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Alubias blancas con butifarra, panceta y verduras, una receta contra el frío

Alubias blancas con butifarra, panceta y verduras

Las legumbres son siempre un acierto cuando el frío empieza a colarse hasta por los rodapiés. En este sentido, los platos de cuchara  nunca decepcionan. Verdura, carne y calor. Sobre todo calor. Y siesta. Que es cierto eso de que, después de un buen plato de alubias, se antoja planchar un poco la oreja. Aquí una receta sencilla para acompañar a los días de frío. Una receta de labor diaria para no perder tiempo y nutrirse como Dios manda.

Ingredientes para cuatro raciones

400 g de alubias blancas

4 butifarras no muy grandes

200 g de panceta

200 g de calabaza

1 puerro

1 cebolleta

2 dientes de ajo

Aceite de oliva virgen extra

Agua y sal

Preparación de las alubias blancas con butifarra, panceta y verduras

Alubias blancas con butifarra, panceta y verduras
Plato de alubias blancas con butifarra, panceta y verduras. | Shutterstock
  1. En primer lugar hay que tener en cuenta que las alubias deben de estar a remojo durante al menos 12 horas en agua fría. Con eso conseguiremos que el tiempo de cocción sea mucho menor.
  2. Preparar todas las verduras. La cebolleta, una vez limpia y entera, la añadimos a una olla rápida junto con el puerro en dos trozos. Añadir la calabaza sin piel y en varios trozos también. Echar, además, los ajos, la panceta y las butifarras. Cubrirlo todo con dos dedos de agua y poner en la olla, finalmente, las alubias.
  3. Llevar a fuego medio y tapar la olla a presión. Una vez comience a hervir, cocinar durante 30 minutos.
  4. Transcurrido ese tiempo, abrir la olla exprés (¡una vez haya desaparecido el vapor!) y sacar las verduras. Triturarlas con la batidora en un vaso batidor junto con un poco del agua de la cocción.
  5. Añadir de nuevo a la olla las verduras batidas, y un buen chorro de aceite de oliva si se quiere. Cocinarlo todo durante 10 minutos más a fuego lento con la olla destapada y corregir la sal.
  6. Una vez las alubias estén tiernas, dejar reposar el guiso por lo menos una hora o todo un día. Ya solo falta repartir las raciones y disfrutar de este delicioso plato de invierno.
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