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La Semana Santa en Bilbao es una oportunidad para combinar relajados paseos, visitas, gastronomía, arte y compras, con actividades de turismo activo y excursiones por el territorio de Bizkaia. Conviene reservar el Jueves Santo por la tarde y/o el Viernes Santo por la mañana para recorrer los 35 kilómetros que te separan de Balmaseda, histórica villa en la que desde 1771 se celebra una espectacular Pasión Viviente (con más de 600 figurantes).
También recomendamos informarse vía internet a la amplia programación de Basque Fest, un festival que ofrece en distintos espacios públicos y centros culturales de Bilbao lo mejor de la tradición y de la vanguardia vasca. Muy variado y para todos los públicos.
Visita a los grandes edificios de Abando
Como siempre que se visita a Bilbao, resulta imprescindibles visitar dos de los centros artísticos líderes en Europa: el Museo Guggenheim Bilbao y el Museo de Bellas Artes de Bilbao.
Actualmente el Museo Guggenheim Bilbao posee una exposición permanente: “Obras maestras de la colección del Museo Guggenheim Bilbao” dónde destacan esculturas de los maestros vascos Eduardo Chillida y Jorge Oteiza.
En el Museo de Bellas Artes de Bilbao podrás disfrutar de la exposición “Después del 68. Arte y prácticas artísticas en el País Vasco 1968-2018”, que revisa cinco décadas de arte vasco.
Muy cerca está el Museo Marítimo Ría de Bilbao, enorme espacio expositivo en el que entender la importancia histórica y económica de esta ría desde la Edad Media, disfrutando de las embarcaciones amarradas en su muelle y varadas en su dique seco. Ideal para una escapada de Semana Santa en Bilbao.
Para los aficionados a la arquitectura y/o al fútbol es muy recomendable realizar la visita guiada al próximo estadio de San Mamés, conocido históricamente como ‘la catedral del fútbol’ por su entendido público y el juego exhibido por ‘los leones’.
Un lugar recomendable para dar un paseo es el Parque de Doña Casilda de Iturrizar, para disfrutar de sus fuentes, esculturas y de un ambiente tan sosegado como romántico. Si después del paseo nos entra hambre, podemos comer en cualquiera de los muchos restaurantes y bares de la zona.
El Bilbao más religioso por las Siete Calles
Entre la mencionada área de museos y las siete calles del antiguo Bilbao está el Ensanche. Es una sucesión de avenidas y alamedas, llenas de poderosos edificios de estilo neovasco, ecléctico y modernista edificados en el último tercio del siglo XIX y comienzos del siglo XX -cuando Bilbao fue uno de los centros industriales y financieros más vibrantes del sur de Europa-. En ella destaca la rehabilitación realizada en el Azkuna Zentroa, complejo cultural-cívico-comercial que conviene visitar.
La Semana Santa en Bilbao no destaca por la asistencia masiva a las procesiones; lo que no implica que la calidad de su arte sacro sea excelente. En el Casco Viejo, muy cerca de la exquisita estación de tren de Atxuri se encuentra el Museo de Arte Sacro. Desde allí, adentrándose por la ‘siete calles’ fundacionales se accede a la gótica catedral de Santiago -pararse especialmente en su ‘puerta del Ángel’ como hace todo peregrino-.
El recorrido por la poderosa presencia cristiana en Bilbao puede continuar adentrándose hasta la plaza Tomás Meabe, visitando su vecino Museo de Pasos de Semana Santa. Si a continuación nos dirigimos a la cercana calle Prim 52, allí podemos tomar el ascensor que nos evita la empinada subida que conduce a la Basílica de Begoña, muy visitado durante la Semana Santa en Bilbao.
La Virgen de Begoña es la patrona de Bizkaia y su templo es un lugar muy querido por todos los vizcaínos. Cumplida la visita se puede regresar hacia la ría por una suave bajada hacia el Ayuntamiento. El bello palacio municipal es visitable si se reserva, destacando en él su magnífico ‘Salón árabe’.
Para quienes ya hayan visitado varias veces Bilbao y conozcan algunos de los mencionados lugares, proponemos una ruta por los lugares menos frecuentados de la villa, situados la mayoría de ellos en el Casco Viejo y su orilla opuesta. Quienes opten por hacer algo de deporte durante la Semana Santa en Bilbao, a corta distancia es posible practicar toda clase de actividades de turismo activo (ver posibilidades).
Un día en El Abra, ‘la puerta de Bilbao’
La fama y el poderío de Bilbao se deben a su puerto. Para entenderlo conviene dirigirse al Abra de Bilbao por la línea 2 del Metro, para primero visitar Portugalete; una villa de gran historia y con edificios con mucho ‘sabor’. Después se puede seguir paseando hasta la vecina Santurce, lugar en el que hay un interesante centro de interpretación de la vida marinera.
En las inmediaciones del puerto de la célebre canción ‘desde Santurce a Bilbao’ se puede probar alguna de sus célebres sardinas o pintxos típicos. A continuación hay que disfrutar de la experiencia de atravesar la ría por el transbordador del Puente de Bizkaia, uno de los más magníficos del mundo.
Ya en el señorial municipio de Getxo, aconsejamos pasear por el muelle de Evaristo Churruca para disfrutar de la panorámica del Abra. A continuación se puede pasear por el muelle en dirección a Neguri, contemplando sus parques y mansiones, así como los dos puertos deportivos. Un paseo de varios kilómetros que continúa por la playa de Ereaga hasta el llamado ‘puerto viejo’ de Algorta.
Es éste un lugar de gran ambiente a la hora del aperitivo o al caer la tarde; y un lugar de peregrinación para los amantes de la fiesta popular, pues fue allí donde se ‘inventó’ el mundialmente famoso combinado conocido como kalimotxo (ver la historia). Después de recobrar fuerzas en los bares del Puerto Viejo o la propia Algorta, el regreso a Bilbao puede hacerse tomando la línea 1 del Metro. Mucho que hacer en la Semana santa en Bilbao, motivo para quedarse con algo pendiente y así regresar pronto.
Texto de Ignacio Suárez-Zuloaga.
