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Los castillos más fascinantes de Teruel

Castillos de Teruel

Ha llegado el turno de recorrer las tierras más meridionales de Aragón en busca de los principales castillos de Teruel. Es una provincia de fuertes contrastes que atesora una extensa red de construcciones fortificadas en diferente estado de conservación.

Ya sea por mero abandono o por falta de medios suficientes para su recuperación y puesta en valor, muchos de estos castillos de Teruel se encuentran actualmente en estado de ruina. Afortunadamente, en la otra cara de la moneda encontramos algunas edificaciones francamente notables como las que repasamos a continuación.

Castillo de Alcañiz

Pese a que existan indicios de fortalezas defensivas durante épocas de dominación romana y musulmana, el actual castillo de Alcañiz tiene sus orígenes en el siglo XII, coincidiendo con un periodo convulso en el que la ciudad cambió continuamente de manos entre musulmanes y cristianos. Finalmente, en 1179, Alfonso II toma Alcañiz de manera definitiva y decide ceder el castillo a la orden de Calatrava, motivo por el cual este edificio es también conocido como Castillo de los Calatravos. Los elementos más antiguos conservados pertenecen a esta primera etapa y se corresponden con la capilla románica, a su vez primera parroquia de la ciudad. En la actualidad, esta impresionante fortaleza está declarada como Bien de Interés Cultural y alberga un Parador de Turismo.  Uno de los castillos de Teruel con más encanto.

Castillos de Teruel
Castillo de Alcañiz

Castillo de Peracense

El peculiar perfil de esta fortaleza se asienta a casi 1.400 metros de altura sobre una escarpada elevación de la sierra Menera. De claro carácter defensivo, su construcción tuvo lugar durante la primera mitad del siglo XIV con la intención de crear un fuerte inexpugnable que, como resulta evidente a primera vista, se consiguió en la mayoría de sus flancos. Respecto a su estructura, este castillo presenta una planta irregular y un conjunto formado por tres recintos concéntricos. Su figura en lo alto de la sierra es una de las postales más característica de la provincia.

castillos de Teruel

Castillo de Mora de Rubielos

Ubicada en plena comarca de Gúdar-Javalambre, Mora de Rubielos cuenta con un castillo de grandes dimensiones cuya presencia se hace inevitable desde cualquier ángulo de sus calles y alrededores. Aunque el origen de esta fortaleza sea musulmán, el actual edificio responde a preceptos góticos propios del siglo XIII. Su exterior es sobrio y hermético, con cuatro grandes muros diferentes entre sí y otras cuatro torres de apariencia desigual. Su interior, en cambio, esconde espacios de gran belleza entre los que destaca su patio central, porticado y con dos alturas ordenadas alrededor de una estructura de arcos y vanos apuntados. Este es otro de los castillos de Teruel que te impresionarán.

Castillo de Rubielos de Mora
Castillo de Rubielos de Mora

Castillo de Puertomingalvo

Sin salir de la comarca de Gúdar-Javalambre encontramos este pintoresco castillo, otro de los monumentos más fotogénicos de la provincia. Construido sobre un risco a 1.300 metros de altitud, existen pruebas documentales de su presencia desde 1202, cuando Pedro II cede su propiedad al obispo de Zaragoza.

La historia, no obstante, no tardó en olvidarse de él haciéndolo caer en un proceso continuado de abandono que persistió siglo tras siglo favoreciendo incluso que su patio central fuese empleado en determinadas ocasiones como cementerio. A finales del siglo XX, varias acciones destinadas a su rehabilitación terminaron por poner en valor los restos que de él todavía quedaban en pie.

Castillos de Teruel
Castillo de Puertomingalvo

Conjunto defensivo de Albarracín

La localidad de Albarracín contaba con un castillo que fue desmantelado por Felipe V en pleno siglo XVIII, cuando la importancia defensiva de esta ciudad fue despareciendo progresivamente. En la actualidad, los restos de este castillo y otros elementos defensivos solamente existen en su apariencia de ruina histórica o formando parte de diferentes yacimientos arqueológicos.

Las murallas de Albarracín, sin embargo, sobrevivieron al abandono y todavía remontan el perfil de la montaña dibujando un característico tapiz de piedra rematado por almenas y cortado de vez en cuando por varias torres que, en su mayoría, conservan intacta gran parte de su estructura original.

Castillos de Teruel
Conjunto defensivo de Albarracín

Castillo de Valderrobres

Dominando desde lo alto la imagen de esta bella localidad del Maestrazgo turolense, el castillo de Valderrobres es uno de los principales monumentos de la comarca del Matarraña. Pese a que sus orígenes puedan datarse en pleno siglo XII, su aspecto actual corresponde a las transformaciones acometidas durante el siglo XIV a fin de convertir sus instalaciones en sede episcopal. Así, adoptando una llamativa fachada de estilo gótico, el castillo pasa a manos del arzobispado de Zaragoza hasta el siglo XVII, fecha en la que comienza su abandono y deterioro. A finales del siglo XX, diversos planes destinados a su recuperación consiguen ponerlo de nuevo en valor dotándolo de su apariencia actual, reflejo directo de su época de mayor esplendor.

Todos ellos ejemplos de castillos de Teruel que te fascinarán.

Castillos de Teruel
Castillo de Valderrobres