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Qué ver en Chinchón

Dónde dormir en Chinchón

Ajos, anís y toros

La ciudad de Chinchón es conocida por su plaza, su famoso anís, por cultivar una especie muy valorada de ajo y por sus célebres corridas de toros. Tiene una rica historia que ha dejado bellos testimonios en su peculiar casco histórico y notables monumentos. A continuación, encontrarás todo lo que hay que ver en Chinchón.

Planifica tu escapada a Chinchón

Esta típica localidad se puede ver en media jornada. Lo más importante lo detallamos en el apartado Que ver en Chinchón (sin olvidar llevarse una botella de licor de Chinchón con DO).

Para el resto del día sugerimos seguir hacia el sur hasta la literaria y poco frecuentada localidad de Ocaña. Los amantes de las aves pueden llevar sus prismáticos y bajar hasta El Regajal – Mar de Ontígola para disfrutar de esa laguna. Otra opción es dirigirse hacia el norte a hacer senderismo en el Parque del Sureste o contratar alguna actividad de turismo activo (caballo, piraguas…) por la zona.

Quien piense en pasar la noche y continuar la escapada un día más puede planear visitar la cercana Aranjuez, un destino tan cultural como relajante. Hay mucho que ver en Chinchón, una localidad con muy buen ambiente y donde se come a gusto. También hay hospedajes románticos en la zona. En la página de reservas Dormir y Comer en Chinchón recogemos las mejores ofertas.

¿Quieres conocer este sitio?

La historia de Chinchón es más que interesante y merece la pena leerla para saber luego que ver en Chinchón. La ciudad, Conjunto Histórico Artístico desde 1974, se localiza en la cuenca del Tajo-Jarama, al sur de Madrid. Su nombre podría proceder de la palabra latina cincio (herradura), en relación a la forma de herradura de la colina donde se encuentra.

Las condiciones geográficas de su emplazamiento facilitaron el asentamiento humano desde el Neolítico. Pasaron después por allí íberos o celtíberos y romanos, autores estos últimos del sistema de vías de comunicación.

A principios del siglo XI, los árabes se instalaron en el territorio, dejando su impronta en el sistema de regadíos del Tajuña. El lugar fue reconquistado en 1139 por milicias segovianas al mando del rey Alfonso VII. Quedó entonces vinculado al Concejo de Segovia.

Los Reyes Católicos estuvieron allí al menos cinco veces, convirtiéndolo en señorío hacia 1480. Después de eso, se lo concedieron a Andrés Cabrera y Beatriz de Bobadilla, marqueses de Moya, por su apoyo militar contra  Juana de Castilla, “La Beltraneja”. Fue entonces cuando se construyó el castillo.

En plena Guerra de Sucesión española, Felipe V fue aclamado por el pueblo como rey en la plaza Mayor de Chinchón (1706). Esa muestra de apoyo motivó el ataque de las tropas del archiduque Carlos, su rival al trono. Causaron graves destrozos en el castillo.

En 1739 y ya con los Borbones en el poder, Chinchón recibiría el título de “Muy Noble y Muy Leal” por su fidelidad durante este conflicto. Por aquel entonces el condado pertenecía a la familia, pues en 1938 había sido vendido al infante de España, Felipe de Borbón y Farnesio, hijo del rey Felipe V.

Que ver en Chinchón
Plaza de Chinchón a principios de siglo XX

Durante la Guerra de la Independencia (1808-1814), el ejército francés asoló el municipio. El pintor Francisco de Goya (1746-1828), testigo del suceso, dejó constancia de la tragedia en el grabado número 37 de la serie de los Desastres de la Guerra (1810-1815). El artista pasaba allí largas temporadas. Logró del Infante Don Luis que su hermano Camilo fuera el capellán de los condes de Chinchón.

Además, en 1800 el genio de Fuendetodos ya había retratado a la condesa de Chinchón, María Teresa de Borbón y Vallabriga (1780-1828), casada con el primer ministro de Carlos IV, Manuel Godoy (1767-1851).

