La poesía en Madrid, un incendio sin control

“Veinte minutos de razones bajo el tejado donde habitan los gatos”. “Ciudad y no ciudad, universo de tránsito en donde los viajeros traducían el mundo”. Estas frases, de La Morada y Verónica Aranda respectivamente, son dos de los versos que en 2018 se distribuyeron a través de 1.100 pasos de cebra de la capital. La iniciativa se llamó Versos al paso y fue toda una representación del movimiento poético que recorría la ciudad.

Sobre aquellas palabras han pisado muchas personas y coches, ha llovido, ha pasado Filomena… El tiempo no perdona y los versos se han deteriorado hasta desaparecer. Pero la poesía no. La poesía sigue recorriendo Madrid con fuerza hasta llenar bares, plazas e incluso teatros. Como un incendio que ya no se puede apagar.

Del Café Gijón a los festivales de poesía

Bien conocidos son algunos festivales de música… pero ¿festivales de poesía? Eso es harina de otro costal. Sin embargo, los hay. Cada vez más y muchos se dan cita en la capital española. Por ejemplo, este año se ha celebrado la tercera edición del Festival de Poesía de Alcalá de Henares, que ha contado con recitales, mesas redondas y talleres a lo largo de tres días. Por su parte, el Festival Internacional de Poesía de Madrid da cobijo cada año a poetas de todas partes del mundo.

Antaño era el Café Gijón aquel que acogía aquella larga ristra de escritores españoles. Por sus instalaciones pasaron personajes tan ilustres como Federico García Lorca, Benito Pérez Galdós, Valle Inclán, Maruja Mallo o Mercedes Fornica. Ahora, esta mítica cafetería se ha convertido en un sitio turístico más, un recuerdo del pasado. Toman el relevo otros nombres, otros lugares... No importa, mientras la poesía siga impregnándolo todo de versos.