Las comparaciones son odiosas, pero podríamos decir que Antonio Palacios (1876-1945) ha sido para Madrid lo que Gaudí para Barcelona. Este arquitecto con raíces gallegas desarrolló un estilo ecléctico con influencias muy distintas que ha dejado marca en todo el centro de Madrid, dotándole de la monumentalidad que nos llega hasta nuestros días. Hoy queremos rememorar a este ilustre pero desconocido arquitecto y urbanista con un recorrido por cinco de sus obras que, para nosotros, merecen ser admiradas. ¿Nos acompañas?
Casino de Madrid
Comenzamos en este impresionante edificio que podemos encontrar muy cerca de la Puerta del Sol, en la Calle Alcalá nº 15. En realidad no es un proyecto propio como tal, sino una fusión que hizo el arquitecto Luis Esteve con los diversos planteamientos que se presentaron, pero se aprecia el sello de un joven Antonio Palacios especialmente en la fachada. Hay que decir que en los primeros años de desarrollo profesional colaboró con su compañero y amigo Joaquín Otamendi.
Círculo de Bellas Artes
Es considerado por muchos como una de las construcciones más modernas de Antonio Palacios. Curiosamente, al principio su proyecto fue descalificado por no adecuarse a las bases del concurso, pero los socios del círculo decidieron re-elegirlo por unanimidad. Entre los múltiples elementos destaca su torre y los ornamentos que fueron añadidos con posterioridad. Este edificio se convirtió en un símbolo de la ciudad.
Banco Español del Río de la Plata
Inspirado en la Acrópolis de Atenas, el actual Instituto Cervantes lo podemos encontrar muy próximo a los dos anteriores, en la Calle Alcalá nº49. Del edificio destaca su puerta principal flanqueada por cuatro cariátides, elementos que no se encontraban en los diseños originales del edificio. Sí contaba con el guiño historicista de la fachada principal dominada por columnas jónicas. Un auténtico espectáculo visual.
Palacio de Comunicaciones
Presidiendo la Plaza de Cibeles encontramos esta construcción referente de la ciudad de Madrid que también se diseñó conjuntamente entre Palacios y Otamendi, seguramente el proyecto más ambicioso que tuvieron estos dos arquitectos durante su colaboración. Fue planificado como sede de la Sociedad de Correos y Telégrafos, pero actualmente cumple las funciones de Ayuntamiento y de Centro cultural, por lo que se puede visitar casi por completo. Merece la pena pararse a contemplar los detalles decorativos tanto en su fachada como en el interior. Una auténtica joya.
Hospital de Jornaleros de Maudes
Nos alejamos del centro para visitar esta obra maestra de la arquitectura madrileña que en la actualidad es sede de la Consejería de Transportes de la Comunidad de Madrid. Antonio Palacios desarrolló este proyecto en paralelo con el Palacio de Comunicaciones, y es por ello que cuenta con ciertos paralelismos entre sus fachadas, pero la distribución interior es completamente diferente. Merece la pena contemplar los zócalos de cerámica trabajados en colaboración con el ceramista Zuloaga.
