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‘El caminito del rey de Alicante’: la pasarela de Relleu, un paseo por el abismo

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A veces los planes más insospechados nos llevan a descubrir lugares únicos. Es lo que les ocurre a esos viajeros curiosos que se aventuran a internarse en el corazón de la Marina Baixa alicantina. Al oír hablar de esta comarca vienen a la mente nombres propios como Benidorm, Guadalest o Altea. Pero su territorio esconde mucho más: rincones de auténtico vértigo, como la pasarela de Relleu o, lo que es lo mismo, ‘el caminito del rey de Alicante’.

Los paisajes de esta zona son paisajes que han pasado casi desapercibidos durante décadas. Y ha tenido que ser una modesta pasarela de madera la que los ha rescatado del olvido. Modesta en lo que a materiales se refiere, porque el panorama que se abre a la vista según se avanza por ella es de una enorme riqueza.

El impresionante desfiladero que permitió la construcción de la presa y ese camino de madera suspendido sobre el abismo han dado forma a lo que se conoce como ‘el caminito del rey alicantino’. Una comparación con ese otro espectacular paseo casi entre las nubes en el corazón de Málaga y que da idea de por qué este es uno de los lugares que hay que ver en Alicante.

Una pasarela de auténtico vértigo

Pasarela Relleu
Mirador de cristal en la pasarela de Relleu. | Fuente: La ruta de la pasarela de la presa de Relleu

La pasarela de Relleu cuelga a 60 metros sobre la garganta del río Amadorio. Son poco más de 200 metros de recorrido, pero es inevitable contener la respiración mientras se van pisando los tablones de madera que la forman. Un trayecto corto, si lo comparamos con el Caminito del Rey malagueño, pero en el que el vértigo no debe impedir abrir bien los ojos. El paisaje que se aprecia desde las alturas, envuelto en el silencio, es casi abrumador.

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Y lo mejor está aún por llegar. Hay que alcanzar el final de la pasarela para pisar un mirador de cristal no apto para los más miedosos. Es desde este balcón desde donde mejor se aprecia la imagen de una garganta angosta y profunda que da forma a una de las postales más espectaculares de toda la provincia de Alicante.

Pequeñas sorpresas en la pasarela de Relleu, ‘el caminito del rey de Alicante’

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Alrededores de la pasarela de Relleu. | Fuente: La ruta de la pasarela de la presa de Relleu

De la pasarela de Relleu, ‘el caminito del rey de Alicante’, es quizá la pasarela lo que más recuerda a su hermano mayor andaluz. Pero hay otras similitudes, como la presencia de una presa en el territorio. Una presa que, en el caso de Relleu, se construyó en el siglo XVII y que hoy está catalogada como una de las presas más antiguas de España y de Europa, aunque ya no esté en uso.

Sí hay aspectos que hacen que el recorrido del ‘caminito del rey de Alicante’ sea muy diferente al de Málaga. La ruta que parte desde el pueblo sigue en parte un antiguo camino para caballerías y atraviesa unos paisajes poco conocidos, pero de una enorme riqueza natural.

En el camino se descubren viejas balsas de agua, alguna que otra acequia y un viejo horno de cal. También bancales de almendros y huertas pobladas por olivos y algarrobos. Y puede que, con un poco de suerte, al llegar al desfiladero se alcance a contemplar el vuelo de algún águila perdicera. Pequeñas sorpresas en el camino que convierten esta ruta en uno de los planes más sorprendentes que hacer en Alicante.

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Datos prácticos para visitar la pasarela de Relleu

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La pasarela de Relleu desde las alturas. | Fuente: La ruta de la pasarela de la presa de Relleu

Para llegar a la pasarela, lo ideal es hacer el recorrido circular que parte del mismo pueblo de Relleu y que está perfectamente señalizado. Son 10 kilómetros de sendero, pero su escasa dificultad permite realizarlo sin grandes problemas. La alternativa es un recorrido lineal algo más corto, de poco más de 3,5 kilómetros, que se inicia en un aparcamiento relativamente cerca del inicio de la pasarela. Tanto en una ruta como en otra, la pasarela de Relleu marca la mitad del camino.

Pero no se puede acceder libremente a ella. Por razones de seguridad ese acceso está controlado y es conveniente realizar reserva previa. Las citas se dan cada 15 minutos y con un cupo de 15 personas máximo para facilitar el paso y evitar aglomeraciones. También hay que pagar una entrada casi simbólica que ayuda al mantenimiento de la pasarela. Son 2,5 euros la entrada general y 1,5 euros la reducida.

En lo que se refiere a los horarios, pueden variar. De manera general, en invierno la pasarela permanece abierta de lunes a viernes de 10 a 17: 30 y de 9:30 a 18:30 sábados, domingos y festivos. En verano, abre de 9 a 14 y de 17 a 20:30 de lunes a domingo.

Qué más se puede ver en Relleu

Relleu es uno de los rincones que visitar en Alicante por otros motivos, más allá de ese recorrido que lleva a la antigua presa. Para los amantes del senderismo, este rincón de la Marina Baixa es todo un descubrimiento. Por aquí pasa el ramal del Camino de Santiago que parte de Villajoyosa. También pasa el GR330, el sendero de gran recorrido que discurre por el interior de la provincia de Alicante.

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Villajoyosa
Villajoyosa. | Shutterstock

Pero si hay un recorrido que merece la pena no perderse es la Ruta del Bortolons. Discurre entre bancales de almendros que ascienden por las laderas. Bello en cualquier momento, pero muy especialmente a finales enero y principios de febrero, cuando los árboles están en plena floración y tiñen el paisaje de blanco y rosado.

Y merece la pena dedicarle un tiempo a Relleu, un pueblo de calles empinadas en las que aún se mantienen en pie las ruinas del antiguo castillo. La iglesia de San Jaime Apóstol y la capilla de la Mare de Déu del Miracle son sus otros tesoros arquitectónicos. Y todo ello en medio de un paisaje montañoso y aderezado por una extraordinaria gastronomía local en la que destacan los embutidos, la olleta o las cocas, entre otras delicias.