de los Vientos. Destaca por su original concepto, que permite la celebración de ceremonias religiosas al aire libre.

El municipio cuenta con 16 km de litoral. Tres de ellos conforman el Paraje Natural de Punta Entinas Sabinal. Allí se encuentra una de las praderas de Posidonia más frondosas de España. Las playas que ver en Roquetas de Mar, urbanas o no, se caracterizan por su valor ecológico. De este modo, diversas medidas aseguran la protección de sus fondos marinos. Entre los arenales más sobresalientes se hallan los de Aguadulce, La Ventilla, La Romarilla o La Bajadilla.

Aquí tienes más planes de turismo en la provincia de Almería.

Imprescindibles

Castillo de Santa Ana de Roquetas de Mar
Vistas del Castillo de Santa Ana de Roquetas de Mar.
Puerto de Roquetas de Mar
Puerto de Roquetas de Mar.

Datos prácticos

Coordenadas

36° 46′ 53″ N, 2° 36′ 53″ W

Distancias

Almería 23 km, Sevilla 425 km, Madrid 563 km.

Aparcamiento

Recomendable el enorme aparcamiento gratuito del Centro Comercial Gran Plaza, a 15 min. andando del centro de Almería. Hay zonas habilitadas en las inmediaciones de todas las playas (Romanilla, Salinas…).

Altitud

10 m.

Habitantes

90 358 (2012).

Estas son las principales festividades que ver en Roquetas de Mar: Cabalgata de Reyes Magos (5 de enero), Carnaval, Semana Santa (destaca la Guardia que hacen los miembros de la Legión al Cristo de la Buena Muerte en El Parador), San Marcos (25 de abril), San Juan (noche del 23 de junio), Virgen del Carmen y Santa Ana (del 24 al 27 de junio), Virgen del Rosario (7 de octubre), Día de Las Moragas (29 de diciembre, fiesta similar a San Juan).

Otra ocasión notable que ver en Roquetas de Mar es el Ciclo Taurino Roquetas de Mar (julio).

Esparto, Jarapas (tipo de alfombras).

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