El 12 de octubre de 1928, el rey Alfonso XIII corona a la Virgen de Guadalupe, patrona de Extremadura, como Reina de la Hispanidad. Desde entonces en su corona puede leerse “Sancta María de Guadalupe, gratia plena, Mater Dei, Hispaniarum Regina, ora pro nobis peccatoribus”. En Guadalupe, cada año se celebra la Fiesta de la Hispanidad como un recordatorio de dicha coronación mediante una serie de actos que culminan con la recepción de una gran cabalgata, la mayor de Extremadura. La fiesta fue declarada de Interés Turístico Regional pero suscita ya interés entre el público de otras partes de España.
La Real Asociación de Caballeros de Santa María de Guadalupe es la encargada de dar forma a la Fiesta de la Hispanidad cada día 12 de octubre. Por la mañana, los actos se inician con la entrega de medallas y la recepción de los nuevos miembros de la asociación. A continuación, los caballeros se dirigen en procesión hasta la basílica, donde tiene lugar una misa en honor a la Virgen de Guadalupe. A lo largo del día se celebran otros actos como los Premios Guadalupe – Hispanidad, las Jornadas de la Hispanidad (que ponen el acento en pueblos, hechos o personas del mundo hispano cuya aportación al mismo haya sido reconocida) o el Concierto de la Hispanidad, generalmente a cargo de la Orquesta de Extremadura.