Hay mucho que degustar en Orio, una localidad pesquera emplazada en la desembocadura del río Oria.
En su puerto se pescan a diario pescados de gran calidad que posteriormente son cocinados en las famosas parrillas de carbón vegetal de los restaurantes de la zona, algunas de las cuales están alojadas en plena calle.
Sin duda no puedes abandonar Orio sin probar un exquisito besugo al estilo Orio, preparado directamente en la parrilla, sin besugueras.
Sin duda es el plato estrella de la localidad tanto es así que, la tercera semana de julio, se celebra la Fiesta del Besugo. Durante cuatro días (de jueves a domingo) la plaza de Orio se convierte en un restaurante donde tres parrilleros del pueblo, de los asadores Xixario, Joxe Mari y Katxiña, asan juntos casi un millar de besugos en parrillas gigantes.
Otros productos muy populares a la hora de comer en Orio son las angulas, pescadas de manera artesanal en la ría; o las anchoas, otro pescado muy apreciado en temporada. Por lo general, en Orio es fácil disfrutar de casi cualquier pescado que nade en aguas del Cantábrico.
Si por el contrario eres un amante de la carne, las parrillas de la localidad son también las principales responsables de toda clase de chuletones de buey, solomillos, entrecots y otras especialidades similares.
La mayor área de concentración de bodegas elaboradoras de Txakoli de Getaria se encuentra muy próxima a esta localidad, por lo que no debe extrañar a nadie que esta bebida (así como la sidra artesanal) sea uno de los productos más populares para acompañar todo aquello que hay que comer en Orio.
Y para concluir, nada mejor para digerir este banquete que un paseo por el parque natural de Pagoeta, todo un remanso de paz y naturaleza.