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Helados caseros muy fáciles de preparar

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Los helados caseros son la manera perfecta de calmar el calor asfixiante que suele atraparnos durante los meses de verano. Se pueden elaborar helados caseros de todos los tipos: dulces, clásicos, de frutas… No tienen por qué ser una chuchería más: si los preparas en casa sabrás qué ingredientes llevan tus helados caseros y serán más artesanales. Son fáciles de elaborar e ideales como postre o merienda.

Helados caseros: de chocolate

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  • Chocolate fondant (85 gr), cacao en polvo (25 gr), leche (250 ml), azúcar (100 gr), nata (250 ml), huevo (2 yemas)

La receta de helado de chocolate siempre es un éxito entre cualquier público, ya sean niños o mayores. Comenzamos batiendo las yemas y el azúcar en un cuenco hasta que se integren los ingredientes. Por otro lado, ponemos a fuego lento una cazuelita con la nata, la leche y el cacao. Cuando esté un poco caliente, troceamos el chocolate y lo echamos sin dejar de remover hasta que se derrita.

Vertemos en el cazo la mezcla reservada y batimos bien sin dejar de remover, pues no debe llegar a hervir o se cortará. Dejamos nuestra mezcla para que enfríe en la encimera. La echamos en un recipiente plano y a poder ser metálico y metemos en el congelador, donde estará tres horas durante las que moveremos la mezcla con ayuda de una espátula cada 30 minutos. Una de esas recetas de helados caseros que siempre es bueno tener a mano.

Helados caseros: de frambuesa

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  • Frambuesas (congeladas, 2 tazas), miel (1 cucharada), limón (el zumo de medio), yogur natural (1), galletas de avena (2)

Se trata de una de las recetas de helados caseros más natural. Aprovecha la temporada y descubre este helado lleno de propiedades. Además, esta receta de helado de yogur está deliciosa y no te dará tanto cargo de conciencia. El primer paso será introducir en un cuenco las frambuesas sin descongelar e incorporar el yogur. Batiremos nuestro futuro helado durante 5 minutos mientras añadimos el zumo de limón y la miel. Cuando la mezcla esté cremosa, la meteremos en la nevera durante al menos 30 minutos. ¡Fresquito y sano!

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Helados caseros: de café

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  • Café instantáneo (2 cucharadas), agua (2 cucharadas), leche condensada (1 lata de 400 gr), crema para batir (2 tazas)

Para los fanáticos del café este es uno de esos helados caseros perfectos para acompañar con nueces o caramelo. Batimos la crema estando muy fría hasta que espese. En una taza mezclamos el café y el agua hasta que no veamos grumos. Vertemos la taza en un cuenco junto con la leche condensada y removemos para integrar los ingredientes. Añadimos un cuarto de la crema a la mezcla y batimos bien, tras lo que vertemos otro cuarto. Si vemos que la mezcla queda ligera echamos el resto, esta vez con una espátula. Vertemos en un recipiente y mantenemos congelado hasta 8 horas.

Helados caseros: de vainilla

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  • Huevo (8 claras), azúcar (230 gr), leche evaporada (400 ml), nata (400 ml), esencia de vainilla, sal

Empezamos batiendo las claras y el azúcar de forma enérgica, tras lo que echamos dos cucharaditas de esencia de vainilla y una pizca de sal mientras continuamos batiendo. Añadimos la nata y la leche evaporada sin dejar de batir, con lo que obtendremos una crema espesa. En distintos recipientes pequeños, vertemos los helados caseros en porciones y congelamos toda una noche.

Texto: María Jesús Colombo