Un hecho fundamental en el desarrollo de la ciudad sería la fundación, a mediados del siglo XIX, de la Sociedad de Cosecheros de Vino, Vinagre y Aguardiente de Chinchón. Funcionó durante ochenta y cinco años (1853-1938). Con los beneficios que se obtenían se mejoraron las infraestructuras del pueblo. Además, colaboraron en obras de carácter social, asistencial y cultural.

Prueba de sus buenos productos es el título que ostenta de “Proveedor de la Real Casa”, concedido por la reina María Cristina. En 1919 el rey Alfonso XIII otorgó a Chinchón el título de Ciudad.

Ahora corresponde leer el apartado Que ver en Chinchón.

A la entrada de la villa por el este, junto al aparcamiento, se localiza la Casa de Cultura Manuel Alvar, que aloja el Centro de Interpretación Turístico El Matadero. Aquí el visitante puede acceder a una información interactiva de la ciudad y conocer todo lo que hay que ver en Chinchón.

En el Monasterio de las Clarisas (s. XVII) trabajaron los mejores maestros de cantería procedentes de El Escorial. La Iglesia es de estilo herreriano y destaca el claustro del Convento y el mausoleo de los Condes de Chinchón. Las monjas clarisas son famosas por su repostería artesana, que se puede adquirir allí mismo.

Un monumento que ver en Chinchón es la Ermita de San Roque (s. XVII). Dedicada al patrón de Chinchón y de estilo barroco, conserva dos retablos. En uno se puede admirar la imagen de Nuestra Señora de Gracia, patrona de la localidad y en el segundo se encuentra una talla de San Roque, de 1716.

Otro lugar emblemático que ver en Chinchón es el Castillo de los Condes. Se construyó en el siglo XV por los señores de Chinchón y los comuneros lo destruyeron a principios del siglo XVI. El tercer conde levantó el castillo actual, que volvió a ser atacado durante las guerras de Sucesión y de la Independencia.

Durante el siglo XX fue utilizado como fábrica de licores. El edificio está formado por dos cuerpos cuadrangulares unidos y las esquinas están rematadas por torreones cilíndricos; el foso se conserva parcialmente. A la entrada aún permanece el escudo de armas de los condes y en su interior quedan restos de la antigua fábrica de anís.

En estado ruinoso, continúa perteneciendo a los condes de Chinchón. No está permitida la visita pero sí se puede disfrutar de la vista de la “Alcarria madrileña”, ya que el castillo se levantó en la zona de mayor altitud, a 800 m.

Al final de la calle del Convento, después de la Casa de la Cadena, en la que pernoctó Felipe V en 1706 durante la Guerra de Sucesión, se llega al Parador de Turismo. Se trata del Antiguo Convento de Agustinos, del que se conserva la iglesia, actual Ermita de Nuestra Señora del Rosario. De estilo barroco, consta de una sola nave con capillas laterales. Durante la Guerra Civil, fueron utilizadas como celdas para los presos.

La Plaza Mayor que ver en Chinchón está formada por casas construidas en diferentes épocas, con balcones de madera y soportales. Originalmente en la plaza se celebraban las ferias de ganado y en el año 1499 el Concejo adquirió algunas casas para formar el Ayuntamiento actual. En 1683 queda cerrada abriéndose huecos suficientes que dejen paso a procesiones y carros.

En el siglo XIX se construyeron los soportales con columnas y, a principios del s. XX, se unieron las esquinas con arcos, quedando totalmente cerrada. Las casas tienen 234 balcones llamados “claros”. Están pintados de verde por expreso deseo de los vecinos. Lo votaron en referéndum, a pesar de que su primitivo color era azul.

castillo condes chinchon
Castillo de los Condes

La plaza ha sido escenario de múltiples actividades: mercado, corral de comedias, autos sacramentales, corridas de toros y ejecuciones. El origen de las corridas fue un alanceamiento de toros que se celebró en el castillo, en 1502, en honor de Felipe el Hermoso. Las corridas se hicieron clásicas en la plaza y Felipe V la nombró Real Coso Taurino.

En 1863 el torero Salvador Sánchez, “Frascuelo”, recibió una grave cornada y fue atendido en ella. Agradecido, regaló a la ciudad el primer tabloncillo procedente de la antigua plaza de toros de Madrid y costeó dos corridas de beneficencia. Desde 1923, en octubre se organiza el Festival Benéfico Taurino, el más antiguo de España.

