La calabaza es esa verdura que nos alegra la vista con su vivo color naranja y, lo que es mejor, sus muchos beneficios y propiedades la convierten en un alimento indispensable en tu dieta. Su sabor dulce es perfecto para hacer cremas y purés, postres o incluso espaguetis de calabaza. Perfecta para llevar una alimentación sana, sus múltiples beneficios la convierten en la verdura ideal si sigues una dieta de adelgazamiento o sufres de estreñimiento. Ricas en ácidos grasos como el omega 3, sus minerales y vitaminas así como otras muchas de sus propiedades harán de la calabaza una de tus verduras favoritas.
Beneficios y propiedades de la calabaza
- Al igual que la zanahoria, la presencia de de betacarotenos en la calabaza es alta. Este nutriente es fundamental para tener una piel sana y para preservar la salud ocular.
- Los componente esenciales de la calabaza son el potasio, magnesio, hierro y fósforo. Las vitaminas A, E y C tienen propiedades antioxidantes con las que también cuenta.
- Su bajo contenido en calorías la convierte en la verdura idónea para incluir en dietas que busquen perder peso. Esto es debido a que la calabaza contiene gran cantidad de agua (un 90%). De esta forma, es depurativa y diurética.
- También cuenta con una gran cantidad de fibra, por lo que ayuda con problemas derivados de un mal funcionamiento del tránsito intestinal.
- Regula el nivel de azúcar en el cuerpo. Si sufres de diabetes o hipoglucemia, una crema de calabaza diaria con un poco de canela ayudará a regularlo.
Por si esto te pareciera poco, no sólo la calabaza es beneficiosa para tu salud, también lo son sus semillas. Las semillas de calabaza tienen tantas propiedades como la verdura en sí. Son perfectas para librarnos de parásitos intestinales. Además, son nutritivas y ricas en zinc. Con efectos antiinflamatorios, las semillas de calabaza son un remedio natural perfecto. ¿Más razones? Colaboran con nuestro descanso ya que entre sus aminoácidos destaca el triptófano. Tostadas o molidas para tomar como bebida, son una opción a tener muy en cuenta.
Curiosidades
Entre todas las variedades está la calabaza de verano y la de invierno. La primera tiene las semillas blandas y su piel es clara. La segunda es más gruesa y dulce. La calabaza de invierno contiene menos agua que la que se cultiva en verano.
Texto: María Jesús Colombo
