Dónde comer en Ansó
Un municipio de una gastronomía variada y de calidad, por lo que comer en Ansó es la oportunidad perfecta para degustar buenas recetas. Disfruta de sus muchas opciones en los bares y restaurantes de la localidad.
Pese a su pequeño tamaño, hay mucho que comer en Ansó, capital del valle del mismo nombre y uno de los lugares del Pirineo aragonés que conserva en mejor estado su esencia más tradicional.
Aquí, la vida discurre ajena al turismo de masas y la explotación urbanística que se da en otros valles pirenaicos. Esto, sin duda, condiciona una gastronomía profundamente ligada a su entorno natural.
Los platos estrella son aquellos provenientes de la ganadería local, el ternasco asado y las carnes a la brasa. Pero también encontramos productos derivados de la matacía (matanza en Aragón) del cerdo. Por ejemplo, longanizas, tortetas, lomos o costillas elaborados para su consumo inmediato o guardados en conserva.
La caza supone otro de los aportes básicos para la cocina local siendo el jabalí una de las piezas más frecuentadas.
Otro de los platos estrella del valle de Ansó son las migas que sirven en las diferentes bordas (originalmente, cabañas destinadas a albergue de pastores y ganado) de la localidad.
Éstas suelen ir acompañadas por usones, unas setas típicas de la región, ya que la tierra de Ansó también es pródiga en toda clase de productos micológicos.
Por último, cabe destacar los quesos que aquí se elaboran con leche de vaca y oveja. La fiesta de exaltación del traje ansotano puede ser una buena ocasión para descubrir la gastronomía de la localidad.
Si te gusta el queso en el bar Zuriza además de como tapa también preparan una rica tarta de queso.
Pinchos, tapas y platos deliciosos como ensalada de gulas es lo que encontrarás en el bar O Cubila.
Las opciones para comer en Ansó están muy ligadas a la tierra, al carácter aislado de estos valles pirenaicos y a su tradición ganadera. Kimboa es uno de los restaurantes en Ansó. Buen ejemplo de una cocina de corte tradicional. Destacan los productos de temporada y otras especialidades como las carnes a la brasa.
A las afueras de la localidad hay varias bordas que en conjunto suponen una de las alternativas más secundadas a la hora de comer en Ansó.
Las más famosas son Arracona y Chiquín. En ambas es fácil encontrar una oferta culinaria fuertemente ligada a los fogones clásicos de la zona. Algunos productos como las migas aparecen entre los más destacados. Ambos establecimientos destacan también por estar ubicados en parajes naturales de gran valor paisajístico.
