La receta de filloas es muy típica en las mesas gallegas. Y es que su facilidad para elaborarlas hace que sea un postre muy recurrido además de encantar a los más pequeños de la casa. Aunque esté concebido sobretodo como postre, lo cierto es que se pueden rellenar de tantas maneras, chorizo por ejemplo, que se consumen también como plato salado. En esta ocasión vamos a utilizar agua en la receta pero, en muchas casas gallegas, se utiliza o caldo (realizado con varias carnes) o sangre, típicas de la matanza del cerdo. Sea cual sea la opción que elijas el resultado será delicioso.