La receta de fabada asturiana es un plato con un alto valor energético y lleno de sabor. Su origen se remonta al descubrimiento de América y desde entonces un símbolo de la gastronomía asturiana. Uno de los ‘problemas’ que surge de este plato es su dificultad para ser digeridos lo que produce gases. Esto se debe a los hollejos, las pieles que las recubren. Para resolverlo una opción es añadir comino o hinojo que reducirá el impacto en nuestra mala digestión.
En cualquier caso, la receta de fabada asturiana es muy nutritivo. Es un plato con un alto porcentaje de fibra, potasio y vitaminas que lo hacen un alimento digno de ser incluido en nuestra dieta, además de su exquisito sabor. Todo ello sin contar con la energía que nos proporcionan el resto de ingredientes de esta receta de fabada asturiana. Como no podía ser de otra manera, este plato lo elaboraremos con las fabes asturianas, que cuenta con Indicación Geográfica Protegida. ¿Comenzamos?
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