En ella se han rodado obras maestras del cine como La vuelta al mundo en ochenta días y Campanadas a medianoche. Se cuenta que, durante el rodaje de esta última, el actor y director Orson Welles compartía con los vecinos un “chispazo”. Así denominaba al primer aguardiente de la mañana.

En la Oficina de Turismo podrán decirte lo imprescindible que ver en Chinchón. Se ubica en el antiguo Lavadero municipal. Desde la plaza se accede al Museo Etnológico, ubicado en una antigua posada del siglo XIX. Reúne fondos sobre la historia y costumbres del lugar.

La plaza está presidida por la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Iniciada en 1534 en estilo gótico según proyecto de Alonso de Covarrubias, fue destruida y restaurada en el siglo XIX. El edificio actual, de piedra de sillería, combina elementos góticos, renacentistas y barrocos. En el altar mayor destaca el lienzo La Asunción de la Virgen. Se trata de una obra de Goya realizada en 1812 por encargo de su hermano Camilo, capellán de los Condes.

Una solitaria Torre del Reloj, único resto de la iglesia de Santa María de Gracia (s. XV) y la iglesia parroquial más antigua de Chinchón. Esto se une al hecho de que la iglesia de la Asunción no posea torre, son el motivo del dicho popular: “Chinchón tiene una torre sin iglesia y una iglesia sin torre”.

Junto a la iglesia, se encuentra el Teatro Lope de Vega. Se construyó en 1891 en el solar que ocupaba el palacio de los condes de Chinchón, derruido durante la Guerra de Sucesión. El nombre se debe a que Lope de Vega pasó una temporada en el palacio de los condes de Chinchón. Incluso llegó a escribir una obra titulada El Blasón de los Chaves de Villalba.

Con fachada neorrenacentista, el interior recuerda a una antigua corrala. Está decorado por Luis Mariel y cuenta con un espectacular telón de boca. Anualmente se celebra el Certamen de Teatro José Sacristán, denominado así en honor del actor, vecino de la localidad. Desde el mirador de la iglesia se observa una chimenea de ladrillo, resto de una fábrica de anís.

Para concluir lo que ver en Chinchón mencionaremos la Ermita de San Antón, del siglo XVIII. Levantada sobre otra anterior románica del siglo XI, la más antigua de Chinchón, de la que se conserva el ábside. Otra ermita que ver en Chinchón es la Ermita de la Misericordia, barroca del s. XVII y antigua iglesia del hospital de Chinchón.

En conclusión, esto es lo principal que ver en Chinchón.

Imprescindibles

Dónde dormir en Chinchón
Vista aérea de la Plaza Mayor
Dónde dormir en Chinchón
Teatro Lope de Vega

Datos prácticos

Coordenadas

40° 8′ 22″ N, 3° 25′ 35″ W

Distancias

Madrid 45 km

Aparcamiento

La plaza se cierra al tráfico todos los fines de semana y festivos. También los días de celebración de algún espectáculo.

Hay varios zonas de aparcamiento gratuito. A la entrada de la A-3, frente al cuartel de la Guardia Civil. A las faldas del castillo y en la plaza de San Esteban alta, detrás de la Torre del Reloj.

Altitud

763 m

Habitantes

5428 (2013)

Además de todo lo que ver en Chinchón, nada como acudir a sus fiestas. Primero, el Carnaval. Segundo, La Pasión de Chinchón (Fiesta de Interés Turístico Nacional, el Sábado Santo). Tercero, Santiago Apóstol. Cuarto, se celebra el primer encierro y corrida de toros (25 de julio). También, Nuestra Señora de Gracia y San Roque (Fiestas patronales del 12 al 17 de agosto). Quinto, La Virgen de la Misericordia (primer fin de semana de septiembre). Nuestra Sra. del Rosario (se adelanta al tercer fin de semana de septiembre). Finalmente, Festival Benéfico Taurino (octubre).

Algunos eventos a tener en cuenta son los siguientes. El Mercado medieval. Las Visitas teatralizadas. Las Noches de Jazz. Se trata de alguna de las múltiples visitas que hacer en Chinchón.

Quicile: Azulejería artística y cerámica.