Sombreros y Tocados en Galicia

No se puede hablar de los sombreros y tocados en Galicia sin pensar en la que pudiera ser su pieza más representativa: la monteira. A pesar de ello, la riqueza propia de la vestimenta tradicional gallega queda reflejada en la variedad de los sombreros que pueden complementar sus diferentes trajes. El más reconocible y simbólico de ellos, la monteira, adopta diferentes formas en función de su uso o  área geográfica pero, por lo general, suelen ser triangulares y grandes. Este clásico sombrero,en España, cuyo uso se restringe ahora a los trajes regionales, consta de cuatro partes; casquete, á, rebordo y forro. Los materiales utilizados para su confección son la felpa, el saial, la baeta o el paño.

Pese a lo que pudiera parecer por el parecido entre sus nombres, la montera de los toreros y la monteira galega son dos complementos que nada tienen que ver entre sí.

Otros ejemplos de sombrerería gallega pueden ser la boina viguesa o, en el caso de los modelos femeninos, los sombreros tradicionales de ala ancha y copa cónica baja hechos con paja. Todos estos modelos son elaborados por los artesanos de la comunidad que, además, también trabajan toda clase de sombrerería como tocados y pamelas de fiesta, turbantes, coronas de flores, peinetas y horquillas o gorras y sombreros clásicos de caballeros.

Los talleres y puntos de venta de estos profesionales que mantienen con vida el oficio de la artesanía de sombreros y tocados en Galicia se encuentran repartidos tanto en localidades del ámbito rural como urbano de la Comunidad Autónoma, concentrándose especialmente en ciudades de mayor tamaño como Santiago de Compostela o Pontevedra.

Imagen principal: Sombrerería Iglesias